24. Horus

29 9 2
                                    

Después de indicar a sus alumnos cual era la mejor manera de utilizar sus patronus de elemento para trabajar en equipo, el profesor Blake escrutó a su clase mientras se sentaba en la silla que había tras su largo escritorio.

Los patronus de Megan Bennet e Ian Faulkner trabajaban juntos para hacer desaparecer el patronus en forma de serpiente de Sam Kelly. Megan sonrió satisfecha cuando su gato de fuego acabó con la serpiente de tierra de su compañera. Sam miró al suelo resignada y Blake se sorprendió. Sam era una chica orgullosa y altiva, lo normal hubiera sido que se hubiera enfurecido y hubiera hecho aparecer otra vez a su serpiente para arremeter contra sus oponentes. No esperaba que se fuera a dar por vencida tan fácilmente. El profesor comprendió que su alumna no se encontraba en su mejor momento con sus amigos cuando vio como Megan cogía de la muñeca a Ian y se iba al otro extremo de la clase dándole la espalda a Sam.

"Interesante la forma de actuar de Megan Bennet" – pensó. Hacía dos días que se había presentado en su despacho.

"- Ahí tiene su libro. – dijo a la vez que soltaba un grueso y pesado libro de Alquimia sobre su escritorio. Blake apagó su pipa y tomó el ejemplar para ver si era el que buscaba y efectivamente así lo era.

Megan tenía el rostro pálido, como si acabara de enfrentarse a un fantasma. Para compensarlo, Blake agitó su varita e hizo aparecer una taza de chocolate caliente que le ofreció a su alumna.

- No – fue la respuesta de Megan, aunque al ver como su profesor la miraba con el ceño fruncido añadió. – Muchas gracias, pero no me apetece.

- Has demostrado con creces ser tan astuta y ...

- Ya sé que soy astuta. – le interrumpió Megan secamente. Desvió su mirada hacia la pipa del profesor de la que todavía salía humo. - ¿Puedo marcharme ya, o necesita que haga otro trabajo?

Levantó su mirada y Blake sintió una punzada en su interior. Por un momento pensó que se estaba enfrentando a la mirada sin escrúpulos de su jefe Robert Bennet. Megan tenía los mismos ojos que su abuelo.

El profesor negó la cabeza y le dejó marcharse.

- Gracia, Megan. – dijo antes de que se fuera. La chica se paró antes de cruzar las puertas de roble e hizo un gesto afirmativo con la cabeza."

Todavía no sabía que pensar acerca de su alumna. Estaba claro que había sido educada por Robert Bennet y que además era su nieta, pero había demostrado serle leal al ir a buscar aquel libro de la Sección Prohibida.

Lo que si estaba claro es que no tenía nada que ver con Adela. La chica de Gryffindor se había mostrado presuntuosa y altanera cuando le había agradecido que fuera al Bosque Prohibido. Aunque no había cumplido su misión exactamente, al menos se había internado en el bosque, y eso ya decía mucho de ella. Sin embargo, Megan no se había dado aires de grandeza, sino que se había mostrado fría y distante.

Siguió recorriendo la mirada por la estancia.

Alice Adams ayudaba a su compañero de casa Marshall Smith con su patronus. Este no parecía adoptar la forma de ningún animal. De la punta de la varita del chico moreno salía agua, por lo que era capaz de sacar la fuerza de los elementos que había en su interior, pero no representaba ningún tipo de figura animal.

Mientras Mina Miller trabajaba con su cisne de tierra, que en aquel momento se paseaba muy erguido ante la figura de Danny Turner.

Entonces Blake fijó su atención en aquel chico. Había hecho aparecer un patronus con forma de mono compuesto por el elemento agua. Sin embargo, Danny no parecía estar disfrutando con la clase. Estaba cabizbajo y la varita guardada, hecho que asombró notablemente a Blake.

Historias de Hogwarts I: la DécimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora