Los días pasaron lento, todos estabamos demasiado angustiados por lo que pasaba, los chicos seguían llendo a la universidad, no podían parar sus vidas por Dereck, había hombres que los cuidaban por todos lados, los demás estudiantes los observaban a cada instante y los profesores se sentían incómodos, ya lo habían expresado hace dos días, pero Jason se encargo de que no siguieran molestando, y ellos no querían tentar su suerte.
Agnese y yo estabamos bien, o al menos lo intentábamos, yo últimamente había estado fuera de casa, la pérdida de mercancía había afectado nuestros negocios, pero por suerte todo se había arreglado, aunque ahora todos estaban más paranoicos con la seguridad de las bodegas, Stefano había contratado a unos ex agentes de la D.I.A, ellos se encargarían de la seguridad de las casas, de las bodegas, de todo.
Eran de confiar segun él, pero aún así yo tendría un ojo puesto encima de ellos.En cuanto a Cailin, ella había estado en modo zombie, yo había querido arreglar las cosas, pero todo este ajetreo me dejaba fuera de sus horarios, de hecho era la primera vez que pasaba todo el día en casa.
Con Theo las cosas también seguían tensas, y con los demás trataba de que las cosas no cambiaran, no necesitaba más problemas, ya tenía suficientes.-La comida esta lista.-hablo mi abuelo, Adam estaba parado justo en la entrada de la sala. Todos lo miramos y sonrieron, hacia mucho no comíamos juntos, en familia.
-Ire a por Agnese.-anuncié.
Todos asintieron.
Subí por las escaleras hasta llegar al pasillo, camine con una sonrisa en el rostro, seguro la comida estaría deliciosa. Abri la puerta de la habitación y Agnese no esta ahí, mire a la puerta del baño y estaba cerrada, seguro estaba ahí. Me acerque a tocar la puerta pero su voz me detuvo.
-Crei que no responderias.-hablo en un susurro apenas audible.
-Necesito verte.-silencio.
-No, él no lo sabe, por favor Alaric, lo necesito.-todas mis alarmas se encendieron.
-Quiero pedirte un favor.-supuse el tardo en contestar, porque el silencio se hizo presente.
-Joder callate, él no lo sabrá.-más silencio.-Bien, ahí nos vemos, confio en ti Alaric, te necesito.-se escucho los pasos y actue como si no hubiera escuchado nada.
Toque antes de que ella saliera.-¿Amor?.-pregunte, mi voz salio en un hilo. Me aclare la garganta.
Agnese abrio la puerta y me dio una sonrisa resplandeciente, no le creí.
-¿Qué pasa?.-paso por mi lado evitandome.
-La comida está lista, vamos.-señale la puerta.
-Vamos.-ella salio y yo la segui.
Ibamos bajando las escaleras cuando volvi hablar.
-¿Qué hacías?.-le pregunte.
Ella se encogio de hombros, me miro y sonrio.-Nada, en realidad, escuchaba un poco de música, después me aburrí y ya.-asentí.
En mi cabeza un millón de cosas aparecieron, ella estaba escondiendo algo. Estaría muy pendiente de ella, yo tenía que estár presente cuando se encontrara con Alaric, algo en esa reunión iba a servirme.
Entramos a la cocina y Jason me miro.-Tardaron demasiado.-Agnese me miro confundida.
-Apenas hace un momento le dije a Agnese, antes me entretuve con algo. Volteé a mirarla y se veía nerviosa, le sonrei, ella no podía dudar de mi.
La comida paso rápida, hablamos de todo un poco, y por un momento me permití disfrutar de la compañía de mi familia, ellos eran todo para mi. Agnese reía por algo que le había dicho Theo, la mire y sentí el impulso de sacarla de ahí y obligarla a decirme porque hablaba con Alaric, pero me dije que pronto lo sabría, pronto las mentiras saldrían a la luz.
ESTÁS LEYENDO
Duncan.
Teen FictionSegunda parte de Caín. Es necesario leer la primera parte, para entender esta historia. Él era un chico serio, frío, controlador y sobre todo impulsivo. Duncan Bosetti era el chico con el que toda chica quería estar, era guapo, sexy y jodidamente...