Girls like girls [ Allison Argent ]

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2. Me gustan las chicas

Después de lo ocurrido en clase Kriss y Sarah salieron de allí cuando algunos policías llegaron, lo único bueno de ello (según la pelinaranja) había sido el que las clases se habían pospuesto.

Cuando Sarah la invitó a su casa saliendo de clases en vez de como habían quedado Kriss no dudó en aceptar, después de todo, su padre no llegaria hasta horas más tarde, y sus casas estaban al lado, no sería un gran problema llegar a su hogar.

La madre de la de pecas fue por las dos chicas al instituto, en todo el camino Sarah no paró de hablar sobre que Dylan (el chico que le gustaba) le había preguntado si se encontraba bien.

En cuanto llegaron Kriss se sentó en la cama y continuó su dibujo al mismo tiempo que su amiga buscaba algo en la televisión.

—¿Qué haces? —le preguntó Sarah, la pelinaraja inmediatamente cerró su bloc.

—Nada —le respondió.

—Estabas dibujando a alguien, ¿por qué dices que nadie? —La castaña subió y bajo las cejas repetidamente—. ¿Quién era?

—Dije que nadie.

—¿Por qué me ocultas a nadie?

La pelinaranja se quedó callada.

—Sabes que puedes contarme cualquier cosa, ¿no? —intentó nuevamente.

Kriss se puso tan seria que Sarah se preocupó por lo que su amiga ocultaba.

—¿Prometes no verme de diferente manera?

—Lo prometo.

Kriss suspiró y empezó a jugar con sus dedos.

Bueno, desde muy pequeña... —se aclaró la garganta, tratando de alargar la conversación.

No, no le avergonzaba el hecho de ser lesbiana, simplemente tenía miedo de que la primera amiga que consiguió desde su mudanza se alejara de ella. Sarah te aceptará, se repetía a si misma para darse fuerza y continuar.

—Desde pequeña... —la animó Sarah.

—He tenido ¿cómo decirlo... Gustos diferentes? —dijo, pero sonó mucho más a una pregunta.

—¿Podrías ser más específica? —le pidió Sarah, demasiado impaciente.

—Me gustan las chicas —soltó y sintió un gran peso yéndose de sus hombros al mismo tiempo que llegó una gran preocupación por lo que su amiga pensara o el como fuera a reaccionar.

Sarah se dedicó a mirarla fijamente, pero solo fueron unos segundos, porque después sonrió. Kriss no podía ni imaginar lo que pasaba por la cabeza de la castaña.

—Lo sospechaba.

—¿Qué? —exclamó Kriss, preguntándose si en verdad era tan obvia.

—Y dime, ¿te parezco atractiva?

—¿En serio, Sarah?

—Muy en serio, Kriss —la mencionada rodó los ojos— ¿Tu papá lo sabe?

—Si, pero prefiere no hablar de ello.

—Que bueno que ahora me tienes a mi, para que me cuentes todo lo que necesites. Gracias confiar en mi, Kriss —la pelinaranja estaba por responder cuando Sarah volvió a hablar—. Pero no me contestaste, ¿te parezco atractiva?

—No eres mi tipo, Sarah —rió Kriss.

—Vaya —se hizo la ofendida.

❤️

Kriss estaba perdida.

Literalmente perdida.

Cuando iba a clase no encontró el camino. Ya todos estaban en sus aulas, no había forma de preguntarle a alguien. O eso creía hasta cuando chocó con Allison. Vaya suerte la suya.

—Lo siento, me perdí —se excusó.

Allison hizo un intento de sonrisa, al parecer alguien la había puesto de mal humor —Vamos para allá, ven con nosotras Kriss.

Al escuchar que Allison hablaba en plural se dio cuenta que venía con otra chica.

—Hola, soy Kriss —se presentó con una sonrisa.

—Lydia —contestó la rubio-fresa devolviéndole el gesto.

Dicho ello, las tres chicas caminaron hacia su próxima clase.

Solo para disculparme por dejar esto tan abandonado, pero he vuelto y actualizaré cada semana. Muchas gracias por quedarse si la leyeron hace mucho y también si llegaron hace poco. Nos leemos pronto❤️.