Había llegado al Instituto temprano, Junto a Dany, Hoy no había visto a Brayan En la mañana, ni había recibido un mensaje, Nada, temo aver echó algo mal y qué el se allá molestado conmigo, lo qué platique ayer con Dany no deja de retumbar en mi cabeza, ¿me engaña?, ¿Por cuanto timpo?, ¡Dios!, No lo se, tengo tantas dudas.
--¡Cameron!--Gritó dany serca mío--Joder niña qué te hablan por haya--Mire a dónde apuntaba y si, Había un chico.
Era el mismo chico de hace unos días, ¿oh fueron meses? Diablos qué soy tan tonta recordando, Sonreí, dando las gracias, Caminé hacía aquel chico, creó su nombre era ¿Hen?, Dios no lo recuerdo con exactitud.
-Eh...Ham Hola Cameron- Dijo con una sonrisa Tímida.
-Hola mucho gusto-dije tratando de acordarme.
-No me recuerdas, cierto- Suspiro.
-Lo lamento, Soy tan tonta para recordar personas-
-No importa linda- sonrió, pero creó noto lo que Dijo, por qué su cara se volvió de un rojo intenso-No quise decirte linda, digo no es qué no lo seas, por qué tú eres muy linda pero..diablos, lo dije de nuevo, no quiero qué pienses mal se qué tienes novio pero...-
Comencé a reír por su nerviosismo, era tierno, Un chico tan alto, y qué aparenta ser de los chicos malos, nervioso, frente a una pulga como yo es muy gracioso.
-Te reiste, tú risa es linda, es mejor qué me calle-rio, rasco su nuca, de su bolsillo saco un papel-Esperó te guste, lo hice para ti...
De pronto, Un fuerte golpe hizo caer al chico, Miré quién provenía el golpe, y Miré a Brayan, rojo como un tomate por la furia, Unas rosas y un peluche tirados en el piso, Esto no iba a parar bien, y mis nervios lo decían todo.
-Yo Trayendote Flores y un estúpido peluche por lo qué paso ayer y me pagas Coqueteando con este mal nacido-Grito frente a mi.
Moría de nervios, y lo único qué hice fue apretar mis manos con la pequeña carta contra mi pecho, Brayan lo notó, me arrebató El pequeño detalle, lo abrió Y su cara se volvió aun mas roja.
-Y todavía aceptas esta clase de niñerias- rio sarcástico.
Tomé fuerzas de donde sean, para poder soltar.
-Habla el qué compró un peluche y rosas- Rei.
Su rostro se volvió serio, me sentía tan mal, Amaba los peluches y las rosas, diablos amaba qué se portara así, soy una tremenda estúpida.
-¿Si?, jamás volverás a tener un estúpido detalle de nuevo-Grito furioso y dolido.
-Dame mi carta-Suplique arrepentida de mis palabra.
-¿Quieres tú carta?, pues mira qué hago con tu estúpida carta-
Comenzó a romper la carta, frente a mi, frente a miles de estudiantes, voto los cachos en mi cara, se volteó a Ver al chico en el piso.
-No sabes el odio qué te tengo-dijo y dio un puñetazo en su boca-Odio el día qué llegaste aquí-.
Comenzó a golpear a Hen Tan brutal qué tuvieron qué separlo de el, Brayan se levantó, Miro al chico quien fue ayudado por otros dos, para levantarlo y llevarlo al la enfermería, para después mirarme a mi. Estaba muriendo del miedo, Esto iba a estar mal, Acabaría mal, dios, voy a morir.
-Nos vamos-Dijo frío y seco, me tomó de la mano, pero no fue un apretón fuerte, ni brusco, simple tomo mi mano y nos guío a su coche.
Estaba desconcertada, planeaba hablar con el, decirle si me engañaba, oh algo, jamás imagine todo esto, Qué el llegará con flores, oh qué aquel chico me hablará, jamás lo imaginé.
Entramos, el se quedo un momento callado, Tenía mi mirada hacia abajo, miré hacía abajo, sintiendo esa opresión en mi pecho por haberle dicho lo del peluche, al escuchar un sollozo, rápidamente levanté mi rostro, y mire qué Aquél chico frío y serio, estaba llorando, Estaba llorando frente a mi.
Sorprendida del momento hable.
-Brayan...-susurre, queriendo tocarlo.
-Ya no me quieres verdad, Ya no me amas, Quieres estar con el-Golpeo El Volante del auto, asegurado las cosas-Me dejaras, y te irás con el, Te olvidaras de mi, yo...Yo no quiero eso Cameron...Eres mi vida...-Dijo mirándome
Madre de dios...