Me perdí en sus ojos

Capítulo 17

Pov Emma

-No lo voy a permitir, no otra vez Emma
-Papá, tengo 43 años, no puedes venir a manejarme la vida como si tuviera 15- hablabamos en voz baja, en la cocina de mi casa, estabamos desayunando, él había llegado esta mañana, siempre estaba de viaje por cuestiones de negocios, mí todavía "marido", lo había llamado con el chisme de qué me quería divorciar.
-No puedo permitir que trates de arruinar tu vida Emma, ya lo habíamos hablado, creí que había quedado claro
-No voy a discutir contigo
-Él que no va a discutir soy yo. Ah!, y olvidate por completo esa locura del divorció
-¡No puedes venir una vez por año a manejarme mi vida! Y ya lo decidí, no pienso discutirlo.
-Bien, pero si Esteban decide iniciar juicio por la tenencia de mi nieto... Quiero que sepas que actuare a favor de él
-No puedes hacerme eso, tu sabes todo lo que costó...
-Recuerda que no es hijo tuyo Emma
-ACEPTÉ VIVIR LA VIDA QUE QUERÍAS-Me miró furioso y baje mi tono de voz- aguanté cosas inaguantables y me dices esto... Luego... ¿Te haces llamar "papá"?- Se levantó furioso, iba a golpearme como cuando era chica, lo sé. Pero apareció mi madre.
-¿Qué pasa aquí?, ojo lo que vas a hacer Patrick
-No iba a hacer nada Clara- dijo mi padre tirando el diario con bronca y saliendo de la cocina, fue tarde cuando me di cuenta que ya estaba llorando.
-No tengo 15 mamá, tengo derecho a hacer lo que quiera
-Hija... ¿Otra vez?
Asentí y mi madre me abrazó, me sentí vulnerable, otra vez creí tener 15, otra vez creí estar equivocada, toda esa mujer fuerte y decidida que había formado durante años se estaba desmonorando en la cocina en brazos de su madre.
-No hay nada mala contigo, pero debés decidir, sabes que a tu padre no le gustan ese tipo de cosas, no nos deja bien a la empresa que peleó durante..
-No quiero el mismo discurso mamá, me importa muy poco esa maldita empresa.
-Hola amor- dijo Esteban dirigiéndose a la heladera
-No me llames así- dije entre dientes.
-Sigues con esa locura de separarte jajaja
-Eres un...
-Cuidado como le hablas, es tu marido merece respetó.

Quise mandar a todos al demonio, otra vez estaba teniendo 15 años, regañada por mis padres y obligada a ser lo que ellos creían que estaba bien? Necesitaba desahogarme.

-¿Porque no te vas de una vez de allí?- dijo Dana mi todavía "cuñada" y amiga
-Es complicado Dana, no me darán la tenencia de Valen y tampoco me dejarán llevarmelo, debo cortarte, estoy yendo a ayudar a Bea
-Suerte amiga y deja de manejar con el celular o tendrás un accidente, no te preocupes por Valen, yo me quedó con él hoy.
-Gracias por escucharme y ayudarme
-A tí por confíar en mí

Pov Lucía
Estabamos terminando de desayunar, cuando sono el timbre, me pareció raro, hoy no trabajaba, no podía ser Emma o sí?.
Cuando abrí la puerta la vi allí, su nariz roja, había llorado, su rimel corrido y su cabello alborotado.
-Emma... ¿Qué rayos...- antes que termine de preguntar se abalanzó sobre mí, me abrazó y lloró.... Parecía una niña... Se veía tan indefensa, tan rota, verla así me destrozaba por dentro.
-Sh, calma rulitos, ven- la tomé de la mano y la senté en el sillón de la sala, me senté frente a ella, en la mesita ratona -¿Qué pasa Em?- me miraba avergonzada, bajo la cabeza y se mordió el labio en un intento fallido de calmar su llanto.
-S..solo... Abrazame.. Por..por favor- hablaba entre cortado, los sollozos y la angustia que traía apenas la debaja hablar. La abracé con amor, con fuerza para que sepa que estaría allí juntando todos sus pedacitos rotos, era la primera vez que me animaba a abrazar a alguien tan... reconfortante.. Sólo lo había hecho con Sofía y con mi padre, a nadie más quise tanto para abrazar de esa manera.
-¿Quién era hija?- dijo mi madre entrando a la sala, abrió sus ojos cuando me vio abrazando a Em, le hice seña que después hablabamos y se retiró de la sala, mi Em estaba tan rota que creó que ni siquiera la oyó.

Estuvimos abrazadas un rato largo -Ven, vamos a mi cuarto, necesitas descansar- asintió y la abracé por las caderas, tenía su cabeza apoyada en mi hombro. Subimos las escaleras y se acostó en mi cama, me acosté a su lado y apoyó su cabeza en mi pecho, su respiración era más calmada, mi pecho estaba empapado de sus gotas saladas, no me importaba, lo único que quería era saber que le pasaba pero no estaba preparada, Em necesitaba que éste sin preguntas y yo estaba dispuesta a hacerlo.
-Me estoy quedando dormida- dijo con su voz tan apagada que hizo que un nudo se apodere de mi garganta, tragué saliva y respire ondo, la abracé más fuerte, la pegué más a mí como si eso fuera posible.
-Sólo duerme preciosa, prometo que me quedaré aquí a tu lado
-Gracias- suspiró
-No me agradezcas, estaré siempre para unir todos tus pedacitos rotos- sonrió débilmente -¿Porqué sonríes?
-Porqué aún estando un desastre me dices preciosa, estoy segura que estoy del asco
-Tienes mis rulos preferidos alborotados, tus ojos y nariz rojos de llorar, tu pintura corrida y tus arrugas debajo de tus ojos mojadas.. ¿Pero sabes algo?
-¿Qué? - trato de mirarme pero sus ojitos se cerraban despacito
-Aún así eres mi paisaje preferido, mi mar esmeralda favorito y mí único lugar en el mundo donde quisiera estar.
No estoy segura si me escuchó, cuando me percaté ella ya estaba dormida, suspire y besé su coronilla, esta mujer me estaba volviendo loca y amaba esta sensación.

Mire al espejo de mi escritorio y mi madre estaba en la puerta, apoyada en el marcó, se percato de que me di cuenta que estaba allí y se acercó a mi armario, saco una frazada y yo la miraba confundida. Nos tapó y me beso la frente.
-Puede ser tu madre- rode mis ojos, no queria un discurso en estos momentos- pero Sofía tiene razón- tragó saliva- es bella - me sonrió... ¿Me sonrió?- iré a hacer el almuerzo, luego las llamo- se fue y me quedé en penumbras, no estaba soñando ¿verdad?.

Emma se removió y me abrazó aún más fuerte y en un suspiró dijo "Lucía...." Creo que tendré que pegarme para despertarme de este sueño.

Gracias por leer!😍💋💋💋💋