Capítulo 47

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-No me atiende ni mi papá ni mi mamá- dijo Emma desesperada con el celular en la mano
-Tranquila- la acarició Lucía y luego volvió a mirar al guardia-¿Sabe si los señores Martínez estan aquí?
-Lo siento, no puedo darle esa información
-Por favor Luís- le dijo Emma - He estado viviendo aquí durante años, ten piedad- ante aquel pedido al hombre la miro misericordioso y negó con la mirada- ¿Puedo pasar a buscar unas cosas? Aunque sea un poco de ropa de Luca ni siquiera mía
-No puedo dejarla pasar, hay cámaras aquí y usted ya no pertenece al barrió
-Por mi hijo te lo pido, por favor- susurró Emma
-Bien, hagamos esto, se van, dejan el auto en la otra esquina y luego vienen con alguna campera y ponganse de espaldas a la cámara yo haré que habló por teléfono como confirmando que vienen de visita las dejo pasar, pero que sea rápido, espero no me traigas problemas
-Claro que no lo haremos- dijo Lucia contenta- Gracias
Hicieron lo que dijo el hombre y mientras caminaban hacía él ambas morían de nervios
-Bien, pasen y si llegan a venir sus padres le haré sonar el teléfono de la casa, los trataré de distraer pero por favor de todas formas sean rápidas, están comprometiendo mi trabajo
-Sisi, gracias- dijo la mujer de rulos y ambas caminaron a pasos apresurados hacia la casa, al entrar estaba todo ordenado, la castaña fue al cuarto de Emma y agarro un bolso y saco ropa y calzados poniéndolos en el bolso.
Emma estaba en el cuarto de su hijo haciendo lo mismo, no se percató que Lucía no estaba con ella en el cuarto porqué estaba concentrada en que se llevaría, al entrar a su cuarto a sacar algo de dinero que tenía en su caja fuerte la vio a Lucía
-Dios mío ¿Que haces aquí? Crei que estabas detrás mío, quedamos que sacariamos sólo de Luca
-Em tu también necesitas ropa, aparte ya esta ya llene el bolso ¿Y tú?
-También, agarré algunos jugetes y cosas del jardín que le servirán, tenme esto- dijo dándole uno de los bolsos
-¿Qué haces? Ya debemos irnos
-Saco dinero- dijo abriendo la caja fuerte que tenía detrás de unos libros en la biblioteca, guardo lo que pudo en su cartera cuándo el teléfono sono
-Mierda- susurró Lucía -Vamos Em
Emma ordeno como pudo los libros y bajaron corriendo las escaleras, cuando estaban por salir por la puerta principal un sonido de llaves las alertó
-Ven- dijo Lucía agarrando la mano de Emma ya que ella no reaccionaba- salieron por la puerta trasera que se encontraba en la cocina -¿Tienes llaves del portón?- miro a Emma, la misma asintió y se las tendió, trataron de salir lo mas silenciosas posibles y caminaron a paso apurado hacía la salida.
-Les hice sonar el teléfono- dijo Luís- veo que pudieron sacar algo
-Gracias- dijo Emma abrazandolo y se dirigieron hacía el auto, se subieron, abrocharon sus cinturones y no hablaron en todo el camino, a pocas cuadras de la casa de Lucía la misma se desvío, Emma estaba sumergida en sus pensamientos así que no protestó, fueron a un confitería, Lucía se estacióno y salió del auto agarrando los bolsos y guardandolos en el baúl, hasta que no abrió la puerta del acompañante tendiendole una mano a Emma para que salga, la misma no reaccionó
-¿Que hacemos aquí?- logró decir
-Quiero que hablemos
-Sabía que esto pasaría
-¿Que cosa Em?
-Que cuando te tuvieses que arriesgar por mí me pedirias alejarte y me dejarias sola ¿Crees que nací ayer? Conozco el significado de la palabra "tenemos que hablar"- Lucía se río-¿De que te ríes?
-De que yo no dije "tenemos que hablar" y tampoco pienso dejarte, quiero que tomemos un café y hablemos tranquila, ven amor- al oír "amor" Emma bajo la guardia y le dio la mano, la castaña cerró el auto y entraron al café, se sentaron y pidieron un capuchino cada una.
-¿De que quieres hablar?- dijo Emma mientras la camarera les dejaba el café en la mesa, al ver que le sonrío a Lucía se le cruzaron las cejas, más al ver que la castaña le correspondía la sonrisa acompañado de un "gracias"- En cuanto le sigas sonriendo a mi novia tendrás que pedir una consulta urgente con el dentista por lo que pienso hacer contigo- Le dijo la mujer de ojos esmeralda a la camarera, la misma puso cara de interrogación, claro, Emma parecía la hija por los años que le llevaba por eso no espero esa reacción, asintió y se retiro, al ver a Lucía la misma tenía cara de feliz cumpleaños -¿Tú de que te ríes? ¿Eh? Mira que vi cómo le sonreias y le decías "Gracias"- dijo imitando la voz de la castaña
-Jajaja me río porque me encanta que seas celosa y marqués territorio pero aún ni siquieras me has pedido ser tu novia y ya me estas presumiendo
-Ja, yo no soy celosa, ahora no me cambies de tema ¿De que quieres hablar?
-De qué te quedes tranquila, amo tenerte en casa, no tienes que sentirte incomoda ni nada, sabes que tú y Lu son bienvenidos, pero hay algo que quiero saber si no te molesta
-Gracias por estar conmigo- le sonrío Emma y acarició su mano- dime que quieres saber
-¿A que te referías cuando dijiste "no puede ser ahora a mi"?
-¿Cuándo dije eso?
-Cuando subias las escaleras Em, no parabas de susurrarlo, era casi inentendible
-Ufff- suspiró- tengo una hermana Lucí
-No sabia
-Cuando yo era chica mis padres la hecharon, yo tenía 14 años más o menos, ella era lesbiana y nunca más volví a saber de ella, mis padres se encargaron de que no sepa más de ella, ni siquiera después de que me case, de que salí de casa de mis padres no la volví a buscar
-¿Porqué?
-Por miedo, quizás ella no quiere ni verme
-No lo sabremos si no la buscamos
-Ahora no puedo pensar en eso amor, necesitó aclarar mi cabeza y asimilar todo esto, pero claro que me encantaría buscarla
-Bueno tranquila, estamos juntas en esto no te preocupes, todo estará bien, prometo que luego la buscaremos
-Te quiero- Emma se lo había dicho tantas veces pero esta vez fue como si dejara el alma en esa frase, como si dijera que la amaba, aunque en realidad sea así aún pensaba que era muy precipitado decirselo
-Y yo a ti mi amor- Emma sonrío, Lucía dejo dinero debajo de la taza de café y le tendió la mano a su amada- vamos a casa- Emma al ver que la camarera aún las miraba  besó a Lucía ahí mismo, pero no fue un beso como los de siempre, este marcaba territorio, metió su lengua recorriendo los rincones de la boca de la castaña y con sus manos la agarro de la cabeza y la pego aún más a ella enterrando sus uñas en su cabello
-Vamos a casa amor- dijo abriendo la puerta de la confitería para que salga Lucía, a la castaña le costo reaccionar ya que con el beso inesperado la dejo flipando, al pasar Emma miro a la camarera a ver si aún las seguía viendo pero ya no estaba.
-Wow, eso no me lo esperaba- dijo la castaña- debería ponerte celosa más seguido- dijo haciendo reir a la mujer de rulos, su mar esmeralda.

GRACIAS POR LEER!!! Los quiero mucho y tengo muy malas noticias para ustedes, mañana empiezo la Universidad pero trataré de actualizar con la misma frecuencia que hasta ahora, espero sepan entender si algún día no puedo. 💜💙💛❤💕💋💋💋💋💋💋

Me perdí en sus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora