Just Us |Larry Stylinson|

15.

2 semanas después.

Era la mañana del veintinueve de agosto, un día soleado, en el cielo había un par de esponjosas y lindas nubes blancas.

Los rayos de sol comenzaban a colarse por la ventana de la habitación que compartía, el rizado con el mayor, a diferencia de muchas ocasiones esta vez los rayos de sol no fueron los causantes del que mayor despertara, esta vez fue nada más y nada menos que Harry.

-Lou-Lou.-Harry se había sentado a horcajadas del mayor y había comenzado a llamarlo por el tierno apodo que últimamente había "creado" para el mayor.-Vamos despierta.-Harry comenzó a picar la cara del mayor con su dedo índice, haciendo a Louis fruncir levemente su ceño.

-Cinco minutos más, cielo.-Louis murmuro aun con los ojos cerrados y voz ronca, Harry se rio divertido y negó, volviendo a picarle la cara.

-Vamos, Lou.-Harry siguió picando la mejilla del chico.-Hoy es el cumpleaños de Liam, los chicos ya llegaran.-Louis gruño y fue abriendo poco a poco sus ojos, cuando al fin se acostumbró a la luz, sonrió viendo la sonrisa de su pequeño.

Había ya pasado dos semanas desde que ocurrió aquel incidente en el centro comercial y habían pasado ya dos semanas y unos cuantos días desde que el menor vivía con Louis, para Louis habían sido las mejores dos semanas de su vida, no había nada mejor para el que despertarse y que su pequeño estuviera a su lado durmiendo tranquilo, lo llenaba de alegría. Para que decir que pasar sus tardes junto al chico, era algo que llenaba de dicha al chico, pero Louis sabía que eso no podría durar mucho, tarde o temprano el chico tendría que volver a su casa.

-¿Qué hora es, amor?-Louis le pregunto al rizado mientras pasaba sus manos por sus ojos, frotándolos un poco para disipar la pesadez que sentía sobre ellos. Sintió como el menor se movió un poco para alcanzar su teléfono y checar la hora.

-Las ocho de la mañana.-Harry sonrió radiante y Louis solo un quejido. Era demasiado temprano para él, volvió a cerrar sus ojos, ni loco se levantaría a esta hora.

-Lou, no te duermas.-Harry volvió a picarle la mejilla, Louis soltó un gruñido y negó.

-¿Por qué tenías que despertarte tan temprano?-Harry se rio ante las quejas del mayor y se encogió de hombros, se acomodó un poco y se recostó-literalmente-sobre Louis, haciéndolo reír.

-Porque sí, me aburro, Lou.-Louis soltó una sonora carcajada y comenzó a acariciar los rizos del chico.

-¿Cuánto llevas despierto?-Louis comenzó a tararear una canción de Ed Sheeran, tal vez el chico se dormiría de nuevo, si lo mecía y le cantaba un poco.

-Una hora, no te quise despertar antes.-Harry murmuró acurrucado en el cuello del menor.-No trates de hacerme dormir, Lou.-El menor se quejó mientras se acomodaba para quedar mirando al mayor.

-¿No quieres dormir? Vamos, sé que quieres dormir acurrucado conmigo hasta las doce de la tarde.-Harry se rio divertido y negó.

-No quiero, quiero un beso, eso quiero.-Louis alzo una ceja sorprendido por la sinceridad del chico, definitivamente Harry poco a poco comenzaba a perder la vergüenza con el mayor.

-Bésame entonces, pequeño.-Louis le sonrió con cierta burla al menor, Louis siempre complacía a Harry; siempre que este le pedía algo, un simple abrazo o un beso él se lo dada, pero quería saber si el menor sería capaz de besar a Louis por su cuenta.

Harry se sonrojo furiosamente, no esperaba que Louis le respondiera así, se comenzaba a arrepentir de haberle pedido un simple beso, pero a la vez sentía ganas de besarlo y demostrarle al mayor que si es capaz de besarlo sin pudor alguno. Louis sonrió al ver que Harry de nuevo se había ido a su mundo, al parecer había ganado de nuevo, podría volver a dormir o eso creía el mayor, así hasta que sintió como Harry posaba sus labios sobre los de él.