El Gran Hotel Viena es un sitio ubicado en Miramar, Córdoba, Argentina. Su construcción comenzó a principio de los años 40 y para aquella época, y para aquél pueblo tan pequeño era sin dudas un lugar que generó una gran controversia por sus grandes lujos que hasta el momento no eran vistos por allí. Este hotel contaba con lujos y tecnología que no se veían durante esa época como por ejemplo la calefacción general, aire acondicionado y hasta ascensores; tenía una extensión cerca de los 7 mil metros cuadrados y era sin dudas una construcción bestial. Lo más raro de todo es que este Gran Hotel Viena sólo albergaba durante la época a gente extranjera, sobre todo a Alemanes y Austríacos. Durante toda su construcción sólo habían asignado a un hombre que se encargaba de la seguridad general del sitio y quien tenía su propia habitación en el mismo hotel. El sitio es parte de una gran leyenda que cuenta que estaba relacionado con los nazis y hasta con el gran Adolf Hitler, sobre todo con su muerte. Se dice que durante la guerra mundial este sitio no era un simple hotel lujoso, sino que se trataba de un hospital y hasta refugio de los que luchaban en la guerra.
Cuentan habitantes del pueblo que un día se vio llegar a una caravana de automóviles de color negro, y que en uno de ellos viajaba Hitler hacia el Gran Hotel Viena. También se cuenta que el guardia de seguridad apareció muerto en su habitación y que al parecer, había sido envenenado allí mismo. Luego de varios años, el nulo mantenimiento, los robos y saqueos al hotel hicieron que quebrara y fuera abandonado; pero el mayor abandono surgió en los años 70 cuando una inundación por la crecida del río hiciera que el hotel quedara totalmente en desuso y abandono.
Las personas del pueblo que también se vieron afectadas con la inundación y perdieron sus hogares, decidieron realojarse en el hotel; en una zona que no estaba tan afectada como las demás. Y es aquí cuando comienza la historia de terror, ya que los testigos decían escuchar durante las noches el ruido de alguien caminando por los pasillos y el ruido a llaves golpearse otra otras. También se cuentan historias de sombras de espíritus que vagan por los pasillos, y hasta de movimiento de muebles en la habitación en donde el guardia había muerto en el Gran Hotel Viena.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
