"Capitulo 7" (Editado)

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Logan

Caminaba sin rumbo alguno, necesitaba salir a fumar un cigarrillo mientras planeaba como poder deshacerme de Tomlinson de una vez por todas, estoy harto de que ese tarado sea el capitán.

La tranquila noche dejo de sentirse tranquila cuando choque con un cuerpo un poco más pequeño que yo. La peor parte es que un líquido caliente cayó sobre mi abdomen, se sentía el ardor en mi piel, pero en ese momento lo que me hizo enfurecer fue mirar mi camiseta favorita completamente manchada- joder, porque no te fijas a donde vas-

Fue lo único que pude exclamar en ese instante.
Rápidamente escuché una voz dulce y suave, pero decidí enfocarme en limpiar esa mancha lo antes posible, vi su mano- era pequeña y se veía tan suave como la seda- esta se acercó y con suavidad comenzó a limpiar con un pañuelo blanco y liso la parte manchada.

El chico al instante se disculpó, se me hizo "linda" su acción ya que por lo general, se pondría molesto y tendríamos una confrontación que llegaría a los golpes. Me sentía curioso por ver quien había sido el "tarado" que había derramado su Americano sobre mi hermosa playera, subí mi mirada, y en ese momento  vi esos hermosos ojos verdes, y esa hermosa cara,- seas quien seas, aquí estoy, aquí me tienes rendido a tus pies, no importa si esto que siento es unilateral, pero juro que soy tu es clavo de por vida- dios estaba viendo a un ángel en persona.

-descuida lindo, jamás me enojaría con un ángel como tú- trate de ser coqueto con el, pero un niño con rosas interrumpió este hermoso momento.

Por lo general acostumbro a ignóralos y seguir mi camino, pero al ver a este chico de hermosos ojos, ponerse a su altura y jugar con el, algo en mi corazón latió con más intensidad.
¿Acaso esto es lo que muchos dicen, estar enamorado?

<<Josh relajaré, acabas de conocerlo>> me dije a mi mismo.

En ese instante una idea corrió por mi mente- te compro todas las rosas que tienes en tu brazo, si haces que el chico lindo me de su nombre y una promesa de que volverá a verme.- Astuto, lo sé.

-lo haré,
Gracias a los cielos el lindo chico acepto y sonrió ante aquel cumplido que había hecho, y no era de menos, él se merecía eso y más. -Bueno creo que me debes un nombre y una promesa lindura-

Pude ver su evidente sonrojo, y anhele poder tocar esas hermosas mejillas rojas y a simple vista tan suaves como el algodón- gra-gracias, me llamo Harry, pero todos me dicen Hazz, un gusto a...- rápidamente entendí y recordé que también no le había dicho mi nombre.

-Mucho gusto Harry, soy Logan Lerman- tome su mano y deje un beso en aquella hermosa mano.
En ese instante pensé que él tendría ser mi próximo novio, no sé qué tendría que hacer para conseguirlo. Pero de algo estaba seguro; Harry serás mío, y juro que cuando te tenga jamás te dejaré ir.

Soltó una hermosa risita que me hizo morir más de la ternura por aquel chico de rizos.

El rizado miró su reloj, y rápidamente acomodó su corona de flores- bueno Logi- se tapó su boca, sumamente apenado por aquel nuevo ¿apodo?, si es que así puedo llamarlo, que me había puesto- perdón Logan-

-descuida, me gusta, solo tú puedes decirme Logi ¿de acuerdo?- a pesar de conocerlo hace 10 minutos ya me tenía embobado.

El hermoso ángel frente a mi, de nombre Harry, miró nuevamente su reloj y abrió los ojos sorprendido- Okey, debo irme me esperan en mi casa, y no quiero que se preocupen por mí- El rizado se acercó a mí y dejo un sonoro beso en mi mejilla, maldición sentí como mis mejillas empezaban a sonrojarse.
Por lo general no dejo que nadie tenga esa muestras de afecto conmigo, porque detesto a la gente sumamente empalagosa, pero contigo puedo hacer una excepción.

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