Detras del muro"no tengas miedo a lo desconocido"

Te amo.

Mecía al bebe lentamente, sus ojitos se encontraban cerrados y su manitas a medio cerrar con su largas y espesas pestañas que yacían en sus delicadas y suaves mejillas sonrojadas, simplemente era una pequeña angelita que se encontraba frente a mí, en su cuna color rosa pálido, en donde descansaba en sus suaves sabanas blancas, simplemente hermosa.

-¡Christian!

-Si- me pregunto asomándose desde el lumbral de la puerta

-¿Qué haremos con la bebe?

-La cuidaremos, será como nuestra hija, ¿te parece bien la idea?

-Me fascina pero no sé si estoy preparada para esta gran responsabilidad.

-Harás un excelente trabajo como mama ten lo por seguro.

Me atrajo hacia él y me abrazo por detrás rodeándome con sus brazos, es tan cálido que estoy segura que mee calentarían en el mas frio y ventoso invierno, este es mi hogar al lado suyo, en sus brazos, como dicen: "No hay lugar como el hogar"

-Haydee, tenemos que hablar seriamente.

-Claro te escucho

Me llevo a la cama y nos sentamos en la orilla de esta, tomando mis manos sin despegar sus ojos de los míos.

- El consejo me exige que tengo que presentarte como la luna de la manada, si no van a querer quitarme el puesto de alpha y eso no lo puedo permitir.

-Christian, no te preocupes te entiendo, puedes contar conmigo, para todo

-gracias.

-HAYDEE; CHRISTIAN... ERICA ESTA ESPERANDO UN BEBE QUE HAGO

-Nate cállate la bebe duerme.

-oh lo siento

-y no entiendo deberías estar feliz.

-sí pero, es que esto no estaba planeado no todavía, tenía tantas cosas por hacer con Érica...

-he, cuidado como hablas frente a mi sobre mi amiga.

-lo siento- dijo Nate rascándose la cabeza.

-NATE, NATE DONDE DIABLOS ESTAS SI NO SALES EN ESTE PRESISO MOMENTO NO DUDES QUE LES DARE DE COMER A LOS LOBOS CON TU ASQUEROSO CUERPO-grito mi mejor amiga Érica desde el primer piso echa una furia.

-¿Nate que le has hecho a Érica?

-Me pregunto que si se miraba gorda con un vestido y yo le dije que si, pero creo que no entendió que era una broma- dijo bajando la voz

-Viejo eres hombre muerto- dijo Chris dando pequeñas palmadas en el hombre de su amigo mientras soltaba pequeñas risas- suerte

-Estoy muerto, Dios ESTOY MUERTO, ¿POR QUE?

- Oh vamos fuera antes de que despierten a Leyna.

-¿Leyna?- dijeron en coro Nate y Christian

-Si, así he decidido llamar a este pequeña princesita.

-OH NATE ERES HOMBRE MUERTO.

-escóndanme- suplico Nate la verdad era divertido verlo en esta situación, y sabia que Érica cumpliría su promesa es muy vengativa.

-NATE SAL DE DONDE QUIERA QUE ESTES- Érica cantaba con voz macabra- SAL Y TE JURO QUE NO TE DOLERA TANTO.

-Chicos ayúdenme, por favor, tengo miedo- dijo Nate haciendo pucheros con la boca

-Amigo- dijo Chirtian asando su brazo por los hombros de Nate- acepta tu futuro

-Chicos, alguno se ha preguntado ¿por qué Érica no ha subido aquí?

-Tal vez está jugando conmigo, quiere que mi muerte sea lenta y dolorosa- dijo Nate agachándose.

-AJA TE ENCONTRE CORRE POR TU VIDA HIJO DE SU MAMA.

-AYUDA

Nate salió corriendo lo más rápido que pudo escabulléndose entre los brazos de Érica para que no lo atrapara y lo matara ahí mismo, era tan divertido verlos en esas situaciones, aunque no tanto para Nate, eran la pareja perfecta.

-¿Haydee?

-Sí o no, Christian no te atrevas- ya sabía cual eran esas caritas de travieso de el, cuando movia sus cejas de arriba abajo.

-Qué pero si yo no he dicho nada, ni hecho nada... todavía

-Christian conozco esa carita tuya

-¿Cuál?- dijo moviendo nuevamente las cejas.

-Esa.

-Oh esta

Se abalanzó contra mi haciendo que los dos caigamos en la alfombra del cuarto, atacándome con cosquillas por todo mi cuerpo, hasta que se detuvo unos instantes para observar mis labios, cuando mis labios y los de él chocaron una electricidad me recorrió de pies a cabezas y de cabeza a pies, y de pronto comenzó el ataque de cosquillas.

-CHRISTIAN DETENTE, ME ARE PIS.

-Shh Leyna puede despertarse.

- oh si shh, aunque dudo que no se haiga despertado ya después de todo el alboroto.

-¿Haydee?

-si- dije mirándolo a los ojos, esos ojos verdes a los cuales estaba empezando amar eternamente, el era para mí y yo para él.

-Te amo- y mi corazón empezó a latir como loco, quería salirse de mi pecho y gritar de alegría.

-¿Christian?

-Si- dijo dudoso ante mi respuesta

-te amo- y su sonrisa parecía más grande que la del gato de Alicia en el país de las maravillas.

-Haydee, Te amo, Te amo, te amo- dijo depositando miles de besos por toda mi cara.

-te amo.

Hola, sé que no soy una "escritora" muy seguida ni la mejor escribiendo

Aunque claro esto ya lo saben

Solo quiero decir que me gustaría contar con ustedes los pocos lectores a votar y comentar

Enserio es muy importante para mí su voto y comentario

Lo quiero aunque ustedes a mi no

A.