Venganza

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Era por la mañana y eran las 12 de la mañana porque como anoche estuvimos de fiesta tomamos demasiado y teníamos un dolor de cabeza que no podíamos con ello. Así que nos fuimos a la cocina sin que nos viera nadie y nos tomamos pastillas para que se nos quitara aunque sea un poco el dolor de cabeza. Hasta que nos encontramos con las rubias de las narices.

-Vaya, vaya, vaya ¿que tenemos aquí?-dijo una rubia Agustina.

-Que cojones queréis vosotras ahora.-dijo Sandra cansada.

-Queremos proponeros un trato...-dijo la otra rubia Federica.

-¡No pensamos hacer ningún trato con vosotras, además que no queremos ni veros ni en foto!-exclame.

-Solo os advertimos que os alejéis de nuestros novios, o sino veréis las consecuencias que tendréis.-dijo la rubia Agustina amenazante.

-Tu a mi no me obligas a hacer lo que te venga en gana, porque no me da la gana ¿entendido?-dijo Sandra enfadada-así que ya podéis iros un poco a la mierda.

Las rubias nos fulminaron con la mirada y se fueron.

-¡Que asco les que cogido a estas mongolas de mierda!-exclame.

-Tu olvídalas y ya esta, como yo lo hago, lo que me dicen me entra por un oído y me sale por el otro-dijo Sandra.

Nos tomamos las pastillas y nos fuimos a cambiarnos y nos pusimos esto:

Sandra 

Sandra 

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Y yo

Nos dejo la sensei día libre así que ya que estábamos peleados con los chicos nos fuimos al otro lado del lago donde estaban los chicos, pero tuvimos suerte porque no había nadie, estaban entrenando así que entramos y pusimos cara de asco porque e...

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Nos dejo la sensei día libre así que ya que estábamos peleados con los chicos nos fuimos al otro lado del lago donde estaban los chicos, pero tuvimos suerte porque no había nadie, estaban entrenando así que entramos y pusimos cara de asco porque era una pocilga lo que eran las habitaciones sobre todo la de Cameron. Así que buscamos sobre las ropas de Cameron y Francisco algo valioso que tuvieran y cogimos sus armas. 

Pero ya cuando íbamos a salir nos tuvimos que meter debajo de la cama. Y entraron Cameron y Francisco.

-Tío veras que batalla vamos a hacer, seguro que la ganamos-dijo Francisco.

Las guerreras del Yin y YangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora