Ligh Earth

Capitulo 10: Ataques en el bosque

Yo sé que dibujo literalmente espantoso pero así es como me imagino este capítulo.

Eran las 3 am, aún era de noche, llevaban cuatro horas durmiendo el primer grupo y ahora les tocaba a los otros.

Astrid se encargó de despertarlos y hecharles un pequeño chorro de agua a cada uno para tenerlos alertas.

Lucía se sentía cansada pero no podía ser desconsiderada con los demás, Drew miraba a todos los lados con la piel erizada.

Clarrise de repente volvió a caer, todo su cuerpo temblaba y sudaba.

—¡Clarisse, reacciona!— grito Lucía moviéndola de los hombros.

Lleguen a la capital no pierdan el tiempo, los volverán a atacar.
Llévatelos, llévatelos, llévatelos...

Abrió los ojos de golpe.

—Acabo de ser advertida, volverán a atacarnos— dijo entre su respiración agitada.

Despertaron a los demás.

—¿Por qué mierda me despertaron?— pregunto irritado Connor— llevo solo tres minutos dormido

—Debemos irnos o nos volverán a atacar— la mirada de Clarisse era inexpresiva

Edward quito todas las ramas del auto, entraron asustados empujándose entre ellos, aún no se consideraban un equipo unido.

Dentro del auto los que no habían dormido se sentaron en la parte de atrás pero no podían  dormirse por lo agitados que estaban.

Drew elevaba el auto sin poder ir rápido, le costaba mucho trabajo.

—Es mejor si marcamos a un Atbus— dijo Edward

—Tardarán en llegar estamos en medio de la nada— contesto Astrid— no sabemos si están rastreando nuestras llamadas

—Hubiese traído mi auto, es solar— opino Lucía

—Pero es lento en cambio como el mío es con combustible es supersónico— atacó Connor

Empezaba a ver cierto disgusto entre ellos dos.

—Yo no veo que vayamos a una velocidad supersónica es más estamos ¡a punto de morir!— exclamó Lucía

—Vete caminando

—¡Iría más rápido que esto!

—¿Qué esperas para bajarte?

—Me bajo cuando yo quiero

—¡Cállense!— grito Drew, no puedo concentrarme.

Lucia y Connor iban de copilotos, solo giraron sus cabezas a lados contrarios enojados cruzados de brazos.

El viento estaba a su favor, soplaban fuertes ráfagas de aire, Drew las controlaba perfectamente.

Ya habían recorrido dos horas, solo les faltaban máximo 10 minutos para llegar, volaban sobre un gran río.

Drew se veía pálido, su respiración era agitada, de repente se desmayo y el auto comenzó a caer, Astrid reaccionó rápido e hizo que el agua amortiguará la caída.

—¡Drew!— grito Edward alarmado desde la parte trasera—¿tratas de matarnos?

—El no responde—informó Lucía seria— Astrid haz que lleguemos a Tierra ¡rápido!

Atravesaron todo el río en un minuto, Astrid era rápida, con un empujón de pura agua ya estaban en tierra.

—¿Qué hacemos?— pregunto Clarisse muy preocupada, acaba de conocer al chico de ojos cristalinos pero de alguna manera lo sentía cercano, era difícil de explicar.