My Gay Romance ↠ Frerard

Escalera al infierno... Para Frank

— Siéntete orgulloso de mí, Franko —fue lo primero que le dijo su amigo al llegar a su residencia. Frank se hizo a un lado para permitirle ingresar y rodó los ojos.

— Buenos días a ti también —bramó con sarcasmo, pero a Ray no pareció importarle su mal humor mañanero— ¿Debería preocuparme el hecho de que te aparezcas en mi apartamento un sábado por la mañana y no dejes de sonreír como un maniático?

— Tengo noticias para darte —anunció el rizado, mientras se abría paso a la cocina y se tomaba la libertad de tomar un trozo de tocino de su desayuno. Se sentó en la mesa y a Frank no le quedó otra que seguirle.

— ¿Noticias?

Viniendo de Ray, cualquier cosa podía ser considerada como una noticia importante. Bebió un pequeño sorbo de su jugo de naranja. Pero en lugar de responderle, Ray fijó su atención en la televisión encendida y frunció en ceño.

— Espera, ¿acaso te encuentras viendo una película de Gerard?

Frank tomó rápidamente el control y apagó el aparato, en la escena donde un Gerard vampiro se decidía sobre si debería seguir viviendo o no luego de la muerte de su amado. Era en verdad muy intensa, aún más de lo que sugería el título. Aunque en realidad no sabía que había esperado de "Escalera al infierno." Miró a su amigo, quien no parecía creerse lo que veía.

— Solo... Ya sabes, la película ya estaba allí cuando encendí el televisor y fui demasiado perezoso como para cambiarla.

— Ajá —siseó el rizado, con algo sospecha infundada en su voz— Luego llegaremos a ello. Ahora, ¿recuerdas al hermano de Gerard?

— ¿Marcos?

— Mikey. ¿Acaso nunca te aprenderás su nombre? Como sea, he estado pensando mucho en lo sucedido entre nosotros y he decidido hacer las paces con él.

— ¿Las paces?

— Así es. Me las arreglé para encontrar su número. Le llamé, le dije que sentía lo que había hecho, y lo invité a salir conmigo. Y él sorprendentemente aceptó. ¿Ya ves, Frank? Estoy corrigiendo mis errores —dijo con cierto orgullo.

— ¿Y esto debería afectarme de alguna manera o...?

— No, solo te lo estoy diciendo para que veas que a diferencia de ti yo sí creo en el karma y no tiento al destino con mis estupideces —murmuró. Frank se disponía a decir algo en contra de ello, pero Ray se le adelantó, y le alcanzó un periódico que traía doblado bajo su brazo— Y al parecer, alguien que conozco se ha estado viendo en secreto con otra persona que conozco. ¿Qué tienes para decir en tu defensa?

Frank no tenía idea de que demonios estaba hablando, no hasta que su vista se enfocó en la primera plana del periódico y entendió todo. Abrió los ojos como platos.

— No, esto... No es lo que parece —balbuceó, soltando una risita de los nervios— Gerard y yo no tenemos nada. Solo salimos a caminar y hablamos un poco, es todo.

Al parecer, algún paparazzi había reconocido a Gerard el otro día, cuando estaba con él, y les había tomado una fotografía sin el conocimiento de ninguno. Adjunto a la imagen se podía leer en letras grandes "¿El nuevo novio de Gerard Way?" y para su horror el subtítulo decía "¿Way engaña a su pareja con otro hombre?"

Frank lo cerró y lanzó a la mesa, ya no quería seguir viéndolo. Ray se cruzó de brazos, no parecía creerse mucho su declaración.

— No me molesta que tengas un amante —comenzó, luego de unos segundos de silencio— Pero soy tu mejor amigo. ¿No crees que deberías habérmelo dicho?

— Gerard no es mi amante, Raymond —espetó Frank, negando con la cabeza— Solo salimos a caminar un rato para hablar. Algún paparazzi debió de haberlo reconocido y luego tomó esta tonta fotografía para crear falsos rumores sobre nosotros.

— ¿Tú hablando cordialmente con Gerard Way? Lo siento, pero tengo problemas para creer eso —murmuró— Que te revuelcas con él a espaldas de su novio me suena más creíble. Claro, aunque no sabría decir que cosa ve en Gerard en ti, puesto que si yo tuviera a ese glorioso hombre de ojos azules como prometido... Pero siendo honesto, siempre me ha parecido que sentías un poco de atracción por Way en la escuela, y ahora que él se ve como un dios griego y es famoso, bueno...

— Detente ahí —dijo Frank, antes de que la situación se saliera más de control— En primer lugar, no me "revuelco" con Gerard, ni siquiera me gustaba durante la secundaria, por Dios Santo. Y en segundo lugar, eres mi amigo. Debes creerme a mí y no a un artículo cualquiera.

Ray lo considero por un momento, luego suspiró.

— Bien, lo siento.

— Gracias —agradeció sinceramente Frank— Tampoco creo que se vea como un dios. Quiero decir, tiene su atractivo pero no es para tanto.

— Lo que tú digas —se burló, para gran molestia del moreno. Luego dejó a un lado las risas— Aún no me cierra. ¿Porque querrías hablar con Gerard? Tenía pensado que luego de la disculpa no querías tener nada que ver con él.

— Me lo encontré en una restaurante durante mi cita con Jamia. Supongo que no pude evitar sentirme culpable por todo lo que hice —admitió, recordando su peculiar encuentro con el sujeto en los baños y como se había enterado de su amor platónico e incorrespondido hacia él— Así que pensé que sería bueno ir y hablarle, tal como si fuéramos un par de viejos amigos que no se han visto en años.

— Tú y Gerard no son amigos, Frank.

— Lo sé, todos se empecinan en decírmelo ñ.

— En fin... Ahora que has 'aclarado' los supuestos rumores —comenzó Ray, haciendo un gesto de manos mientras lo decía— Te tengo la noticia más jugosa de todas. La noticia que más placer me provoca decírtela porque sé muy bien que no te gustará.

— ¿Qué? Ya nada puede sorprenderme, Ray.

Ray sonrió— Recibí una llamada del publicista de Gerard.

— ¿Porque recibirías una llamada de su publicista? —frunció el ceño, confundido.

— Por qué al parecer él intentó comunicarse contigo y no pudo hacerlo. Así que me llamó a mí, dijo que vio las noticias en el periódico, que le gustó la atención que recibió su cliente y... —se detuvo, solo para gran exasperación del moreno.

— ¡Ya dilo, hombre!

— ... Quiere que pretendas que sales con Gerard, por un determinado período de tiempo. Y lo mejor es que yo acepté en tu nombre.