5. Poco a poco

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Capítulo 5: "Poco a poco."

LUCÍA

Estábamos en la clase de fotografía, el profesor dejó una actividad en pareja, y adivinen con quien me toco, exacto. Con Adam. No sé como haré para que nos pongamos de acuerdo ya que le caigo mal, o eso supongo porque no me habla. 

-Bueno chicos, salgan y disfruten de la naturaleza de nuestra universidad, así que saquen sus cámaras- dijo el profesor para que todos comencemos con nuestras fotos.

El punto de esta actividad es tomar una foto de la naturaleza, pero no cualquier fotografía, sino, una que exprese algo, tienes que tener tu propia imaginación para que una imagen tan sencilla tenga un gran significado.

Adam y yo sacamos nuestras cámaras y me llama mucho la atención la de él. Es igual a la mía, la única diferencia seria que la de el es color azul y la mía color negra.

Instintivamente los dos levantamos una ceja por la sorpresa de tenes el mismo instrumento, por el mismo acto que acabamos de hacer soltamos una risita.

Hey! Me sonrió, bueno no a mi técnicamente pero ya es algo.

-Sabes, tan solo ver tu cámara, sé que clase de persona eres- le digo a mi compañero haciendo que el juntaras sus dos cejas confundido.

-Me explico, que esa cámara no es que sea tan barata, y eso quiere decir que vienes de una familia adinerada- le sonrio al terminar mi comentario para que no se sienta ofendido.

Él enmarca una de sus cejas y ve de reojo mi cámara. Espero que no piense lo que creo que está pensando.

-No, yo no vengo de una familia adinerada, me esforcé mucho para poder ahorrar ya que con el dinero que gano tengo que pagar otras cuentas- digo un poco seria porque detesto que las personas piensen que por lo que ven afuera de mi, soy una pija.

El frunce el ceño por lo que acabo de decirle, y hasta ahorita me doy cuenta de las palabras que salieron de mi boca.

-Olvida lo que te dije, por favor- le suplico. Me regala una linda sonrisa y eso me pone feliz ya que solo me ignoraba.

-Vamos- le digo extendiéndole una mano para que la agarre y así lo hace, no puedo estar más contenta.

Creo que ya se le esta quitando la timidez, todo será poco a poco.

Cuando llegamos al campo de la universidad, le indico a Adam donde podríamos tomar algunas fotografías pero no me hace caso, ya cansada de insistirle me dispongo a buscar una imagen digna para mi actividad.

Recorro mi mirada en todo el paisaje y me doy cuenta de una pequeña flor, pero no es cualquier flor, esta lleva una abeja que de seguro esta tomando de su polen. Para cualquiera puede ser una simple imagen pero para mi, para mi significa una representación de que todos necesitamos de todos no importa que insignificante seamos, todos tenemos algo para ayudar.

Me siento en forma de indio cuidadosamente para que la abeja no se espante, regulo el zoom de mi cámara y le doy clic al botón que toma la fotografía.

Escucho otro "clic" muy cerca de mi, giro mi cabeza en donde oí ese sonido y me doy cuenta que es Adam, pero no le tomo una foto al paisaje sino a mi. A MI!!

-Hey! Dame eso, a mi no- le digo algo avergonzada.

El me extiende su cámara y entiendo lo que quiere decir, que la vea. Tomo su cámara y no puedo creer lo que estoy viendo. Sinceramente es una de las mejores fotografías que he visto en mi vida.

El sol me pega en mi cara pero ese efecto le da más luz a la imagen, yo me encuentro sentada en forma de indio tomando una fotografía, la vegetación se ve de fondo. No lo puedo creer. Esto es increíble.

-Woow- es lo único que sale de mi boca. El me sonríe de oreja a oreja y me extiende su mano para entregarle lo que es suyo. Y así lo hago.

-Es muy hermosa, te felicito Adam- ay que reconocer que el hombre tiene potencial. La honestidad antes que todo.

Acto seguido veo que se sonroja y baja la cabeza para que no lo veo. Y oh por Dios!!! Se ve tan tierno y lindo haciendo eso.

-Chicos ya termino la clase, mañana me entregan sus trabajos y quiero que expliquen su significado en frente de todos, pueden irse- grita el profesor. Hora de ir a casa se a dicho.

-Emmm... Adam- lo llamo. Me mira para que siga hablando.

-¿Quisieras tomarte no sé, un café conmigo en la tarde?- le digo algo nerviosa por lo que me pueda contestar.

El enarca una de sus cejas, por lo visto es una costumbre ya que siempre hace eso cuando hablo con el.

-No estoy ligando contigo, yo tengo novio y nunca lo engañaría- aclaro.

El asiente con una sonrisa. Saca su teléfono de su pantalón y me lo da. Creo que quiere mi numero para ponernos de acuerdo. Se lo doy y hago el mismo acto que el con mi teléfono para que ponga su numero.

Se acerca a mi y planta un sonoro beso en mi mejilla, cosa que me sorprende. Se da la vuelta y se va.

Dar todo por amor© #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora