La hija del Joker

Pichón de Murciélago

Industrias Díaz.
11:00pm

El murciélago de Ciudad Gótica había irrumpido en compañía del Chico Maravilla, encontrándose en la entrada con Harley Queen.

-¡Mi pudín me recompensará al saber que te maté!-se lanzó con su mazo en contra de Batman-

-Robin, adelántate. Yo te alcanzo ahora.-dijo mientras daba y recibía golpes de parte de la Reina del Crimen-

El petirrojo iba corriendo escaleras arriba, iba por el tercer piso cuando fue interceptado y derrumbado por un borrón morado y verde. Ambos rodaron escaleras abajo un par de pisos, al separarse él vio a la que podría jurar que era la copia del Guasón.

-No dejaré que ese asqueroso murciélago y tú le dañen los planes a mi papi-dicho esto se lanzó contra él, logrando quitársela de encima con dificultad-

Golpes iban y venían, y la agilidad de ella lograban superar la de él. El bate se enfrentaba al Bo. Con una repentina acrobacia, el Bo salió volando a Dios sabe dónde, y el Chico Maravilla recibió un fuerte golpe en la cabeza, proporcionado por el bate, que lo dejo aturdido.

-Mmm... pollo frito-dijo Lady Joke, electrocutándolo, dejándole inconsciente-

Mientras tanto con Batman:

-Vamos Batsy-lo llamó agitando su mazo- Creí que eras más rápido- lo derribó con un fuerte golpe, seguramente rompiéndole más de un hueso-

-Piensa otra vez- de su cinturón sacó unas esferas de luz que cegaron temporalmente a la arlequín, y luego de un rápido movimiento llegó hasta ella, le quitó el mazo y, golpeándole con él, la dejó inconsciente. La encadenó para facilitarle el trabajo a la Policia-

Subió velozmente todos los pisos, y no encontró en ninguno a Robin, pero sí claros signos de lucha. Al llegar al piso en el que estaba la Presidencia, escuchó ruidos en el piso superior, creyendo que podría ser Lucius subió a asegurarse, encontrándose con su divino tormento, la gata que ocupaba cada rincón de su mente, que protagonizaba la mitad de sus pesadillas y la mayoría de sus fantasías sexuales más alocadas y activas.

-¿Ibas a algún lugar?-se acercó moviendo las caderas de la forma en que solo ella podía-

-¿Dónde está Lucius Fox?-se acercó a ella aparentando serenidad-

-Aquí no, eso es obvio-sonrió divertida, poniendo una mano en el perfecto y musculoso pecho del murciélago-¿Por qué no mejor te concentras en algo más?-le preguntó seductoramente al oído-

-No gracias-se la quito de encima y acorralándola contra la pared le preguntó de nuevo- Lo voy a repetir una vez más: ¿dónde está Lucius Fox?-preguntó con calma forzada-

-Atado y amordazado en la oficina del Guasón- le dio una suave lamida en la comisura de la boca, provocándolo-

-Estas loca...-le dio un fuerte golpe contra la pared, dejándola inconsciente también a ella; decidió atarla a una mesa-

De nuevo con Lady Joke:

Entró en la oficina de su padre con el Chico Maravilla a cuestas, quien se iba despertando poco a poco pero había sido desarmado.

-¡Papi!-saludó-Mira lo que encontré entre las sombras-movió de un lado a otro el inconsciente cuerpo de Robin- ¡Un pichón de murciélago! A poco no es adorable... pero tengo una duda-lo soltó sin miramientos- ¿A las crías de murciélago se les llama cachorros o pichones?-volteo a verlo-

-Llámalo como tú quieras, linda...

-En ese caso ¡sí tengo un pichón de murciélago como mascota! Iré a ponerlo en una jaula con nuestro invitado.-lo recogió de nuevo y lo llevó hasta donde estaba Lucius Fox-

-¿Dónde estoy?-preguntó despertando-

-En la parte más importante de todo esto, pichoncito- abrió la puerta de una "jaula" y lo metió allí- Pero ahora duerme-le dio otra descarga eléctrica-

Era una gran bomba de tiempo, y cuando la cuenta llegara a cero haría explosión, y mientras el edificio completo se venía abajo, del techo, a modo de aspersor gigante, saldrían grandes cantidades de Gas de la Risa; y en la parte de atrás: una especie de prisión en la que se encontraban un hombre mayor afroamericano, y ahora también un chico de no más de 16 años; ambos inconscientes.

Restaban -15 minutos 30 segundos, y restando.

Con el Murciélago:

En cuanto Gatúbela le dio esa información, bajó corriendo solo para enfrascarse en una tercera lucha, ahora con el Pingüino. Cuando logró dejarlo amarrado, entró a la oficina de la Presidencia, esa que tenía su nombre escrito en la puerta aunque casi nunca la usaba, y ahora en lugar de decir

"Presidente: Bruno Díaz"
Decía:
"Propiedad de el Señor G.
Prohibido el paso.
JAJAJAJA"

Al entrar se encontró cara a cara con el Guasón, repantingado en el escritorio, y con una misteriosa chica idéntica a él, detrás de el asiento, con ambas manos sobre el respaldo de la silla y sonriendo malvadamente.

-¡Batman!-saludó con los brazos abiertos- Bienvenido...-y como si se acordara de algo, añadió- Hay, pero dónde dejo mis modales...-se sentó correctamente, y haciendo una seña para que la chica se parara a su lado continuó- Te presento a mi bella hija: Lady Joke-finalizó con tono maligno-

-Papi... déjame encargarme de él-le susurró al oído para que solo él lo oyera-

-No princesa, esta lucha es mía-se levantó-pero quiero que vigiles a nuestros huéspedes.

-Como gustes, papi-le dio un beso en la mejilla, y se acercó a la puerta, esperando el momento adecuado para poder ir con ellos.

-Vamos, Batsy, acabemos con esto-se levantó, y sacó dos pistolas: una normal, y la otra cargada de su mezcla especial de arcilla.

-Cuando gustes-

Empezaron a luchar, y ambos saltaron por la ventana, 20 pisos abajo.

-¡Papi!-se acercó al destrozado vidrio, con los ojos llorosos- Ese maldito murciélago...-se enderezó, se secó las lágrimas y entró de nuevo a la sala donde se encontraba la bomba, viendo que Lucius Fox estaba despierto-

-No tienes que hacer esto...

-Cállate-le espetó- Tú no sabes nada, solo eres un viejo decrépito-su mirada se desvió hasta Robin, que ahora yacía dormido en el piso de aquella celda- Y él menos, solo es un niño inocente y estúpido-se sentó delante de la celda, mirando atentamente a los prisioneros-

Entonces, cuando menos lo esperaba, a -8 minutos para la explosión, escucho el rumor de una capa detrás de ella, y al voltearse recibió un fuerte puñetazo en la cara.

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