- Estoy muy preocupada ¿ Y si no sobrevive? Podría morir muy fácilmente, esto es una guerra.
- Cálmate Brisa, sabes que no puede morir hasta completar su misión. Además, es una Luz.- dice agitada Agatha intentando tranquilizar a su hija.
- Como tú madre. Pero, tuviste que exiliarte y siempre vives perseguida por tus sueños proféticos..... Y sufres mucho. No quiero que mi hija sufra tanto como tú solo porque nació siendo una Luz.
Brisa intenta calmarse aspirando el puro aire del jardín del Castillo de Oro, donde crecen flores y plantas hechas de las más brillantes piedras preciosas.
- En estos momentos extraño más que nunca a Marcus.- dice Brisa con lágrimas en los ojos verdes como la flor de esmeralda que traía en el cabello negro como una noche sin nubes ni estrellas.
- Sé que lo extrañas, pero nada puedes hacer, si no esperar a que esto termine. Y te lo aseguro, va a terminar pero...
-... No sin haber derramamiento de sangre. Ya lo habías dicho Agatha.
Agatha era muy parecida a su hija, salvo que en sus ojos verdes se podía ver una sabiduría milenaria y se podía sentir la tensión de toda la magia que la Luz guardaba dentro de sí.
-Debemos entrar, ya se acerca la noche y creo que debemos observar la próxima travesura de Siberia ¡ Hace muchas locuras mi nieta!
Agatha sonríe y se dirige con Brisa hacia el castillo reluciente y dorado al que las dos llaman hogar.
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SIBERIA 2: La espina
RandomDespués de descubrir que tenía poderes y una misión en la sangre, su madre fuera asesinada por su padre, su hermano le dijera que le gustaba como más que una hermana y su amor se olvidara de sus sentimientos hacia ella Siberia Winter tiene que lanza...