[11]. Plan de Cupido, pero ¿y nosotros?

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Ya es lunes. Vaya mierda, con lo bien que me encontraba en mi cama, sin preocupaciones, y durmiendo. Pero hay que ir a clase, que pena que el despertador tuviera que sonar. También quería seguir en el resguardo de mi habitación para no tener que cruzarme con mi tan querido hermano (nótese la ironía). Sé que en estos momentos pareceré una cobarde, pero claro, no tengo ganas de oír a mi hermano a estas horas de la mañana. Menos mal que hoy quien me va a llevar a clase es Jason. Por lo menos no tendré que dar explicaciones.

Tampoco sé cómo voy a reaccionar cuando me encuentre con Matt. Tengo que admitir que cuando quedamos ayer, me lo pasé muy bien, no creía que pasaría así la tarde. Y menos cuando he estado con el chico que me gusta. No sé si acabaremos bien, pero si no lo hablamos creo que nunca sabré si merecía la pena arriesgarse. Así que creo que hoy será un buen momento de hablarlo con él, cuando vayamos a quedar para seguir mejorando el plan.

No me había dado cuenta de la hora que era ya hasta que me avisó mi madre de que Jason ya se encontraba fuera esperándome. Creo que esto me pasando últimamente muy a menudo, lo de hacer esperar a la gente. Es una cosa que tendré que dejar de hacer.

- ¿Te pasa algo? – me preguntó Jason

- No, nada. ¿Por?

- Últimamente tardas en salir de casa – me comentó. Otro que se ha dado cuenta

- Si, lo sé. Ya me he dado cuenta. Espero que no vuelva a pasar.

- Yo también lo espero. Menos mal que no está María. Es una cotilla.

- Lo sé.

Sí, aunque parezca sorprendente, María se ha vuelto muy cotilla, sobre todo en lo que respecta a mi hermano. Se nota mucho que está coladito por él, aunque me diga que solo la gusta un poco. Se la nota mucho sobre todo cuando le mira. Y sé también, que aunque no lo admita mucho, mi hermano también está coladita por ella. Tengo que hablar con Matt cuando antes.

- ¿En qué piensas tanto? – me dijo María, que no me había dado cuenta de cuando había entrado al coche

- Nada. Cosas mías

- Vale. Por cierto, ¿dónde está tu hermano?

- Ha ido en su coche. ¿Por?

- Por nada. Como sueles ir con él.

- Pues hoy no, lo siento – dije ya un poco molesta con ella

- No pasa nada – me contestó algo dolida

Sé que igual me he pasado de molesta, pero es que en el fondo lo estoy. Me parece muy bien que esté coladita por mi hermano, y que a veces me pregunte por él, pero es que lo de ella es preguntarme todos los días cada vez que puede, y ya estoy cansada. Esto es una cosa que tendré que hablarlo con ella.

¿De verdad que quiero juntarles? En el fondo sí, pero ahora no lo sé, me lo estoy planteando. Viendo cómo actúa ella y como actúa él, no sé. Sé que mi hermano quiere algo con ella, pero pienso que mi querida amiga siente mucho más por él, que al revés. Pero no puedo hacer nada, y ya que estamos en este punto, seguiré con el plan adelante. Lo que pase después con ellos es cosa suya.

Tras tener esta conversación conmigo misma, decidí unirme a la conversación con mis amigos. No sabía de qué estaban hablando, pero enseguida me enteré. No pude evitar reírme de las cosas que decían, porque claro son a veces tan infantiles, que no pueden dejar de decir tonterías, pero de las cuáles no puedes evitar reírte, o porque es una tontería muy grande o porque se te contagia la risa.

Cuando llegamos al instituto, mi hermano ya se encontraba allí, y por la cara que tenía, ya me iba a decir algo. Lo malo de ser hermanos es que los dos ya nos conocemos muy bien. Y también sabía que si no se daba prisa por llegar al coche, iba a volver a escaparme de él nuevamente. Y lamentablemente, llegó antes que yo consiguiera escaparme. Qué pena.

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⏰ Última actualización: Jan 16, 2017 ⏰

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