Capitulo 3. La apuesta.

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Capitulo 3. La apuesta.

          Aquel extraño chico era… ¡Sagashima! ¿Qué hacia él en mi vecindario?

-¿Por qué no te defendiste?- Preguntó…

-Me quedé paralizada, ponte en mi lugar hombre de Dios…- Respondí, otra vez no me dio la timidez…

-¿Ahora por qué te cabreas?- No le contesté y me fui caminando a mi casa… Pero sentí que alguien me agarraba del brazo, me armé de valor,  me giré e intente golpear la cara de quien me sujetaba, fue imposible, Sagashima fue quién agarró mi brazo y ahora mi puño porque había detenido mi golpe… Volví a ser acorralada…- No se que hago que te caiga mal, pero no soy como piensas…-

-Pues yo creo que sí, porque me lo estas demostrando…- Oh oh, estábamos peligrosamente cerca…

-¿ A si? ¿Y qué tengo que hacer para que te caiga bien?-

-Dejarme en paz por ejemplo-.

-Cosa imposible-.

-¿Por?-

-Secreto mío…-

-Mira chaval, si el secreto es que eres gay yo ya lo sabía…- No se porqué pero noté que se enfadó un montón y que se acercaba cada vez más a mí.

-¿Qué te hace pensar eso?-

-Bueno, el año pasado rechazaste a Ayumi, la chica más guapa del curso, si la rechazas o no te gusta debes de ser gay…-

-¿Y has llegado a pensar de que me gustara otra chica?-

-No, porque no me importas ni tú, ni tu vida personal…- Su expresión cambio… Volvió a ser normal… Sentía su aliento en mi cara… - Ahora ¿me vas a dejar irme a mi casa?-

-No hasta que hagamos una apuesta…-

-¿Qué apuesta?-

-Si hago que te caiga bien antes del festival de nuestra secundaria me darás tu primer beso…- ¿Queee? ¿Por qué demonios quería mi primer besooo? Estaba boquiabierta…

-¿P-Por qué quieres mi p-primer… b-beso?- Me volvió la timidez…Y mi corazón latía a mil por hora.

-No te preocupes por eso…-

-¿Y-Y  si gano yo? Si no me caes bien hasta esa fecha ¿Qué harás tú?-

-Dejarte en paz para el resto de tu vida-. Asentí, y estrechamos nuestras manos… Tenía que ganar esta apuesta si o si no quería que este idiota me diera mi primer beso…

           Después de eso me marché a casa, preparé la cena y acosté a Haya. Yo me quedé despierta en mi cama pensando en Sagashima… Él tenía de plazo ocho meses… Contando en días eran… Unos 230… Cogí una libreta y apunté una lista para evitar que me callera bien:

“Lista:

1.- Ignorarle.

2.- No fijarme en las cosas que hace.

3.- Pensar siempre en negativo cuando el aparezca. “etc.

          También sabía que tenía posibilidades… Además me había salvado esta noche, y encima no le dije ni un simple –gracias- Ese pensamiento me produjo un revolver de tripas… A si que me fui a dormir hasta el día siguiente…

          ~~~~·~~~~

-Pi-Pi Pi-Pi-

          Ese era el sonido de que había empezado el día… Desganada me levanté de la cama, me duché, me vestí con el uniforme y me peiné. Bajé las escaleras… Esta vez mi madre no estaba en la cocina, en su lugar había una nota: “

Cariño, he tenido que irme yo y tu padre muy temprano a trabajar, por favor despierta a Haya y llévala al colegio. Te quiere Mamá.”

          Preparé y me comí un desayuno preparado por mi y desperté a Haya, al principio me costó un poco pero la convencí. Y se vistió con su uniforme.

          Le prepare el desayuno para que se lo tomara en la escuela y nos fuimos corriendo, su escuela me quedaba de camino a la estación, la deje en su escuela y me fui a coger el metro. Demonios iba a llegar tarde… Cuando yo estaba en la entrada ya eran cinco minutos tarde, entré sigilosamente en mi aula, todo el mundo en silencio y yo escabulléndome hasta mi sitio hasta que en medio camino…

-Sta. Nakuto, llega tarde-. Me pilló.

-L-Lo siento…-

-Se quedará castigada en el recreo, ahora siéntese…- Nooo, la mejor hora del día me la tenía que perder para recuperar… Maldita sea… Me senté en mi sitio y el profesor prosiguió con la clase, saqué mi libro y presté atención al profesor.

          Llegó la hora del recreo y me tenía que quedar en clase… Estaba sola, haciendo ejercicios de Inglés cuando noté que alguien se sentaba en la mesa de mi lado.

-¿Por qué llegaste tarde?- Giré mi cabeza, obvio, era Sagashima…

-¿Qué te importa?-

-Si quiero conseguir caerte bien tengo que preocuparme por ti…-

-No quiero que me caigas bien, ni que te preocupes por mi-. En esas seis últimas palabras grité, y  su expresión cambio a una mirada sin expresión.

-Pues vale, ya no me preocuparé por ti-. Dijo serio. Esa cara… Daba mal rollo… Además no se por qué pero me sentí mal cuando le dije esas palabras…

-Pues bien…- Él se levantó y se fue del aula, yo seguí haciendo los ejercicios hasta que los terminé, aún quedaban diez minutos de recreo… Aproveché y baje.

         Fui al banco donde me sentaba siempre y había un extraño chico echado en el, su cara estaba cubierta por un libro con lo cual no le podía ver el rostro. Al ver ese “cuadro” me giré para dirigirme a otro lugar pero algo me retuvo.

Multimedia: Sagashima ñ.ñ

Mi odioso pero primer amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora