уσυ αяє мιиє |completa|

® Capítulo XXVII ®

CAPÍTULO XXVII

Pasaron las horas y escuché voces a lo lejos, las cuales me perturbaban e hicieron que perdiera el sueño de inmediato.
Me sentí acalorada y sin aun abrir por completo los ojos supe que no estaba sola, alguien estaba junto a mí, tal vez fuera Cait o Alice...

Abrí completamente mis ojos y los froté con cuidado quitando parte del cansancio que tenía, miré hacia mi lado para despertar a Cait cuando vi a Justin completamente dormido junto a mí sin camiseta.

Primero traté de asimilar lo que pasaba y luego reaccioné de una manera poco esperada.

Me acerqué lentamente al rostro de Justin, quien seguía completamente dormido y miré de cerca sus labios, busqué algún rasgo que le perteneciera y a la vez me desagradara o simplemente le quitara perfección, pero, fue totalmente inútil, el seguía siendo la perfecta descripción de mi chico ideal.

Me moví con brusquedad sentándome en la cama y mirándolo con cuidado, pensando si despertarlo o simplemente irme y dejarlo.

Por un momento sentí curiosidad de saber que tan bien formado estaba, quería detallarlo, rodé con mi mano la sabana descubriendo parte de su abdomen, lo miré atenta y mordí mi labio, este chico realmente sabía cómo mantenerse en forma.

—¿Curioseando? –Preguntó divertido sin abrir los ojos.

—Solo... Solo quería cerciorarme de que... Tenías... Ropa puesta –Contesté nerviosa, en parte siendo sincera.

—¿Que piensas que hicimos? –Abrió los ojos de a poco y arqueó sus cejas.

—No lo sé

—No pasó nada, pero, si quieres podríamos iniciar...

—Cállate, ahora, explícame ¿que haces a mi lado?

—Pues, tú me lo pediste –Contestó sincero.

—Si claro –Respondí incrédula.

—Así es, tengo testigos

—Dice la verdad –Dijo Cait entrando por la puerta.

—¿Que hice? –Miré a Caitlin buscando algo de consuelo y unas palabras que me aseguraran que tenía salida, pero, en cambio, solo encontré diversión en su mirada.

—Se lo pediste, estabas dormida, pero, aun así, fue orden tuya...

Me puse de pie y disparada salí de allí sin dar explicaciones, le quité las llaves a Christian y en pijama me dirigí hasta la casa.

Al llegar me di una larga y caliente ducha para luego salir y colocarme algo fresco, fui hasta Starbucks y compré un café pequeño para luego sentarme a tomármelo y pensar cómo salir de las preguntas continuas que Justin me haría.

Entonces vi a los chicos entrar en el lugar incluyendo a Bieber buscándome con la mirada, Alice dio conmigo y los condujo hasta llegar a mi mesa.

—Por lo menos debiste avisarme que te lo llevarías –Dijo Justin divertido.

—Lo siento –Me limité a responder.

Todos se sentaron y Cait comenzó a decirle a Justin todo lo que quería para ella, el solo rodó los ojos y comenzó a preguntarles a los demás que se les apetecía, ellos respondieron con seguridad y este se dirigió hasta la caja.

—Voy al baño –Dije nerviosa- ya saben, demasiado café.

—Claro –Dijo Alice burlona- disfruta tu estadía en el baño.