Sempre al tuo fianco ||1 temporada (En edición)

"-Como pudiste quitarmela."

Camine por el largo pasillo...era obscuro y frío.

Un gran escalofrío recorrió mi espalda, pero no podía mostrarme débil ante estos hombres. Y mucho menos ante el...

- Señorita, por aquí.- indicó el gran señor uniformado, dándome pase a una de las celdas.

Me quede un par de minutos observándolo. Cada vez con un disgusto mayor.

Quería irme pero no podía, tenía que afrontarlo, tenía que hablar con el, tenía que...verlo aunque eso me costase la vida.

- Hola...- levanto su ya delgado cuerpo de la banca, se acercó a los barrotes y la sombra le cubrió el rostro.

- Para que me querías...- conteste cabizbajo.

Narra Derek

- ¿No se tardo ya?- dije algo molesto pero sin expresión alguna en el rostro.

- Dijo que tenía asuntos que resolver, a la mejor fue a ver a sus antiguos amigos.- me contestó amablemente.

"...yo no tengo amigos".

Dudo que sea eso.

- Bueno, iré por algo de jugo.- salí del cuarto dejándola sola, baje las escaleras y me encontré de nuevo con esa señora. Sin darle mucha importancia, la ignore y fui directo al refrigerador.

- Así que ya despertaste comandante Wafle .- dijo seca.

- ¿Eh?

- No me digas que ya lo olvidaste. El sueño. Tu despertaste.- continuó.

Como sabe que estuve en...

- Es una bruja...- retrocedí y la apunte con la cajita de jugo.

- No, solo estoy así de loca.- hizo una seña con sus dedos.- y digo lo primero que se me viene a la mente.

- Bueno...- esperé unos minutos mientras le veía confundido.- ¿y sabe a dónde fue Rebeca?

- Tal vez si, tal vez no.- subió el primero, el segundo y en el tercer escalón paró.- lo único que se...es que te necesita.- vi una sonrisa corta plasmada en su rostro, esa macabra sonrisa y sincera a la vez.

Sin expresión alguna, la mire por un largo rato. Y mis ojos se abrieron más.

- ¡Donde es—

- Esta en la carcel, fue a arreglar unos asuntos pendientes.- me interrumpió y después termino de subir las escaleras.

...

Maldita niña.

Deje la caja ahí y salí de la casa.

Corrí, corrí como si no tuviera otra cosa que hacer, como si ella me estuviera llamando, como si tan solo fuera lo único que deseara...

No sabía dónde estaba ese lugar, no lo sabía, pero tratare de encontrarlo a como dé lugar.

Narra Rebeca

- Cuánto tiempo continuarás con esto...ya te dije que no planeo ayudarte en nada—

- Vamos, por favor ayúdame, te dije que no fue culpa mía si no de ella.