уσυ αяє мιиє |completa|

® capítulo XI ®

CAPÍTULO XI

—¿Como puedo hacerlo?

—No es tan difícil adivinarlo –susurré.

En unos segundos ya nuestros labios estaban juntos, ella rodeó con sus brazos mi cuello y comenzó a juguetear con mi cabello, era un beso lento, no había intensidad, era tierno, lleno de dulzura, juguetee con su labio inferior antes de separarme de ella, suspire y abrí los ojos para encontrarme con esa mirada que me tanto me mataba, me miraba algo confundida, estoy seguro de que ella no tenía idea de cómo y cuando había pasado lo anterior, ni yo la tenía, solo sabía que había pasado y para mi desgracia me había fascinado, sus labios seguían siendo igual de dulces, de delicados y de adictivos que antes.

—Yo.. –dijo ella separándose.

—Escucha.. –dije manteniendo la calma.

—No –negó con la cabeza.

—yo me voy –dijo para luego salir del lugar.

Ella estaba igual o más confundida que yo, ¡Joder! Justin, ¡¿Que acabas de hacer?!
-pensé-

Luego de pasar unos minutos dando vueltas alrededor de mi habitación me acosté en mi cama boca arriba y comencé a pensar con la mirada perdida. Ese beso no fue más que un estúpido error y se lo iba a dejar claro.

—Escucha –dije abriendo la puerta de su habitación de golpe.

—¿Qué rayos? –dijo viéndome molesta.

—Mira, no sé qué mierda pase por tu cabeza ahora, pero, ese beso que pasó anteriormente no fue más que una estupidez, un error.......

—¿Qué? –dijo observándome confundida.

—No estoy jugando –repliqué.

—olvida lo que pasó hace unos minutos –dije serio.

—¿Quien te crees? –Replicó mirándome fijo.

—Que acaso piensas que puedes venir, insinuarme que quieres que te bese y luego venir a decirme que fue una estupidez —exclamó.

—Qué importancia tiene, fue un impulso –me encogí de hombros.

—Realmente no puedo entenderte....

—Solo tienes que meterte en la cabeza que lo que ocurrió no debía pasar, es todo —dije.

—Que infierno es vivir contigo –dijo para luego sentarse en su cama y fijar su vista en la revista que tenía ahora en sus manos.

—?Te dolió que te dijera que fue un error? –Pregunté conteniendo la risa.

—¿Lo ves como un chiste? –preguntó indignada.

—Escucha, todo lo que pasó entre tú y yo, ya sea hace años o ahora es un error, una maldición, es algo inútil que lo único que me trae son problemas, olvídalo todo, haz de cuenta que nada pasó —exclame.

—¿Hasta cuando vas a actuar como si yo fuera tu marca de enemiga personal? —pregunto.

—Por favor ____, no seas inmadura....

—¿Inmadura? Estoy harta, ¿Entiendes?, harta de tener que soportar tus malcriadeces, insultos, caprichos y cambios de humor.
Te dije claramente que hicieras como si no estuviera y así podríamos convivir en paz y tú hiciste caso omiso, yo tampoco te soporto, yo tampoco quiero vivir contigo, ni tampoco deseo recordar todo lo que pasó porque me duele, pero intento superarlo, si tú vas a seguir en la misma página odiándome por siempre pues hazlo, no voy a mortificarme más –exclamó frustrada.