El Joven talentoso (Novela Juvenil Cristiana).

Capítulo 40 "La reflexión"

Era la primera vez que un grupo cristiano ganaba en el FTN. Los miembros de la iglesia felicitaron al ministerio y decidieron que el día siguiente iban a celebrar todos en la casa del Pastor. Les habían dado un reconocimiento y una gran cantidad de dinero que era parte del premio.

Pablito llegó en la camioneta junto con Juli y Diana. Luego llegaron Lucy y Frank. Walter y Alex fueron los siguientes en llegar. De igual forma se encontraba Louis junto a su esposa que estaba embarazada y Dieguito estaba con su madre que también fue invitada a la celebración. Al rato llegó Emily, saludó a todos y a Alex lo abrazó.

– Que bonito es el amor – Bromeó Walter mientras Emily abrazaba a Alex.

– Es mejor que cierres la boca sino quieres sentir los puños de una danzarina – Le espetó Emily.

– Oye, oye. Tranquilízate – Contestó Walter con una sonrisa picarona –. Es que tú y Alex hacen una buena pareja.

– Emily y yo somos solo amigos – Dijo Alex.

– Sí claro... solo amigos – Contestó él de forma sarcástica.

– Deberías de involucrarte en los asuntos de los demás y buscarte una novia – Le espetó Emily con un tono gracioso –. Ya estás muy viejo y necesitas madurar.

– Puedo estar muy viejo pero aun así las chicas me desean – Bromeó él.

– Jajajaja, sí claro – Contestó ella y empezó a reírse sin parar.

– ¿Y ella de qué se ríe? – Intervino Lucy que estaba junto a Frank.

– Las mujeres enamoradas se ríen de nada – Dijo Walter.

– Emily tiene razón – Dijo Alex –, ya tienes veintiún años y sigues soltero, al menos yo tengo diecinueve.

– Ay que tierno – Dijo Lucy presionándoles los cachetes a Alex –. Está enamorado de Emily.

– Que le dé gracias a Dios que Emily usa lentes, porque si no la espanta – Bromeó Walter.

– Chicos, chicos – Volvió a intervenir Emily –, paren ya. Alex y yo tenemos una bonita amistad, más nada.

– Las bonitas amistades de este ministerio siempre terminan en algo más – Dijo Frank con un tono de voz gracioso.

– Cómo tú y Lucy – Dijo Emily aguantando las ganas de reírse.

– ¡¿Qué?! – Exclamó Frank sonrojándose – Lucy y yo sí tenemos una amistad.

– ¡¿Amistad?! ¿Nos has visto cara de chuparnos los dedos? – Espetó a Walter y todos empezaron a echarse broma.

Ellos estaban en el salón enorme que estaba dentro de la casa del Pastor. Había unos globos y unas mesas con comida. Pablito estaba sentado junto a Juli viendo el espectáculo que tenían ellos.

– Estos chicos no maduran – Le dijo Pablito a Juli –. Siempre discuten sobre el mismo tema.

– Ellos hacen que este ministerio no sea tan aburrido – Le contestó ella y luego le dio un beso en la mejilla.

– Cuida a Diana de estos babosos – Le advirtió Pablito esbozando una sonrisa picarona.

– Tranquilo. Diana es una chica que no le gusta los hombres inmaduros.

Ellos seguían bromeando y discutiendo.

– Veo a muchos emparejados aquí. Tengo que ponerme las pilas para no ser el soltero frustrado del ministerio – Dijo Walter.