HIJA DE APOLO| NICO DI ANGELO

Mi padre nos visita

-Ya ha pasado una semana y no se levanta, Percy.
-Tranquilo, Will dijo que estará bien.
Parpadee una, dos, tres veces...
-¡Mira, creo que está despertando!.
Todo estaba borroso pero poco a poco pude ver con claridad.
-dónde estoy?.
-En la enfermería- dijo Percy.
-Cuánto tiempo llevo aquí?.
-Una semana- dijo Liam.
-¿Qué?!, no es cierto.
-Claro que si, después de que la furia te atacara Percy y yo entramos al campamento contigo en brazos y té trajimos a la enfermería...
Percy me acercó un vaso con algún líquido.
-Qué es eso?.
-Néctar, y un poco de ambrosía, tómalo te hará bien.
Hice lo que me dijo y al momento me sentí mejor.
-¡Guau! Sabe a Nutella, pero ¿cómo?- pregunté viéndolo.
-Sabe a lo que más te gusta.
-Genial!.
Intenté pararme y Liam me tendió una mano, la cual acepte. Salimos de la enfermería y pude ver un hermoso lugar con Cabañas formadas en forma de U, a varios chicos y chicas de todas las edades.
Entonces vi a un chico rubio como mi hermano y yo que corría hacia nosotros.
-Hey Percy! Veo que la nueva campista ya despertó.
-Hola Jason, ellos son Liam y Gigi Westerton.
-Jason Grace, hijo de Júpiter/Zeus- dijo estrechando nuestra mano.
-Versión romana, no?- pregunté
-así es - me sonrió.
- Vas hacia la casa grande?- le preguntó el rubio al azabache.
- Si, nos acompañas?.
-Claro, vamos.
Caminamos los cuatro rumbo a la "casa grande" y si le quedaba el nombre, era una casa pintada de azul y con un buen estado a su alrededor.
Entramos y pude ver a dos señores sentados, uno enfrente del otro con una mesa en medio, estaban jugando cartas, uno estaba sentado en una silla de ruedas y parecía de unos cincuenta y tantos años, y el otro tenía una camisa de leopardo y tenía cara de como que si se le hubiera pegado una gripe...
-Buenos días Quiron y señor D- dijo el rubio.
-Oh, hola chicos- dijo sonriendo sin voltear a vernos aún.
Entonces Percy carraspeó y el señor de sillas de ruedas volteo a vernos.
-oh, campistas nuevos, si es cierto se me había olvidado que los hermanos Westerton apenas hace una semana de su llegada, aunque veo que nuestra bella joven apenas despertó, me temo que no ha sido reconocido verdad joven Liam?.
-No, señor- dijo Liam.
-Entonces se seguirán quedando en la cabaña de Hermes, mientras tanto...
-Quieres que le demos el recorrido con el campamento?- preguntó Percy.
-Claro.
Y así salimos de la casa grande y me mostraron todo, los campos de fresa, los establos, las cabañas y de que dios era cada una, la arena, el lago, me enseñaron en donde entrenan los hijos de Apolo...
En eso escuchamos un sonido.
-Qué es eso?- pregunté.
-Es el que anuncia la hora del almuerzo- contestó Liam, le iba a preguntar sé cómo lo sabía pero obvio, el ya lleva una semana aquí.
Sentí como mi estomago rugía..
-venga, que se nota que tienes hambre -Dijo el rubio.
Fuimos al comedor y habían muchas mesas y como que si estuvieran organizados por categorías
-Cada mesa pertenece a un dios-dijo Percy viendo mi cara de confusión- pero en su caso como no saben quien es su madre o padre divino se sentarán en la mesa de Hermes- dijo indicándome cuál era la mesa.
Mi hermano y yo fuimos a la mesa de Hermes, me presento a los hermanos Stoll y me cayeron muy bien, me explicaron que si quería comer, solo tenía que pensar en que quería comer y ¡guala! Apareció mi comida enfrente de mi, al igual que una limonada... Me explicaron que teníamos que quemar parte de nuestra comida a los dioses antes de probarla, así que me pare y queme parte de ella.
"Por favor, reconócenos a mi hermano y a mí, padre, por favor" le rogué a mi padre
Al terminar ya de comer unos segundos antes de que todos se fueran, todos los campistas voltearon a ver a nuestra mesa y una luz dorada destiló arriba de nuestras cabezas con un símbolo de una lira.
-¡Salve Gigi y Liam Westerton, hijos de Apolo, dios del sol, de la luz, de la profesia y la música!.
Y todos se arrodillaron.
-¡Gigi! - me grito Percy a unos tres metros de mi, a su lado iba un chico rubio, ojos azules y una tez bronceada
-qué paso?.
-Te quiero presentar a alguien- y entonces voltee a ver al chico.
-Will Solance, hijo de Apolo.
-Entonces eres mi hermano?
-Así es, y soy el líder de la cabaña 7, nuestra cabaña, Liam y tu deben de instalarse en la cabaña de nuestro padre.
-Ok, entonces entro y le digo a Liam que se apure.
Entre a la cabaña y me cambie, llevaba la misma ropa rasgada y sucia de hace una semana, no podía seguir con la misma ropa, así que me la cambie....
Salimos de la cabaña de Hermes Liam y yo, y afuera estaba ya solo Will esperándonos, nos dirigió a nuestra cabaña, era dorada y en la parte de enfrente tenía dos Arcos...
Entramos y Will nos mostró nuestras camas y un baúl para cada quien.
-Pueden poner todas sus cosas acá en este baúl-dijo Will.
-Muchas gracias Will- dijo Liam.
Salimos de la cabaña y nos dirigimos a entrenar con el arco... Estiramos... Y..
-Porque los otro entrenan con la espada y nosotros con un arco?- pregunté.
-Es Nuestra especialidad como hijos de Apolo - dijo Will.
-Oh- dije mirando como Liam ya se había relacionado con nuestros demás hermanos, y se olvidaba de mi, bueno tal vez exagero pero así me sentí, digo no sabía nada de esto, evidentemente esto es nuevo para mí, y hasta ahora con el único con el que me llevo es con Will, en cuestión de hermanos... De ahí tengo a Percy y al chico Rubio... ¿Jason? Si, creo que así se llamaba...
Estuvimos entrenando varias horas, no sabía que era buen en esto, realmente me sorprendió el que le diera justo en la diana....
Después fuimos todos al Anfiteatro, antes que entráramos una luz segadora de pronto llegó, junto con un ¡calooor! Y entonces la luz se apagó. Me volví. No podía creerlo. Un coche Maserati Spyder descapotable rojo. Resplandecía. El conductor bajo sonriendo. Parecía tener mi edad y por un segundo pude ver el parecido entre mi hermano y el, el mismo pelo rubio rojizo; el mismo aspecto saludable y deportivo y casi de la misma estatura, tal vez le sobre pasaba un poco más a Liam. El conductor iba con tejanos, mocasines y una camiseta sin mangas color blanca.
-Uau, que calor!- dije entre dientes.
-Es el dios del sol, es nuestro padre- dijo Kayla.
-¡Hijos míos!- gritó el dios- ¿Qué tal? Me avisaron que dos hijos míos han llegado por primera vez al campamento.
-Así es, padre- dijo Will- son Gigi y Liam Westerton- dijo señalándonos y nuestros hermanos nos dieron espacio para que nos viera con mejor visión nuestro padre al parecer.
-Bueno, veo que han sacado mi guapura , no los culpo- dijo sonriendo orgulloso.
- A qué nos debe tu honorable visita padre?- dijo un chico.
-He venido a entregarles sus armas a sus nuevos hermanos- dijo sonriendo.
A mí me dio una pulsera de oro y a mi hermano un bolígrafo..
-¿Gracia? - dijimos ambos.
- No hay de qué hijos, sé que sabrán usarlas, obvio son hijos míos y eso los convierte es chicos geniales- dijo sonriendo y retrocediendo hacia su carro, estaba confundida, no había visto a mi padre en toda la vida y ahora solo se aparecía así por que así? Y solo ha venido unos minutos! Quise preguntar pero Will me detuvo con una mano, mientras desviábamos nuestra mirada a un lado, y entonces la luz se apago, otra vez. Estaba enojada, y confundía pero a la vez un poco feliz , voltee a ver a mi hermano, el me sonrió.
Después de eso entramos al anfiteatro, mis hermanos tienen un coro y nos dijeron si teníamos el don de cantar, Liam se rió .
-Si, creo que si lo tenemos- dijo sonriendo
-Enserio? Preguntó una chica.
-Si, tenemos o, bueno, teníamos una banda de rock, antes de venir aquí- dijo Liam con orgullo.
-Si, ambos cantamos, pero en la banda él es el vocalista, y yo estoy en la guitarra.
-Nos podrías enseñar tu don Liam?- preguntó otro chico... ¿Austin?.
-Puf, Claro- dijo Liam y yo rodee ojos
Íbamos a empezar pero en eso me di cuenta que no tenía mi guitarra, y de pronto una luz apareció frente a mi, cuando se apago la luz, pude ver mi guitarra, ¡Uau! Y una nota: " La necesitaras. Con cariño, tu adorado, asombroso y guapo, Padre"
Sonreí y suspire... Ok...

( Multimedia... les recomiendo que lo vean completo😊 )

Liam me dio la señal y empecé a tocar al igual que él empezó a cantar.
Nuestros hermanos al principio estaban como de "ok ok es bueno " pero poco a poco la canción se dio con más intensidad y fue ahí en donde todos estallaron en gritos, silbidos y aplausos.
Un poco más de la mitad unos chicos entraron también, entre ellos Percy y Jason.
Al terminar, todos nos aplaudieron y mis hermanos hicieron como gesto de " oh alabados sean los hermanos Westerton" nos reímos y nos felicitaron por nuestro talento, querían que yo cantara pero me daba pena, y les dije que quizá en otro momento, y Liam dijo que era modesta a lo cuan yo le enterré mi codo en su estómago.
Percy y Jason se acercaron junto a otros chicos
-Hey! Como están? ¡Uau! Liam, Gigi eso fue genial, estuvieron estupendos- dijo Percy.
- Gracias- dijimos ambos.
Una chica rubia de ojos grises carraspeó.
- Oh! Si, disculpen, Gigi, Liam, les presento a mis amigos...
Westerton ellos son Annabeth, Piper, Nico y Leo- dijo Percy, las chicas saludaron, menos el de negro.
-El guapo y genial Leo Valdez al servicio bella señorita y estimado joven- dijo en tono formal a lo cual sus amigos rieron y supone que el tono que había usado era en broma.
-Annabeth es novia de Percy y Piper en mi novia- dijo Jason.
-Son muy bonitas- dije siendo franca
-No más que tú- dijo la novia de Jason
Me sonroje y le dije "Gracias".
Se escuchó el sonido que avisaba que era hora de ir a cenar...
Camino al comedor me dio cuenta que a mi lado iba el chico de negro...
-Hola, soy Gigi Westerton, hija de Apolo - dije dispuesta a estrechar mi mano, pero él no me volteo a ver, así que la baje, y el solo dijo:
- Soy Nico di Angelo, hijo de Hades y desapareció dejando en su lugar como un humo negro...
Vaya tipo, sí que era especial.
Cenamos y nos fuimos a la cabaña me cambie, me puse una pijama, no sé ni cómo pero cuando abrí mi baúl había un montón de mi ropa, así que supone que fue obra de mi padre, me lave los dientes y me dormí, esa noche tuve un sueño...
............
Era un carro negro y en su adentro iba una mujer joven, demasiado joven, de unos veinticinco años, iba manejando y llevaba a dos niños rubios en la parte de atrás, miraba para todos lado, clara desesperación en sus ojos, con lagrimas, iba a 110 km/hr.
"Ya casi, ya casi llegamos" decía mientras miraba en el retrovisor, y entonces "PUUAUM" .
Y en la parte de arriba del carro había un hueco. La mujer lanzó un pequeño grito y aceleró y doblada las esquinas con fuerza como si quisiera que la cosa que iba arriba se cayera, lo consiguió. Un kilómetro más y se estacionó enfrente de una casa color blanco con café, bajo corriendo con los dos niños en brazos, se metió a la casa y bajo escaleras, bajo y bajó hasta que había una puerta entro en ella y después de esa puerta había otra más, las cerró a ambas con seguro, pero el niño comenzó a llorar, y ella lo trataba de calamar, en eso la ventana se partió en varios pedazos y en ella entró una criatura con cara de perro y alas, ella, como podía ver a través de la niebla, antes de que la criatura viera a los niños, corrió y los escondió, regreso y la criatura ya estaba completamente adentro, ella sacó su daga que una vez le regaló su amado, y peleo contra ella y justo cuando pensó que ya lo habría logrado se volteó al creer que la criatura ya había muerto, pero sintió como algo le atravesaba el corazón y todo poco a poco se volvía negro.....

Y entonces aprecio como humo, asiendo que mi sueño desapareciera, y al mismo tiempo aparecía otra escena......

Una mujer adulta entro en la misma casa color blanco con café, y al entrar a la casa vio todo destruido, su cara se lleno de horror.
"Helena! Helena!" Gritaba la mujer, peor nadie contestó.
Busco por toda la casa y no había señal alguna de vida, y entonces, bajo al cuarto que usaban en caso de algún desastre natural. Bajo, cuando un llanto, si un llanto, un llanto de algún bebe, el rostro de aquella mujer de alegro y horrorizó. Corriendo como pudo abrió las dos puertas y siguió en sonido de el llanto, se encontró a dos niños cuyos rizos dorados adornaban su cabeza. "¡Oh, mis niños!" Y lágrimas caían de sus ojos, mientras los abrazaba y los llevaba con ella a otra casa en donde habitaba una niña, que al verla llegar con los dos niños rubios y lagrimas en los ojos, corrió a encontrarla "Mamá, que pasó?, en dónde está Helena?" .
La mujer sólo dijo "Se ha ido hija, está en un lugar mejor, nos ha dejado como recuerdo a estos dos ricitos de oro" Dijo embozando una sonrisa y limpiándose las lágrimas...