Capítulo 24

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Aquí estoy, en la confitería haciendole un café a quién pense que alguna vez podria ser el amor de mi vida. Dos de azúcar como siempre le hacía todas las mañanas.
La veo sentada frente a mí y no puedo creer como paso el tiempo... Tiene el pelo más oscuro y lleva los lentes de sol para ocultar el rastro de su llanto y el hematoma que le causo su falso hermano.
-Luci... Yo
-No tenemos que hablar si no quieres
-Gracias
-Pero sabes que lo que hizo esta mal, cierto?-Asintió con la cabeza y no podía creerlo, jamás en 4 años que compartimos juntas la había visto tan rota.
-Por favor no me mires así
-¿Cómo?
-Como si me tuvieras lástima, te engañe y te hice sufrir deberías odiarme
-El odio es un sentimiento muy fuerte. Y jamás sentiría algo así, mucho menos por tí que creí que eras el amor de mi vida
-Siempre creí que eras una gran mujer
-Pero aún así no fue suficiente- sonreí y baje la cabeza, me abrazó fuerte y cerre mis ojos y suspire. Debo admitir que extrañaba tanto su perfume que me ayudaba a dormir por las noches. Cuando abrí los ojos, allí estaban mis rulitos, buscándome con una sonrisa, ¿Cómo lo sé? Porque cuando me vio abrazada a mi ex, se le borró su sonrisa y vino de inmediato dónde nos encontrabamos.
-Lucía- dijo en tono de reproche y aunque quería ignorarla solo tuve que reprimir una sonrisa -¿Cómo era tu nombre?- le pregunto con desdén a Pilar.
-No te importa- se río y me miro- ¿Nos mantenemos en contacto?- asenti con la cabeza
-Llámame cuando puedas, sabes que estoy para lo que necesites- me abrazó y se fue.
-¿Volviste con esa?- dijo Emma al sentarse en el lugar donde se había sentado pilar, me levante y me acerque a ella, quizás más de lo que quería, pero si ella quería jugar, era hora que le demuestre que yo no era su juguete, me acerque a su boca y la mire a los ojos, se le corto la respiración
-Estoy en horario laboral. En estos momentos no puedo atenderte-
Y comencé a atender gente, sentí su mirada en mi nuca por varios minutos, supongo que le habia costado reaccionar, se levanto y me miró, asintió con la mirada y luego se acerco.
-¿Podemos hablar luego?- Esta vez fui yo quién la miro con desdén
-Dejamelo pensar- comencé a hacer pedidos y colme su paciencia.
-¿Cuánto tardarás en pensar?
- Quizás todo lo que dure mi turno
-¿Y cuánto dura tu turno?
-No recuerdo- suspiró e hizo fila, cuando quise ignorarla me frenó
-Estoy aquí haciendo fila como clienta, hazme un cafe y trae un muffin, no seas descortes, no te olvides que el cliente siempre tiene la razón- quise enojarme pero me causaba gracia toda esa situación, le prepare el café y se lo di.
-Aquí esta su ticket- me dio el dinero y cuando le di el vuelto me agarro la mano.
-¿Estas saliendo con ella?
-No- se le dibujo una sonrisa
-¿Qué?
-Que no, mi respuesta es no, no quiero hablar contigo luego- le quite su mano de la mía y me fui a seguir con mi trabajo, me costó mucho evadirla pero no podia permitir que siguiera jugando conmigo y no se cuanto podria aguantar no ser su juguete. No quería dejarla ganar. No esta vez.

Buenaaaassss! Perdón por la espera larga que los hice pasar... Pronto subire otro capítulo.. Perdon si es corto y muchas gracias por leer y por sus votos.. !!❤💛❤💙💚💛💚💛💜💛

Me perdí en sus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora