Fourfold trouble - Los Cuatrillizos Tomlinson.

CAPITULO DOS.

Capitulo 2-

una semana después.

Aquí estoy, en camino a la nueva casa con Niall dormido y babeando en el asiento del camión mientras yo miraba "una noche en el museo" en la televisión de aquel transporte. No tenía nada mejor que hacer eso era seguro. 

"I'M IN MIAMI BITCH!" Chilló alguien frente a mi. Habíamos llegado al fin. Y con eso una ola de gritos le siguieron, me uní mientras empujaba la cabeza de Niall, ¡pero el oso parecía inmune a las maneras de despertar!

- Niall - dije y comencé a moverlo, el se acomodo mejor sin despertar - JODIDO ENANO YA LLEGAMOS!

- Sht.- Me silenció el muy idiota.

- NIALL- Grite, el un poco molesto se acomodo en el asiento.

- ¿QUÉ DALLAS QUÉ?

- Llegamos- dije y moví mis pestañas.

- Al fin.-susurró. 

- Chicos favor de salir primero las filas de enfrente y...- La pobre mujer ni siquiera terminó de hablar cuando todos ya la estaba arrollando en un desesperado intento de bajar del autobús. Si no fueran tantas horas de viaje esto no pasaría. 

Niall llamó un taxi y en un dos por tres llegó. Para nada como en Seattle. 

La familia Horan siempre fue de gran fortuna y tenían casas por todos los lugares bonitos de Estados Unidos. La madre y padre de mi mejor amigo me adoraban y pensaban que sería bueno que Niall tuviera al fin un poco de responsabilidad al vivir lejos de ellos y pensaban que yo era una buena influencia. Mi padre pensaba todo lo contrarió respecto a Niall, pero el fue el de la idea de que me fuera.

- Hace años que no estaba aquí.- Susurró Niall con una sonrisa mientras entrabamos a un vecindario con bonitas casas muy al estilo playero e inclusive el mar se escuchaba y se veía perfectamente.

- Es hermoso este lugar Nialler.

- Si que lo es ¿huh?

Bajamos con un montón de maletas a nuestros costados. Niall miro la casa vecina sonriendo aun más; podría jurar que ya no sentía las mejillas.

- ¿Seguirán viviendo ahí?- dijo para si solo.

- ¿Quién?

- Ah nadie- seguro un par de chicas que ahora serían grandes por lo cual iban a tener la atención del querido y mujeriego rubio, que venía vestido por cierto con sandalias y una camisa de tirantes que me hacía preguntarme ¿ya para que se ponía camiseta? es decir, podría andar desnudo de la cintura para arriba e iba ser exactamente lo mismo. 

- Aquí esta la llave- dijo con entusiasmo y tomó mi mano- Vamos preciosa- tomo algunas maletas y comenzó a caminar hacía el interior de la enorme casa, apenas pusimos un pie adentro me quede impactada, la casa estaba genial, solté lo que traía para correr al otro lado del lugar, donde la pared derecha que daba a la playa había sido remplazada por una misma pared de cristal y puertas del mismo material dejando ver lo cercano de la playa.

- ¡NIALL ESTA GENIAL!- grite.

- Si supongo, casa de verano amor- dijo riendo- Te daré el cuarto de mis padres, quiero el mio y de Greg- levante una ceja.

- Podría dormir tirada en la playa-

- Pues sería mejor que consiguiéramos tu propia llave por que eso podría llegar a pasar- dijo divertido.

- Y no me afectaría en mucho, me encanta Niall.

- A mi también.

- Ok ya estamos aquí, las maletas dentro, nuestra nueva vida esperando, así que es momento de poner reglas.