Carta 13

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Hola antiguo mejor amigo.

Mis moretones estaban a punto de desaparecer, y papá me evitaba lo mejor que podía.

Aún así lo veía aveces y nunca tocamos el tema, supongo que es mejor así.

Pero hoy estando en la escuela, en educación física y fue día de jugar voleibol.

No importó cuanto le insistí al maestro, me obligó a jugar.

Me miraste algo confundido, sabes que siempre he amado ese juego, pero mis heridas aún dolían y sabía que si me golpeaban sería el fin.

Y como lo sabía, me golpearon en la espalda.

El dolor fue insoportable, me tire al piso y el entrenador hasta entonces se espanto.

Imbécil.

Tú llegaste corriendo a mi, supongo que fue inconscientemente pero me dolía demasiado para hacerte caso, cuando me calme, insistí en que estaba bien pero aún así me llevaron a enfermería y al revisarme, notaron mis heridas.


Tú estabas ahí, no habías querido irte.

"Me caí por las escaleras" dije pero sabia que tú no lo creíste.

De regreso a casa casi corrí, pero lograste alcanzarme y me jalaste del brazo.

Hice una mueca y me soltaste al instante, luego subiste mi manga y cómo llovía el maquillaje se corrió.

Miraste las heridas un momento y luego me abrazaste.

Y por ese momento fuí feliz, tanto que casi dolía, no pude evitar llorar y tú no me preguntaste nada más.

Cuando me calme sólo entre a mi casa y no voltee a verte.

Sólo se que te extrañaba mucho y agradezco que aún te interese aunque sea un poco.

Tu antigua mejor amiga

Para Mi Antiguo Mejor AmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora