—Hey hey cachorrito, deja que la dama se vista sola — entro Ethan a la habitación, intentando reprender a Andrew. Este último se sonrojo un poco y rio con nerviosismo lo cual no entendí, aquello que había mencionado Ethan no tenía nada que ver con lo que realmente estábamos haciendo. Gire los ojos y seguí empacando, me había salvado de esa conversación tan incómoda y triste que estaba comenzando con Andrew; al fin algo bueno.
—Ella no se está cambiando- afirmo Andrew — Y aun así si la estuviera ayudando no es asunto tuyo — dijo con aire de grandeza, era la primera vez que el moreno no se dejaba intimar por Ethan aunque solo fuera una inofensiva broma.
Si claro, Charlotte
Comencé a reír ese mismo instante, me gire para ver en todo su gloria la expresión de Ethan haciendo que riera con más fuerza. No entendí porque me causaba gracia aquello, pero lo estaba disfrutando y con ganas, Andrew se mantuvo unos segundos extrañado y luego me acompaño en la risa.
Después de todo, este era mi último día con los chicos
—Esa... estuvo.. Buena — dije como pude, extendí mi puño lo choque con Andrew causándome aún más gracia, entre risas sostuve mi abdomen. Me estaba comenzado a doler.
—Ese sí que es asunto mío — afirmo Ethan posando como diva, yo seguía riendo pero un poco más bajo y con menos intensidad, fingí secarme una lágrima. Andrew ya no reía pero tenía una sonrisa de estúpido en su cara, no paraba de mirarme. Tengo algo en la cara acaso? — Pero no me quejare, la haz hecho reír hombre — el castaño me dio una sonrisa sincera, tosí disimuladamente. Esto me incomodaba, que estuvieran dos hombres fascinado porque me haya reído como loca por una cosa como esa no era normal, por alguna razón sentí que mis mejillas se teñían de carmesí. Me gire rápido y seguí empacando como si nada hubiera pasado. Escuche sus risas a mis espaldas.
Esto no podía durar demasiado, no? Demasiado bueno para mí.
Alguien se aclaró la garganta desde la entrada de la habitación, di un vistazo rápido y luego me enderece en mi lugar un poco tensa. Ethan se acomodó a un costado para que fuera más visible la vista, pero no parecía muy feliz por la visita del sujeto. Andrew tampoco lo estaba, parecía que nadie lo quería ver y él lo noto.
—Cálmense, no la pienso matar — alzo las manos en paz, fruncí el ceño. No me atrevía a dirigirle la palabra, seguro solo saldrían de mi boca blasfemias, Andrew estaba un poco detrás de mí al parecer noto que no tenía intenciones de hablar, dio unos pasos hacia delante y puso su mano con suavidad en mi espalda baja. No pude evitar volver a sonrojarme levemente.
Este no es el momento hormonas
—Necesitas algo? — finalmente hablo por mi Andrew. Simone noto la cercanía del pelinegro y parecía no agradarle mucho, puso mala cara de inmediato.
—Hablar con Charlotte, necesito arreglar algunos asuntos — dio un paso adelante pero Ethan se interpuso. Pura tensión había en la habitación se podía cortar con un cuchillo, los chicos parecían perros rabiosos... Solo pudo venir a mi mente una telenovela mexicana, puro drama. Una risilla se escapó de mi boca.
Mierda!
Me tape con ambas manos la boca, todos se giraron hacia mí. Carraspee un poco e intente parecer lo más natural posible, volviendo a tener un semblante duro. Simone sonrió por un momento con los labios cerrados, y luego volvió a estar serio pero menos tenso que antes.
—No hay nada que aclarar — mi voz tambaleo un poco, mire por un segundo a Ethan quien estaba a muy cerca de Simone, la situación era un poco extraña y hasta resultaba a ser graciosa. La diferencia de tamaños no era demasiado pero aun así se notaba el hecho de que Ethan es más alto que el general.
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PARABYTE: The Alpha
Science FictionA veces la vida es tan aburrida y monótona que deseas dormir y no despertar más. Esa sensación vivía en Charlotte constantemente desde que tuvo uso de razón. Se sentía atrapada en algo que no había elegido, en ocasiones agradecía que aquella tragedi...