Hospital

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Esta listo para encajarme esa navaja, lo veo en sus ojos.

Un momento, por qué su sonrisa se borro. Por qué ahora es un rostro de dolor. Él me soltó y se tiro al suelo agonizando de dolor.

Mire a mi izquierda y estaba Derek jadeando de lo cansado que estaba.

- Idiota...te dije que...te fueras...- pauso algunas veces.

Yo seguían en un shock sin expresión alguna. Pero en un momento de gloria, me dio por reaccionar y ver que él estaba muy golpeado.

-  D-Derek.- me tape la boca de lo sorprendida que estaba.- ven recárgate en mi.- le tome del brazo y lo pase por detrás de mí cuello para que se recargara.

- Ayer no eran tantos.

Mientras salía del callejón, unas patrullas cerraron la salida.

- Chicos, salgan de aquí.- dijo uno de los policías.- pronto vendrá una ambulancia.

- No es para tanto.

- Cállate.- dije.

Los policías nos pasaron y yo a rastras saque a Derek de ahí.

- ¡Chicos!- ellas se acercaron a nosotros.- ¡le hablamos a la policia!

- Gracias...

- E-en seguida vendrá u-una ambulancia.- dijo Charlotte temblando. Estaba muy asustada.

- Mira, ya llego.- las coreanas de esta se acercaron y cuando se detuvo unos paramédicos bajaron.

- Esta gravemente herido.- lo alejaron de mi agarre.

- Solo son golpes.

- ¡Deja de decir eso idiota!-  le dije casi llorando. Ahí se lo llevaron en la ambulancia.

- Señorita, usted venga con migo.- me dijo la señorita. Le seguí.

A mí me curaron los pocos golpes que tenía, nada grave. Lo que me preocupa es Derek. Cuando terminaron con migo fui con las chicas.

- Tenemos que ir con el.- ellas asintieron a mi propuesta.

- Disculpen, quien de ustedes es la que estuvo allí.

- Yo.- dije.

- Necesitamos hacerle unas preguntas.

- ¿Puede esperar hasta después?- tome de la mano a Katy y a Charlotte.- tenemos que ver a nuestro amigo. Corrí de ahí dejando al policía solo.

- ¡Rebeca, como pudiste hacerle eso a un policía!- dijo Charlotte.

- ¡Eso no importa!- seguí corriendo.

****

- ¡Señorita, le digo que vengo a ver a Derek Díaz!

- Lo siento, pero solo familiares pueden entrar.- su tono de voz e está hartando.

- ¡Que tan grave fue lo que le pasó!- grite al cielo.

- Señorita, al menos díganos si está bien.- dijo Charlotte.

- No se me permite darle ese tipo de información a gente que no sea familiar.- la mato.

- No te preocupes, yo haré que cante.- golpee el mostrador con mi puño.

- ¡No lo hagas Rebeca!- Charlotte tomó mi brazo intentando evitar que no la golpeara.

Sempre al tuo fianco ||1 temporada (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora