Ya Es Un Año

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Nico y yo estabamos trabajando con nuestros padres, dentro de poco el campamento iniciaría nuevamente, este vendría a ser el segundo año que voy al lugar

Ya pasó un año entero desde que llegué a ese lugar y ahora siento que no sabría que hacer sin él.

Sin él y sin Nico.

El momento en el que me dí cuenta de eso fue en el cumpleaños de Percy al cual fuímos invitados.

Ambos asistimos a la fiesta por separado, ya que Nico se había dispuesto a pasar el tiempo con Hazel hasta ir. O eso fue lo que me dijo a mí.

Cuando llegó con Hazel había un invitado demás y si hubiera sido Frank abría sido genial, pero Frank ya estaba en la fiesta. Ambos llegaron acompañados por Will Solace.

Debo decir que no me parecía un mal tipo, de hecho, era absolutamente lo contrario a un chico malo, tal vés eso aumento un poco mi frustración en ese momento. Pase de estar hablando con todos en la fiesta a sonreir mientras escuchaba historias de los demás, casi taciturna, para mi suerte nadie lo notó, excepto una persona. Yo.

Estuve al pendiente de cada acción de Nico. La comida que buscaba, los comentarios que respondía (y pocas veces los que hacía), con quien estaba, y, mucho màs importante, las personas que se le acercaban.

Esa preocupación exagerada e impulsada por mis recurrentes sueños era algo que resultaba un poco insoportable. Quería preocuparme por mi y hacer lo que se me encomendó, quería poder hacer amigos de verdad y no tener ningún tipo de compromiso, quería muchas cosas y sin embargo ahí estaban. En la nada.

Cuando finalmente reflexioné hice una busqueda en chats de internet, ¿Por qué habría de actuar así? Una parte de mí en el fondo quería ignorar ese hecho en especifico, pero para mi desgracia lo confirmaron.

Había una alta probabilidad de que me gustara Nico Di Angelo.

—Estas un poco callada últimamente— Nico dijo en medio de nuestra conversación.

—¿Ah? La verdad yo me siento igual— le resté importancia al asunto, además estaba apreciando lo que ocurría en el pasado y también me distraía.

—No eres igual en absoluto a como cuando llegaste, digo, un año es mucho. Al inicio sólo parecías obligada a hacer todo, pero parecías desesperada, ahora fluyes más con las personas y te muestras segura— aclaró mientras seguía con unos documentos.

Éll tenía los juicios y yo las personas en la lista de espera (no quiero aclarar a qué)

—Me asusta el hecho de que te fijes en mí.

Nico abrió sus ojos algo sorprendido y al parecer hizo un gesto con su cabeza porque se movió un poco.

—No es eso, convivimos suficiente tiempo que me dí cuenta— Nico paró de escribir y tocó mi hombro.

¿Dondé quedo el no tocar? Ah, esa noche que le mostré South Park y dormimos juntos.

—Convivir no tiene nada que ver conconocer, diferencia las acciones y sus consecuencias, cosa oscura— quité con algo de cuidado su mamo de mi hombro y seguí con mi trabajo.

Escuché como Nico exhalaba aire de forma un poco brusca y luego no se escuchó más sonido que el de nosotros trabajando. No me gustaba en absoluto tocar estos temas con Nico, principalmente porque se pudiera notar algún efecto que tenía sobre mí (entre ellos sonrojarme). Lo que quería resguardar eran mis sentimientos y su gran posibilidad de ser dañados, aunque es bonito de alguna forma tenerlos, es mucho mejor que se encuentren ocultos.

Cuando llegaron Hades y mi padre ya habíamos avanzado una gram cantidad del trabajo que nos dejaron, eso fue algo bueno porque era mucho (realmente mucho) trabajo. Eso o me estaba volviendo cada vez más perezosa, lo cual no dejaba de ser una opción.

Mi Sirvienta |Nico Di Angelo|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora