Vipassana

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*¿Qué es Vipassana?
Vipassana es una palabra que está recién empezando a difundirse en la ciudad y en el mundo fuera de los monasterios orientales.
Esta palabra significa <Ver de manera especial>, y esta manera especial es la forma objetiva de observar lo que está sucediendo a nivel mental y en el nivel físico. Otra definición que intenta describir la palabra Vipassana es <Ver la realidad tal como es>.
Esta palabra está siendo actualmente más conocida por el mundo entero, debido a que un hombre llamado Satya Narayan Goenka, Maestro de meditación Vipassana, creó un formato de curso para poder enseñar, de manera masiva, la técnica de meditación Vipassana, en solo diez días de silencio.

Cuando hice por primera vez uno de estos cursos, se abrió una perspectiva de vida que antes estaba dormida y a partir de ese momento se activó.
Después de un corto periodo de tiempo, tomé la decisión de servir como ayudante en uno de los cursos, durante diez días y fue algo increíble, aún más empezaron a definirse las ganas que existían en mí por ir en búsqueda de una disciplina que me enseñe más sobre mi propia mente.
Luego de asistir a mi primer curso como servidor, después de un tiempo volví a tomar otro curso completo de diez días. Una experiencia totalmente diferente a la primera vez, siempre algo nuevo, nada se repite en absoluto. Y ahí es cuando comenzó a suceder una comprensión un poco más clara sobre el cambio en las cosas sólidas, el cambio en todo y empecé a vivir la Vipassana, a ver en mi vida la realidad tal y como es, sin deseos de modificarla.
Sintiendo y digiriendo todo el proceso de ese año en el que asistí a mis primeros tres cursos, pasaron unos meses hasta que volví a meditar en un curso.
Volví a los meses y ahí fue cuándo más se asentó la volición de servir y practicar una nueva forma de vida más ligada a la purificación de la mente y del cuerpo. Estuve un tiempo viviendo en el centro de meditación a medida que iba asistiendo a más cursos de diez días. Hasta que apareció la idea de ir al centro de meditación en Brasil. En ese momento como ya dije, fue cuando más se afirmó la Vipassana en mi vida.
No era solo sentarse a meditar, o cumplir algo, era simplemente vivir consciente de la realidad, fue un empezar a ver las cosas como son sin el deseo de modificarlas.
Estuve disfrutando de tanto aprendizaje en ese centro de meditación en la montaña y luego volví al centro de meditación en Argentina por un periodo de primavera verano al servicio de la meditación.
Después comenzó un nuevo año, y en ese comienzo tomé el rumbo de viajar por unos meses hasta que retomé prontamente a cursar de nuevo, en un curso de meditación.
Actualmente estoy aprendiendo con sinceridad y fluidez, lo lindo y perfecto de ver la realidad como es, sin que el juicio posponga nuestra visión más clara, solo observando, pura contemplación.
El esfuerzo tiene que estar presente, pero en su justa medida, tal como cada cosa que se necesita para estar en equilibrio con nosotros mismos. Y ahora ese esfuerzo en el camino medio se está volviendo más claro de ver.
También es preciso salir por completo de creer en algo, para sentir eso que nos brinda la libertad de no tener identificaciones con nada en absoluto.

*Frente a la Muerte

Girar hasta pararse frente a la muerte.
Parece que de esto se trata, incierto?
La felicidad se trata de vivir cercano a la seguridad.
El amor se compra a cambio de fidelidad y compatibilidad.
La paz se trata de parar de hacer eso que nunca dejamos de hacer.
El odio es solo un reflejo del miedo.
La ansiedad es el cuerpo del futuro, la muestra de que no hay presente.
El ahora no existe, desapareció cuando se hizo palabra.
El ego soy Yo, si hay alguien; hay ego entonces.
El equilibrio es aburrido si es como dicen.
La danza es una extensión más de todo el arte que se expande a través de diferentes formas de expresión.
Somos esa danza donde no hay Yo.  

*Memorias

Surgen la alegría, la diversión y la risa y desaparecen...
Surgen las ganas de volar y después de un tiempo desaparecen...
Surge el entendimiento, y también desaparece.
¿Acaso algo es permanente en mi realidad?, ¿Yo no soy eterno?
Vivir una experiencia humana es como navegar en un Mar lleno de olas, con la posibilidad de hundirnos en el Agua y tener que aprender a nadar.
¿Cuanto dura esto que soy? ¿De que se trata Ser?
Es difícil de asimilar en un principio, pero hay dos realidades: La realidad aparente y la realidad más sutil y profunda. En éste caso, la realidad aparente, nos crea una capa ilusoria en la superficie de la mente, que nos hace creer que somos solo materia, que solamente hay cuerpo físico, nada espiritual ni mental puede existir. Mucho menos algo planetario. ¿Cierto?
Y la realidad más sutil, en este caso, es que no somos simplemente materia sólida, sino meras vibraciones; nuestro cuerpo es algo así como la electricidad misma. Somos un conjunto de pensamientos, ideologías, y creencias y emociones; mente, y los cuatro elementos combinados creando; cuerpo. Somos la mezcla de un cuerpo y de una mente. Por esto nos identificamos tanto con lo que pensamos y con lo que siente el cuerpo físico.
Pero todo cambia, surge y desaparece...
Esas vibraciones que nos componen están en constante movimiento, surgiendo y desapareciendo como la electricidad y la luz, nunca se vuelven estáticas, viven cambiando.
Observar el cambio en nosotros...
Aprender acerca de lo que somos...
Ver ambas realidades, lo que aparenta ser y lo que es en profundidad.
Es normal que venga una tormenta mental a base de que algo que no queríamos que suceda, sucede, y nos tomamos el asunto con mucha agitación, miedo, ira, etc. Pero cuando algo sí sale como queremos, nos extasiamos en esas sensaciones que genera lo que tanto nos gusta, apegándonos a eso.
Al generar apego a lo que nos genera sensaciones agradables en el cuerpo y en la mente; sucede que empezamos a tomar rechazo por lo que no nos gusta, creando aversión ante lo que no deseamos.
Practicar ecuanimidad, no reaccionar, solo observar...
Disfrutar lo agradable, sabiendo que no es permanente...
Aceptar lo desagradable, sabiendo que también va a cambiar. Aunque no es que tenemos que aceptar con la vista puesta en que en algún momento va a surgir algo agradable y esto desaparecerá. La aceptación tiene que surgir desde el entendimiento y la comprensión del cambio.
Desapego...
No apegarse al desapego...
Despegarse del ego...
No agarrarse de nada.  

Palabras del SilencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora