Capítulo 3: Un Trabajo como cualquier otro
Su casa era enorme dotada de cristaleras con preciosos dibujos que reflejaban en el suelo, paredes blancas que parecían jamás haber tocado suciedad, era una casa muy moderna y funcional.
Después de llegar a su casa, nos pusimos a ver un rato una película, la película me encantó tenía mucha acción y la trama era muy original a la par que adictiva consistía en un valiente y joven semidiós y un montón de criaturas mitológicas, las cuales por un extraño motivo querían acabar con él.
La película estaba muy divertida y las partes de acción estaban entre las mejores que había visto, sin embargo con la presión del trabajo encima decidimos quedar para terminarla otro día y empezar el trabajo de los genios matemáticos para completarlo a tiempo y poder liberarnos de la presión que este generaba sobre nosotros.
Comencé buscando sobre el gran Pitágoras, me llamaba mucho la atención su trabajo y una vez la parte de mi trabajo estuvo completo, decidí entretenerme con los enlaces que encontraba en mi camino abriéndolos y echándoles un ojo sobre cual eran su tema, sin embargo después de un rato me aburrí y decidí ver que estaba haciendo mi compañero.
Recorrí la casa hasta llegar a la cocina donde él se encontraba, Ale siempre era un buen cocinero, le encantaba preparar comida, y a mi comerla por lo que ambos ganábamos en cuanto a cocinar y comer se refería.
Lo encontré lleno de masa y con una gran sonrisa en el rostro contemplando el horno.
Había preparado una pizza algo que en mi opinión era perfecto para relajarse de un día de trabajo, supuse que estaba hecha por él mismo cuando probé el primer bocado, como siempre su comida era deliciosa y rozaba la perfección, no había una sola quemadura en la masa.
- ¿Te gusta?- preguntó con una sonrisa en el rostro esperando ese momento que tanto le gustaba, el saber cómo había quedado su comida.
- Conoces bien la respuesta, exquisito como siempre.
-Me alegra saberlo, el trabajo ha quedado bastante bien, seguramente consigamos la nota más alta.
-Ojala, de todas maneras está bien elaborado.
Después de terminarnos la pizza, iba a irme cuando él me detuvo.
-¿iras mañana?
-¿A qué te refieres?
-Mañana es la excursión al club hípico, tenemos que hacer voluntariado allí, ayudar a los discapacitados para que puedan montar, la mayoría del colegio irá.
EL collar, si la mayoría del colegio iba seguramente el chico o chica dueño de este estaría por allí, debía ir sí o sí.
- Claro, nos vemos en el bus.
Después de despedirme de él me fui caminando a casa, no vivía tan lejos, iba muy distraída cuando de repente oigo que alguien me llama, me giro rápidamente al lugar de donde proviene el ruido, pero en su lugar solo encuentro una carta la cual recogí y en el medio habían dos palabras escritas con una caligrafía perfecta que decían:
Es tuyo...
Nota del autor:
Gracias por todo el apoyo que esta recibiendo el libro, jamás hubiera pensado que pasara de 100 visitas y aquí estamos...
Quería avisarles que este capitulo es un poco mas corto, pero creo que empezare a hacerlos así para poder publicar mas a menudo y que la historia consiga bastantes capítulos
Un saludo enorme!!: Luis
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Exentriz
Teen FictionExentriz ¿Alguna vez has caminado por tu ciudad con el sentimiento de que algo ocurre a tu alrededor y no te das cuenta?, ¿Algo que solo tú puedes sentir en el ambiente?, ¿Algo extraño en el movimiento de los árboles y de la brisa como si trat...