Omen: El Origen

Capítulo 5.

   Tras varias horas de vuelo, David llegó al punto donde Katarcys le había marcado como destino.

—Joven David, hemos llegado —le notificó— voy a buscar en las cámaras el rastro de ella.
—Bien, voy a subir un poco más para tener una vista panorámica y usar la visión térmica. Si son una especie de tribu y se ocultan en el bosque, han de tener algo que les brinde calor.
—Según la cámara de la gasolinera, ella ingresó al bosque a cien metros al oeste de esta posición.

   Sirius se dirigió hacia donde Kimberly había entrado y descendió al suelo para caminar.

—Kat, cambia a visión nocturna quiero ver si encuentro su rastro pero manten la visión térmica por si hace falta

   Sirius empezó a caminar con cautela atento a cualquier cosa que pudiera aparecer. Tras varias horas caminando por el bosque, Katarcys le dijo:

—Señor, detecto movimiento a sus siete.
—Bien, pasa a visión térmica y veamos que es —contestó.

   Sirius giró y vio un gran firma de calor que poco a poco se acercaba pero se detuvo cuando sintió que ya lo había visto. Rápidamente Katarcys le iluminó con varios focos del traje y cambio a la visión normal.

—Ah, es sólo un oso. Nada de que temer —dijo Sirius.

   Este se dio vuelta y de la nada apareció un tipo de unos dos metros y medio que le propinó un fuerte golpe tirandolo varios metros atrás. Sirius se levantó a enfrentarlo, tomó impulso y saltó para golpearlo en la cabeza pero el tipo se apartó en un rápido movimiento. El sujeto levantó el tronco de un árbol y con esto golpeó de nuevo a Sirius. Cuando este iba en el aire, otro brazo le golpeó la cabeza haciendo que cayera de nuevo al suelo, se levantó y giró para combatir nuevamente. Entonces se dio cuenta que ahora eran tres contra él: dos mujeres y el enorme sujeto que podría contar como dos más.

—Kat, sella el traje. Sólo por las dudas —dijo David.

   Por unos segundos el traje comenzó a sonar como un neumático al desinflarse.

—Traje sellado —notificó la computadora.
—Bien, hagámoslo.

   Sirius de nuevo tomó impulso y los sujetos corrieron hacia él, este resbaló por el suelo y golpeó a una en la rodilla, el otro sujeto intento golpearlo de nuevo en la cabeza pero Sirius hizo un giro y con el codo le golpeó en los limbales, a la tercer enemiga le dio una patada en la cabeza haciendo que también cayera. El tipo corrió hacia él y se le haventó, el sujeto quedó encima de Sirius y justo cuando iba a asestarle otro gran golpe en la cabeza, Sirius giró rápidamente y le golpeó a él en la cabeza. Se levantó y lo tiró hacia las mujeres, que ya estaban de nuevo listas para atacar. Entonces de la nada sintió otro golpe en la cabeza que lo tiró al suelo.

—Casco comprometido. Sistemas funcionando al 90% —notificó de nuevo Katarcys.

   El traje soportaba golpes aún peores por más tiempo, pero David estaba cansado y era a él a quien le dolían los golpes. "He peleado más tiempo con peores cosas" pensó David. Al estar de nuevo en pie, recibió otro gran golpe justo en la parte baja de la columna, fue fatal. De nuevo al suelo, casi incapacitado. Los cinco sujetos se acercaron a él rodeandolo. Se intentó levantar de nuevo pero otro golpe a la cabeza le llegó antes de que pudiera pensar.

—Kat... ¿Lo puedes... controlar?
—Cambiando a modo dron.

   Katarcys utilizó un rayo cegador que le dio tiempo suficiente para levantarse y, con el mazo, golpear a una enemiga en la cabeza, a otra en la cara, al enorme sujeto en el estómago y luego uno en la cabeza hacia abajo. Tomó a los otros dos restantes y ganó un poco de altura para tirarlos hacia el suelo. Dos nuevos sujetos tomaron una enorme piedra y sin que Sirius se diera cuenta, se la arrojaron por la espalda. David gritó del dolor por el peso. Ahora no tenía salida, estaba prensado. Antes de desmayarse, lo último que pudo recordar fue la alarma del traje al estar en un gran daño y ver que todos le volvieron a rodear antes de que le dieran el golpe final.