Hora de irse

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Pov. Peter

La cabeza me daba vueltas. Me encontraba en mi habitación paseando de un rincón a otro nervioso intentando asimilar toda la información de horas antes. Era de noche y no se veía nada.

- Keren es la descendiente del primer Aldan. Keren tiene una familia. Pertenece a un lugar. Tiene un don. Ella tiene poderes. -Iba susurrando a medida que caminaba. Entonces se oyó como alguien llamaba a la puerta. Me dirigí hacia allí, y la abrí para dejar pasar a Thomas.

- Vistete rápido, tenemos que estar en la habitación de Keren dentro de 5 minutos.

- ¿Que pasa ahora?

- No lo sé. - Contestó Thomas, me vestí y salimos hacia donde se encontraba Keren. Al llegar nos encontramos a Jess, Alex y Shana en la habitación. Shana tenía su mano sobre la cabeza de Keren susurrando palabras en otro idioma con los ojos cerrados.

- ¿Que pasa aquí? -pregunte yo.

- Shana esta intentando liberar a Keren de su sueño. -contestó Jess. En ese momento Shana abrió los ojos y me miró.

- Su poder es demasiado fuerte. No puedo despertarla, no aquí.

- ¿A que te refieres?

- Me temo que tendré que llevarla a tierra de las Damas de Verde.

- Pero allí le borraran la memoria... -contesté yo.

- Creeme, no lo haran.

- ¿Como lo puedes saber?

- No la tocarán mientras yo esté viva. - Este último comentario me sorprendió, me quedé mirado a Shana mientras aún pensaba sobre lo que ella acababa de decir.

- Ire con vosotras -dije decidido.

- claro que vas a venir, os venís todos. -contestó despreocupada dejándonos de lo más confundidos.

- ¿A que estáis esperando? -preguntó dirigiéndose hacia la ventana - traer aqui a Keren, nos vamos.

- ¿Ahora? -preguntó Jess

- ¿Cuando si no? -me gire para poder coger a Keren y me encontré a Thomas con Keren entre sus brazos.

- Si no te importa, cogeré yo a mi novia -Thomas se puso rojo y bajo la mirada, yo cogí a Keren entre mis brazos. Shana parecía divertirle mucho esta escena.

- Podemos usar uno de mis caramelos para llegar -interrumpio Alex

- Prefiero ir por mis propios medios, no me fío mucho de la ciencia. -contestó Shana

- ¿A si? ¿y como piensas ir, eh? -contestó Alex molestó.

- No me subestimes Albino.

La luna brillaba alta en el cielo rodeada de las miles de estrellas que parpadeaban con una luz blanca. Bajo los rayos de luna, los ojos de Shana relucían más claros que nunca mientras está recitaba unos versos. De repente un bramido se oyó a lo lejos, un bramido salvaje lleno de libertad y nobleza. De repente en la ventana apareció un enorme ojo dorado que nos miraba divertido. Todos dimos un paso hacia atrás asustados, mientras Shana se acercaba a la criatura y le acariciaba la piel aún susurrando cosas. La magnífica criatura bramó otra vez y se apartó de la ventana dejando ver a un hermoso dragón color plata, unas hermosas alas con unas grandes plumas color plata batían furiosas en el aire sin apenas hacer ruido.

- Volar rápido Aldans. -dicho esto desplegó sus alas y voló hacia el cuerpo del dragón. Tardamos un poco en comprender lo que quería que hicieramos. Armandonos de valor nos dirigimos a la enorme bestia alada. Nos sentamos detrás. Su lomo era tan blandito como un cojin de plumas, acomode a Keren frente mi.

Lágrimas De Un Ángel  [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora