Lágrimas De Un Ángel [EDITANDO]

Huérfanos

Pov. Keren

- Levantaros niñas! Es hora de despertarse! - Como siempre la cocinera venía a despertarnos a las 8 de la mañana para poder arreglarnos i comer algo antes de comenzar las diversas actividades repartidas por el día.

De un salto me puse en pie saliendo del abrazo de las sábanas i comenze a vestirme para no llegar tarde al desayuno. Miré por la ventana. Mucha gente se quejaba de los horfanatos diciendo que eran un sitio horrible pero yo les veía un cierto encanto, y es que hacían el máximo posible para hacer que nos sintiéramos como en casa. Estábamos en una casa en la montaña, era pleno verano i siempre íbamos unos cuantos días para pasarlo bien i así descansar del aburrido ambiente del horfanato.
Vi que por la derecha se acercaba Cristina con su tipica cara de sueño. Se me escapó una sonrisa. Llevaba desde bien pequeña con ella i el tiempo nos había acabado haciendo mejores amigas. Solía quedarse dormida hasta bien tarde y después no había quien la levantara. No se como pero siempre se despertaba con sus largos cabellos negros peinados, sus ojos eran de un verde apagado i toda ella era alegría. Era la típica persona que te hace reír en los momentos más difíciles. La chica más popular del horfanato i la más deseada por los chicos, yo en cambio tenía el pelo rubio oscuro y los ojos de un azul grisáceo nada atractivo.
Bajamos a comer y nos sentamos juntas en una mesa un poco separada de las otras.

- Mira quien viene hacia aquí.- Me susurro Cris. Levante la cabeza y vi a Tom dirigiéndose hacia aquí con sus preciosos ojos café y su pelo de un marrón claro acercándose a nuestra mesa, esa manera de mirar el mundo me volvía loca

- Hola - Dijo el con un tono de voz un poco tímida - Esta ocupada ?

-No - dijimos a la vez Cris y yo.

Se sentó y estuvimos hablando un rato, fue fantástico. Nos explicó que su sueño era llegarse a convertir en medico para poder salvar vidas como la de su padre, que murió de cáncer dejándole a el solo sin familia.

- Voy al baño, ahora vuelvo - Cris me sonrió y me guiño un ojo, seguidamente se fue dejándonos a mi y a el solos. Me puse roja de la vergüenza y le sonreí tímidamente.

- ¿Puedo contarte una cosa? -Preguntó,,.

- ¡Pues claro! ¿Pasa algo?

-Me gusta Cris -Dijo con voz avergonzada, me miró esperando que me riera o algo parecido, y al ver que eso no pasaba volvió a bajar la mirada. A mi se me rompió el corazón, el era el único chico que había llegado a amar, y había llegado a pensar que el y yo tendríamos algún tipo de futuro. - ¿Te pasa algo Keren? Estas pálida dijo mirándome con esos ojos marrones.

No llegué a contestarle que tuvimos que levantarnos para ir a las habitaciones a acabar de arreglarnos.

- ¿I bien? -Pregunto Cris acercandose con una sonrisa pícara en la cara -¿Como ha ido?
¿Porque tenía que ser siempre ella la Don perfecta? ¿Porque no yo?

- Le gustas -dije yo intentado que no me temblara la voz.

-¿En serio le gusto? ¿Te lo ha dicho el? ¿Crees que querría salir conmigo? - Dijo ella ilusionada.

No me lo podía creer, mi propia mejor amiga quería salir con el chico que a mi me gustaba. Sin pensarlo estire la mano y le di una fuerte bofetada. ¿Como pudo llegar a preguntarme eso habiéndole contado lo que le había contado?

-¡Aaaauuuu! - Grito ella poniéndose la mano a la cara y frotándose la mejilla ahora roja por el golpe -¿se puede saber que te pasa a ti ahora? -me dijo con la voz dolida.
No podía escucharla, no quería ,necesitaba alejarme y me fui corriendo a la vez que mis ojos se llenaban de lágrimas.

El día pasó súper lento después de eso, ni ella ni yo nos dirigimos palabra. Al llegar la noche nos fuimos a la cama y suplicando que nadie me escuchara empezé a sollozar. No por lo que ella me había hecho, sino por lo que yo le había hecho a ella. Tenía todo el derecho a que le gustará Tom y yo había pisoteado sus sentimientos como si en la vida sólo importará yo. Pasaron horas sin poder dormirme, pero al final el agotamiento de aquel día acabo caiendo encima mío y cedí lentamente al maravilloso y peligroso mundo de los sueños.