Save Rock'n Roll (Peterick)

Capítulo 12 Rat a Tat

Una mano con uñas pintadas de negro prendieron la televisión.

La voz de la líder Courtney Love sonaba de fondo a la vez que las imágenes de miles de mujeres vestidas de cuero destrozaban instrumentos.

Era uno de esos miles de anuncios de propaganda que cada ciudadano veía en su televisor cada vez que encendía la tele.

Las imágenes solían ser casi siempre las mismas.

El símbolo de la nota musical tachada, los instrumentos rotos, la líder gritando por el megáfono,...

A veces añadían imágenes para que la gente viera que les podía suceder si le llevaban la contraria al régimen, como cuando mostraron un primer plano del cuerpo de Brendon Urie muerto.

Esa imagen, por ejemplo, hizo que Ryan se llevara días y días llorando, deseando estar muerto igual que su Brendon.

Esta vez era de nuevo esas imágenes de guitarras destrozadas y micrófonos ardiendo en el fuego de la noche.

Pero al final, añadida una imagen de apenas dos segundos de duración, de la cara sangrante de nuestro Patrick.

***

Un par de manos de uñas afiladas agarraron a Patrick por la chaqueta, arrastrándolo por un pasillo hacia una gran puerta morada.

Las mujeres tiraban de él con una fuerza sobrehumana y los tres entraron en lo que parecía un gran pabellón.

-¡¡No!! ¡¡Soltadme!! ¡¡Pete!! ¡¡Pete!!-chillaba el rubio, pero su voz se apagó cuando observó horrorizado el espectáculo que se desarrollaba ante sus ojos.

Decenas de mujeres puestas en fila, gritando con toda la fuerza que les daban sus gargantas a la vez que rompían baterías, bajos, teclados y todo aquello que pudo haber creado un sonido.

Estandartes colgando por todos lados con la corchea tachada.

Y Patrick supo que nada bueno le pasaría en ese lugar.

Lo arrastraron hasta una habitación continua, vacía si no llegara a ser por una silla rodeada de cables en el centro.

Y la imagen de esa terrible experiencia que tuvo en aquella iglesia le hizo entrar en pánico.

-¡¡NO!! ¡¡NO, NO, NO!! ¡¡POR FAVOR, NO!!-chilló, intentando zafarse del agarre de aquellas mujeres pero estaba muy débil por la gran pérdida de sangre.

Las mujeres consiguieron sentarlo en la silla y le ataron tanto pies como manos con correas de cuero.

Un proyector se encendió y una imagen se proyectó en el desnudo muro que tenía justo delante.

E ignorando sus gritos que se habían convertido en sollozos suplicantes, le conectaron dos cables uno a cada lado de la cabeza con unos parches blancos.

Los parches se activaron y unas diminutas cuchillas se clavaron en sus sienes arrancándole otro alarido.

Y las mujeres se fueron, dejándolo solo en la habitación, a la vez que una música atronadora le perforaba los tímpanos y un montón de imágenes se reflejaban como una película delante de él.

Instrumentos rotos, sangre por los suelos, Pete chillando mientras caía al suelo, Patrick en la iglesia, Andy llorando, Patrick estrangulando a Joe...

ÉL estrangulando a Joe con un sucio cable....

ÉL había matado a Joe. ÉL.

Y sus ojos de nuevo se volvieron de amarillo.