Crónicas De Una Amante.||

Una tormenta de pasión.

Esa respuesta tan seria y estructurada me rondó la cabeza toda la noche, no sabía a que se refería. Sería que nada más quería pasarla bien conmigo? O es que no quería nada?. Esas palabras me rebotaban en la cabeza '' Podemos estar juntos pero sin ser algo fijo" QUE CARAJO SIGNIFICABA ESO.

No sabía bien que quería hacer ese hombre conmigo, pero igual yo no podía dejar estar con él, pues reconozco que desde ese primer día que lo había visto en aquella plaza mi corazón sintió un flechazo por él.

A la mañana siguiente, me mando un mensaje, y fue como un chute de esperanza para mi, pues si me hablaba es que algo quería aunque no tuviera nombre o quizás era yo sola la que me ilusionaba.

(MensajeDeFran): Estuvo muy bien lo de ayer,¿verdad?

(MensajeDeHelena): Obvio, aunque un poco loco, podría haber entrado alguien o escucharnos 😳

(MensajeDeFran): pero.. Te note algo rara después. ¿Hice algo que no te gustó?

(MensajeDeHelena): QUE? NO PARA NADA, No.. son imaginaciones tuyas. - Me moría por decirle que sí me pasaba, que que mierda era eso de no ser nada o ser todo pero sin tener nombre, pero iba a quedar como una loca así que no dije nada.- Estuvo fenomenal 😉

(MensajeDeFran): Ahh mejor! Entonces si te gusto lo de ayer... ¿Te apetece salir de nuevo hoy?

(MensajeDeHelena): Pensaba ir a comprar ropa...

(MensajeDeFran): No importa te acompaño...

(MensajeDeHelena): vale.. ¿En una hora fuera?

(MensajeDeFran): vale preciosa 😘

No tarde mucho en arreglarme, necesitaba verlo, no sabía el porque pero era una necesidad. Y nuevamente hay estaba él, esperándome, apoyado en su coche con una camiseta blanca con la que se podía observar claramente cada uno de sus formados músculos, nada más verlo la boca se me hizo agua.

-¿A donde quiere ir a comprar la señorita?- Me preguntó en tono burlón.

-Al centro comercial que hay a las afueras de la ciudad.- respondí yo.

Tan sólo necesitaba un vestido para una fiesta, pero yo me podía llevar horas y horas eligiendo y probando mil vestidos sin que me guste ninguno pero ese día fue diferente, el me eligió uno color azul liso, que simplemente tenía la palabra perfección escrita, y me quedaba increíble.

- Antes de irnos, me voy a regalar un capricho. - me dijo con tono intrigante.

- ¿Que quieres hacer ahora? - pregunté. Me miró con cara pícara y me tiro del brazo.

Entramos en una tienda de ropa interior, me dejó sola un momento mientras él charlaba con una de las dependientas, no entendía bien lo que hacia, pero me quede ahí esperando. Recuerdo que se me acercó una de las muchachas y comenzó a coger me las medida de mi cuerpo, sin decirme nada me llevó a un cambiador y me trajo un conjunto de encaje color negro y rojo, muy bonito.

-Ya esta pagado así que puede llevárselo puesto señorita.- me dijo la dependienta. No entendía NADA, me asomé en por la umbral del probador y lo mire, él sólo sonrió y me dijo venga!!. me vestí rápido y salí y me acerque a él.

-¿Que paso? ¿A que viene esto? ¿Este regalo?- Pregunte yo algo cabreada, era lo suficientemente libre para pagarme yo misma mis cosas y que alguien me las pagara me resultaba hasta ofensivo.

-¿Que tiene? Te dije que me iba a regalar un capricho, y algún día te lo voy a arrancar todito con la boca preciosa.- Me dejó algo choqueada su respuesta. Y uniéndola a la respuesta de la noche anterior. Llegue a la conclusión que me quería sólo para el sexo y realmente era un experto cada movimiento que hacia con sus caderas eran muy satisfactorios, pero eso significaba ¿que yo iba a ser su juguete sexual? No sabia, pero no podía tampoco decir que no a ese morenazo y menos cuando sus ojos me miraban tan penetrantes que hacían subir el calor desde lo más hondo de mí. ¿ Porque decirle que no a un poco de placer?

Salimos del centro comercial y hacia un tiempo feo, había mucho viento y el cielo estaba repleto de nubes negras.

-Parece que va a caer una tormenta de verano. Esperó que nos coja ya en casa. No me gusta conducir con lluvia.- Dijo Fran mientras nos montábamos en el coche. No hablamos mucho en el coche, puso música y yo iba a mi aire cantando.

Nada fue como dijo Fran, pues apenas íbamos por mitad del camino cuando comenzó a llover de una manera espectacular, llovía muchísimo. Así que tuvimos que pararnos en una especie de finca abandonada o algo así. Recuerdo que POR TONTA me había mojado toda la ropa pues llevaba la ventana abierta y entró mucha agua.

- Tengo una camiseta mía detrás si quieres te la prestó para que no estés tan mojada.- me dijo mi apuesto caballero, y yo obviamente accedí tenía algo de frío. No me daba vergüenza estar desnuda delante de él, pues no era la primera vez, pero algo me incomodaba, me quite la camiseta mientras le daba la espalda y espere a que me pasara su camiseta seca.- Mmmm... He cambiado de opinión ven preciosa te voy a dar calor de otra forma.

Con sus manos suaves y calientes comenzó a tocar mis pecho y mi vientre, mientras sus labios se rozaban superficialmente sobre mi cuello, yo me dejaba llevar por el momento, sentía ese calor de nuevo subir dentro de mi, sentí con mi nueva ropa íntima se humedecía, mi piel se erizo. Él tomó mi mano y la guió hasta su abultado miembro, mientras yo rozaba mi mano con éste, él desabrochó mi pantalón e introdujo una de sus manos, y jugueteo con mi zona más intima

- Mmmm veo que te calentaste rápido princesa, eso me gusta- Me dijo mientras comenzaba a jugar con mi clítoris, sentir la yema de sus dedos era tan excitante, esto me hizo gritar de placer. Desabroche su pantalón y jugué con su miembro mientras él me masturba a mi exitosamente, pues recuerdo que sollozaba de placer, con su otra mano jugaba con mis pezones. Me besó apasionadamente, y fue bajando su boca hasta toparse con mis pezones donde jugó haciendo círculos deliciosamente. Me quitó el pantalón y me paro un momento

-Dije que iba a ser un capricho para mi, como me encantas así! Te lo quiero arrancar todo.- me dijo antes de seguir. Que me dijera eso me excitaba más. Él se quitó rápidamente la camiseta y bajo sus pantalones para que yo pudiera seguir rozando mi mano sobre su miembro, mientras él seguía masturbandome con sus dedos a la vez que besaba mi cuello y jugueteaba con mis pezones, esta casi por llegar al orgasmo y él lo sabía, por eso buscó rápido un preservativo en su cartera con la mano que le quedaba libre y me lo doy para que yo se lo pusiera se lo coloque. Yo gemía de placer me venía, lo tenía ahí!. Me cogió y me puso sobre él, apartó mis barguitas nuevas y su miembro se habría espacio en mi húmedo sexo, ambos podíamos sentir el éxtasis, como golpeaban nuestros cuerpos uno contra el otro sin compasión, su miembro entraba y salia cada vez con más fuerza , sentí que las piernas me fallan, pero un segundo las dejó de sentir, dejó de sentir todo, pero vuelve y siento mucho muchísimo, intente apretar los labios para no gritar, pero no pude contenerme y gemí fuerte, note como un calor húmedo salia de mi , él también lo noto y que le gimiera cerca de su oreja le excitaba más . Comenzó a darme más y más fuerte sin ninguna compasión y gritaba mucho. Recuerdo que grito mi nombre varias veces. Hasta que llegó al orgasmo.

HABÍA SIDO INCREÍBLE, ESE HOMBRE ME HACIA SENTIRME ÚNICA Y MUY SATISFECHA. ME ENCANTABA.

Hacia rato que había escampado, así que nos vestimos y fuimos camino a casa. Aparcó enfrente de mi puerta. Intente bajar pero el tomó mi brazo.

-Ha sido increíble, eres maravillosa Helena.- me dijo mirándome a los ojos, mientras yo lo miraba fijamente mordiéndome el labio, me beso y se despidió.- Ya hablamos por mensaje preciosa.😏

No sabía bien que pensar. Pero estaba muy emocionada, me había dicho que era maravillosa y que estar conmigo había sido increíble. Además había gritado varias veces mi nombre mientras hacíamos el amor, se podía llamar hacer el amor a eso o sólo era sexo. NO SABÍA PERO ESTABA EMOCIONADA Y NO ME IBA A QUITAR ESA FELICIDAD DE ENCIMA.