Lágrimas De Un Ángel [EDITANDO]

Confia en mi

- Haber si lo entiendo... - Dijo Peter - Has venido aquí para ayudarnos.

-Exactamente - Contestó Thomas. La camarera le había llevado un té como el de Peter y el mio.

- Y has dicho que no nos delatarías al Consejo. - Continuó Peter.

- Así es.

- No te creo - digo Peter con seguridad.

- No esperaba que lo hicieras - Se notaba de lejos que estos dos no se caían bien entre ellos. - Vuelvo a repetir que he venido aquí por Keren, me da igual lo que pienses tu.

- ¿Tu que opinas Keren? - Peter se giró a mirarme, Thomas izo igual.

- Creo que deberíamos confiar en él. - Contesté yo. - Peter intercambio una mirada conmigo. Seguidamente, se levantó y se alejó. Thomas y Alex se me quedaron mirando.

- Supongo que debería ir a hablar con el ¿no? - Dije yo con voz cansada.

- Eres la única de los 3 que lo puede seducir con un beso - Bromeó Alex. Thomas se removió incómodo en la silla

Me levanté y salí por el mismo sitio donde había salido Peter. Camino por una sèrie de pasillos pero rápidamente se acabó perdiendo. Suspiro y decidió volver atras dispuesta a encontrar al personal, para que la llevaran de vuelta donde sus amigos. Al girarse se encontró con Peter a pocos centímetros de su cara, respirando pesadamente.

- Te estaba buscando

- Lo suponía. Por cierto, no se te da muy bien buscar.

- Ni a ti dejarte encontrar.

- Puedo llegar a se muy silencioso

- Besame - Le pedí susurrando. No dudó ni un instante en poner sus labios encima de los míos. Me cogió la cintura y yo le rodeé el cuello con los brazos cerrando los ojos. Me separé abriendo los ojos. Resultó que al final, Alex había tenido razón con lo de consolar con un beso sonreí. El izo lo mismo.

- ¿Porque no confías en el? - Si quisiera delatarnos al Consejo ya lo hubiera echo hace rato.

- Keren, ¿No te das cuenta? Es la forma en que os mirais lo que me pone nervioso.

- Espera, ¿estas celoso? - Dije divertida.

- ¡No! Bueno... yo - Lo callé con un beso.

- No debes estar celoso. No me he dado ningún beso con el ni pienso hacerlo nunca. Vi como eso no ayudaba. Lo miré fijamente a los ojos. - Peter, te quiero, es la forma que tu tienes de mirarme la que me hace sonreír cada mañana a pesar de que mi situación no pueda empeorar. Son tus besos tiernos, los que hacen que a cada paso que doy piensé en ti. Y es la manera de ver el mundo de una forma tan positiva, la que me mata lentamente cuando no estás cerca. Por eso y por mil razones más te amó Peter y siempre te amaré. Pase lo que pase. Ocurra lo que ocurra nunca lo olvides.

- Keren... - Me miró con ternura. Y me besó, todo ese cariño que reflejaba... Lo amaba realmente lo amaba. Choque con una de las duras paredes del pasillo sin preguntarme siquiera como había llegado allí. Comenzó a pasarme las manos por la espalda. Mientras me besaba intensamente. - Creo que deberíamos volver. Asentí con la cabeza y sonreí.

Comenzamos a recorrer el pasillo hacia la sala de estar, cogidos de la mano y disfrutando del silencio.

- Este es el plan... Thomas y Peter se infiltraran en la base con uno de mis caramelos. Nosotros estaremos fuera, cuando Tomas y Peter encuentren a Cristina, mandarán este trozo de papel azul, con el viento donde nos encontramos. Nosotros nos teletransportaremos allí con otro de los caramelos. Una vez allí dentro, usaremos este cacharro - cogió un pequeño teléfono extraño con un botón y una pequeña pantalla. - Para desactivar todas las máquinas, para que nadie pueda pedir ayuda o detectarnos. Liberamos a Cristina, volvemos a Algelia y vivimos felices y comemos perdices. -Dijo Alex - ¡Ah! Y Peter me devuelve los 20€.

- Entonces, ¿a que estamos esperando? -Dice Thomas con una sonrisa.

De repente la puerta vuelve a sonar, y aparece una Jess furiosa y cabreada.

- ¡Peter te voy a matar!