Chico de la gorra roja

El reencuentro

Eran las 7 a.m, mi despertador sonaba.

JODER ya era lunes nuevamente, iniciar de nuevo las clases me parecia tan aburrido.

Me levanté de la cama, me puse mis pantunflas cálidas, camine hasta el baño y me di una ducha.

Ya estaba preparado para ir al colegio, me subí al auto, mientras recordaba a ese chico de la peculiar gorra, no recordaba mucho su rostro, pero recordaba su gorra.

- Rápido que te van a cerrar

- Lo siento - Dije con un tono distraído.

Me salí de el auto y camine hacia mi colegio, igual, todo el día fue aburrido, normal, también el martes, el miércoles, pero el jueves pasó todo, todo comenzó directamente aquí.

Todos saliendo impacientes de el salón, con sus mochilas pesadas. Eran las 2:05 pm.

Ya era hora de salir, mientras iba en el camino vi de lejos a un chico. Lo primero que pensé: "Es el, por dios, no puedo creerlo".

Me acerque un poco más y si era él, increíblemente posible al parecer. Lo miraba, ahora llevaba una remera azul.

Lo vi por varios segundos cuando mi novia llego y tapó la mirada.

- Hola tontin, te extrañe

- Hola hermosa, ¿Qué has echo?

- Hay, fueron muchas cosas

- Cuéntame..

- Bueno esque...

Yo la miraba pero no le ponía atención, sólo la veía mover la boca, sonriendo y platicandome sobre su día, lo único que había en mi mente era ese chico.

Pasaron casi 4 minutos, cuando ella dejó de hablar y término con la pregunta " ¿tu qué? mi niño".

Yo le platique brevemente lo que había pasado, y cuando decido voltear a donde estaba el chico, ya se había ido. Lo único que hice fue ir a buscarlo, dejé a mi novia ahí, sin avisar, lo sé, estuvo mal, pero era tanta la curiosidad de conocerlo y hablar con él. De pronto alguien me tocó la espalda.

- Hola, nos topamos de nuevo - Dijo el chico, con ojos sonrientes

- H.. H hola - Estaba tartamudeando de los nervios

- No sabía que estabas aquí

- Si, cuando quieras eh. - Dije entre risas

En ese momento le habló otro chico diciéndole que ya era hora de irse.

- Debo irme

- Ah esta bien, adiós - Dije un poco desilusionado

- Oye.. ¿No quieres... Pues ¿venir con nosotros? O ¿ya han llegado por ti?

- Hoy me voy caminando así que pues, vamos

No era así, supongo que estaban en camino en recogerme, ya me imagino que me dirán cuando llegue a casa, lo típico "Debes estar ahí a esa hora, bla bla"

En fin, caminamos, él, otro chico y yo.

Comenzaron a platicar y yo solo escuchaba, después comenzaron a preguntarme cosas sobre mi vida, intentando conocerme, lo raro es que ya llevábamos vario rato hablando y nunca supe sus nombres.

- Yo me voy para ese lado - Dijo el otro apuntando hacia la izquierda

- Muy bien, nosotros vamos derecho - Dijo el chico de la gorra roja

- Bueno adiós - Se despidió de nosotros de mano

Caminábamos y caminábamos, íbamos conociéndonos más a fondo, tiene 16 años. Le gusta salir de fiesta, es un chico social, muy abierto, me pareció buena persona, pero como siempre, estaba equivocado. Su nombre es Louis.

- ¿Quieres ir a mi casa? Nos queda a dos cuadras de aquí

- Si, equis - Lo dije en un tono como si me diera igual, pero la verdad es que estaba gritando fuertemente de la emoción por dentro.

Caminamos una cuadra, y en eso la bocina de un auto suena, voltee y era mi hermana, buscándome. Le dije a él que esperara ahí y fui hacia el auto, abrí la puerta y le pregunté:

- ¿Qué paso?

- ¿Qué paso? Vengo por ti, llevo buscándote como 10 minutos, sube rápido , tengo que irme

- Esque voy a ir a la casa de un amigo

- Esta bien, pero mañana te vas caminando - Dijo en un tomo enojado pero al mismo tiempo en plan juego

- Esta bien.

Cerré la puerta de el auto, fui con él. Caminamos una cuadra más, llegamos a su casa, era una casa grande, blanca, y muy agradable el ambiente.

El sacó una llave y abrió la puerta.

- ¿No hay nadie en tu casa? - Pregunté

- No

Entramos a su habitación y me enseñó sus discos. Mientras yo los miraba el simplemente cogió otra ropa, y se estaba cambiando, a un lado de mi, yo no volteaba a verlo pero sabía que lo estaba haciendo, tenía tantas ganas de voltear, así que gire mi cabeza un poco. De pronto el me miró y dijo:

- ¿Qué estas haciendo?

- Nada sólo miraba tus bóxers, ¿Dónde los compraste? - Tratando de despistar

- En calvin klein - Se río

Después se puso los pantalones y una remera, yo estaba sentado en su cama, y el se sentó a un lado de mi, me dijo que lo mirara, gire mi cabeza y lo mire, el me miraba los labios

- ¿Qué pasa? - Dije

De pronto el acerco su cabeza y paso...

Comenzó a besarme, yo en ese momento no sabía si seguir o quitarle, así que no hice nada sólo tenía los ojos abiertos sin besarlo. El dejo de hacerlo y me dijo

- ¿Te gusta?

Yo no respondía, me sorprendí demasiado al grado de no hablar. Pensé en muchas cosas y simplemente me levanté, abrí la puerta de su cuarto y salí, también de su casa, agarré mi mochila de su sofá, y cuando iba saliendo el corría detrás de mi, me agarro de el brazo y me dijo:

- No te enojes, mal intérprete las cosas, lo siento - Me dijo sinceramente

- Esta bien no te preocupes

- Bueno, pasame tu página

- Oye... - Cuando estaba por decirle, me acerque a él y lo bese, no había nadie fuera así que no me preocupe por eso - Lo siento, no era mi intención

- No importa, me gustó, me gustas.

Estaba tan confundido que salí corriendo, no sabía a la dirección a la que estaba llendo, a la que iba, estaba asustado, corría como 6 cuadras, de pronto pase por una barda escrita con graffiti

"Dios odia a los homosexuales"