"Es un círculo vicioso." Ella lo sintió colgando fuera de su órbita, un dolor agudo se conectaba en su cabeza.
"El tiempo no se acelera, no se ralentiza, es violento." Ella se agarró al cable de su ojo, y lo arrancó de inmediato, el ojo cayó al fregadero.
"Te hace vivir a través de la tortura una y otra vez." Ella comenzó a poner el reloj en su ojo.
"Sin poder avanzar rápidamente fuera de ella." Se oía el sonido del chapoteo de las gotas de sangre, hasta que dio la impresión de que el reloj se ajustó a la perfección en su órbita.
"Yo soy Clockwork."
La joven de 16 años, que solía ser conocida como Natalie, se alejó de su casa y la quemó, las llamas consumieron todo, y en su interior, la jirafa ardía lentamente, junto con los cadáveres de su familia.
Algunos dicen que aún sigue viva, llevando su locura con ella, dejando muchos muertos, diciéndoles cuando decidía que su tiempo llegaba a su fin.
La única forma de detectar su presencia, es si duermes cerca de las cortinas en la noche, durmiendo a pierna suelta. Pero en la oscuridad, ella te mira, decide, se oye su tic-tac y ves el destello verde de ese ojo de relojería. Sí, ella está allí...
Tú sabes que, tu tiempo se ha acabado.