—Entonces, ¿cuándo te vas?
—Unos días antes de entrar a clases, debo entregar unos papeles.
—Espero vayas a visitarnos muy seguido.
—Sí, Nico, intentaré verlos lo más que pueda. Lo bueno es que los tres estarán en la misma ciudad, no gastaré mucho dinero en pasajes- Elevo mis cejas graciosamente.
—Tacaña, pero conmigo sí vas a gastar.
—No soy tacaña, simplemente ahorro. Contigo también ahorraré, si vengo a Savannah además de venir a visitarte también lo haría con mi familia. Tengo todo calculado.
Giro mi cabeza en dirección al mar y observo como Adam y Alex le enseñan a surfear a Rosie y a Julie, pero esta última no le va bien con ello.
—Qué impresionante, deberías haber decidido estudiar ciencias, eres toda un erudita.
Le doy una mirada cortante a Sebastián, él solo da una mordida a su emparedado.
—Lo soy, por eso mismo estudiaré ingeniería.
Sebastián empieza a reír a carcajadas.
—No vaya a ser y te explote la cabeza por tanta inteligencia.
Dice Nicolás, burlándose.
—Qué graciosos. En un futuro vendrán a mí a pedir mis servicios.
—Como que me sirvas la comida y laves mi ropa.
Esta vez soy yo quien ríe.
—Sigue soñando...—Doy suaves palmaditas en el hombro de Sebastián. Él me ve divertido y sigue comiendo su emparedado. Vuelvo la mirada hacia el mar y veo a Julie venir en nuestra dirección.
—¿Qué tal te va con esas clases?
Le pregunta Nicolás al verla ya frente a nosotros. Ella resopla.
—Eso no es lo mío. No pude mantenerme de pie sobre la tabla ni dos segundos.
Dice y escurre su cabello. Me levanto y sacudo la arena de mi trasero.
—¿Qué tal si vamos a jugar Volley?
Digo al ver la cancha desocupada. Ellos aceptan. Los equipos son, Sebastián y yo contra Julie y Nicolás. Luego de unos minutos se nos unen Alex a mi equipo y Adam al otro; Rosie, cansada de las clases de surf, come y nos observa sentada. El juego inicia y nosotros ya llevamos ventaja, posteriormente, el equipo de Nicolás nos empata y en la final logran ganarnos.
Seguidamente, comemos y charlamos un poco. Cuando ya se ha hecho tarde, nos despedimos y volvemos a nuestras respectivas casas.
Al llegar, veo el auto de Christian, estacionado frente a la casa. Nos adentramos y encontramos a Chris, dialogando animosamente con Harvey y mamá en la sala. Les saludamos, Rosie va por vaso de agua mientras que yo voy al lado de Chris.
—No sabía que vendrías.
Le doy un beso en los labios. Él pasa un brazo por mi cintura y me apega a él.—Hoy tenía la noche libre, así que aproveché para venir a verte y de paso aceptar la invitación de Harvey.
Le miro y sonrío.
—Vayan a cambiarse que en unos minutos voy a servir la comida.
Habla mamá. Hacemos caso a su orden. Doy un beso en la mejilla a Christian y me dirijo a la habitación con Rosie por delante.—Entro yo primero.
Le aviso a Rosie para tomar una ducha, sin embargo, ella no me presta atención, sino solo a su móvil. Me baño y cambio de ropa por una limpia. Al estar lista, vuelvo a la sala.
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Mi Montaña Rusa
RomanceSu vida, atestada de emociones y sentimientos; empieza por una montaña rusa llena de sube y bajas al conocerlo. Durante el transcurso del tiempo, se le presentan obstáculos, los cuales, hacen que recaiga y en momentos se diga así misma que no puede...