Cuando abrí los ojos, sonreí al darme cuenta de que estaba sobre Calum rodeada por sus brazos. Miré hacia arriba, ya que mi cabeza estaba sobre su pecho, y besé su mandíbula suavemente. Bajé a su cuello y sonreí al escucharlo suspirar cuando mordí su piel.
"¿A qué juegas, T/N?" Murmuró él con su voz ronca de las mañanas y yo reí inocentemente.
"¿Yo? A nada." Me encogí de hombros, levantándome de la cama antes de que él me pudiera abrazar otra vez.
"Nooo.. vuelve a la cama." Pidió haciendo un puchero y yo negué con la cabeza mientras me ponía mis shorts de pijama ya que sólo tenía puesta mi ropa interior y una camiseta vieja de Calum.
"No, quiero desayunar." Dije y me dispuse a salir de la habitación "Cuando te dignes a despertar un poco, baja." Le dije antes de salir y le lancé un beso.
Bajé las escaleras de su casa y sonreí al ver a Joy en la cocina.
"Buenos días, preciosa." Me sonrió ella amablemente.
"Buenos días, Joy." Le sonreí de vuelta y abrí un cajón para coger una taza como cada mañana que pasaba aquí.
"Calum aún no se ha despertado, ¿verdad?" Dedujo.
"Estaba despierto, tiene que estar a punto de bajar." Murmuré preparando mi café.
"T/N, eres la única persona que ha conseguido que Calum esté despierto un domingo a las nueve y media de la mañana." Aseguró y yo reí.
Escuché unos pasos viniendo de las escaleras y sonreí al girarme y ver a Calum entrando en la cocina.
"Buenos días, mamá." Saludó él.
"Buenos días, osito." Le contestó ella y yo sonreí enternecida.
"Aww, qué monos." Murmuré metiendo mi taza de café en el microondas.
"Chicos, me voy al salón." Dijo Joy y nosotros asentimos mientras ella pasaba de la cocina abierta al salón con su desayuno en una bandeja.
"Ven aquí." Murmuré abriendo los brazos cuando Calum me miró.
Él sonrió y rodeó mi cintura con sus brazos mientras yo rodeaba su cuello con los míos, levantándome del suelo y haciéndome reír antes de dejarme sentada sobre la encimera.
Yo rodeé su cintura con mis piernas, pegándolo a mí y él metió sus manos por debajo de mi camiseta, rozando mi espalda lentamente con la punta de sus dedos.
Me sentía bien así, muy bien.
"Te quiero, T/N." Soltó Calum y yo noté que mi corazón empezó a latir con tanta fuerza que sentía que se me saldría del pecho.
Vi que Calum lo escuchó y miró sorprendida hacia nosotros.
Esta era la primera vez que uno de los dos decía 'te quiero' desde que habíamos empezado a salir.
"Mierda, lo siento, yo.." Se disculpó él nerviosamente separándose de mí pero yo lo atraje hacia mí, dejando un beso sobre sus labios.
"Yo también te quiero, Calum." Aseguré y él sonrió.
"Qué raro se me va a hacer decirte que te quiero todos los días." Aseguró poniendo sus manos sobre mi cintura.
"Oh.. ¿me lo vas a decir todos los días?" Sonreí rodeando su cuello con mis brazos.
"Claro, para que no se te olvide." Murmuró muy cerca de mis labios y me besó "Te quiero." Susurró.
"Y yo a ti, cariño." Murmuré sobre sus labios y él rodeó mi cintura con sus brazos para pegarme más a él.
"¿Interrumpo algo?" Escuché la voz de Joy y los dos nos separamos.
"Lo siento, Joy." Me reí un poco bajándome de la encimera.
"Qué monos sois." Sonrió ella enternecida.