Okita Souji 2

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Quizás era su carácter o incluso los sentimientos resguardados en su torpe corazón lo que la hacían cortés, para ser de una clase baja, su educación era digno de alguien noble, pues la cortesía era muy bien vista, no de mala gana claro esta. 

Cuando estaba en mandados dados por su padre se detenía a ayudar a las ancianas a llevar sus bolsas, pareciendo así un marimacho mas sin embargo cada vez que llegaba a ver la cabeza marrón pasar por una de las calles principales sus defensas caían. se hacia tan débil y pequeña, nerviosismo sin duda. una vez que este hombre desaparecía volvía a su labores y apoyo hacia los demás.

Algunos incluso comenzaron a preguntarse el porque su padre aun no había escogido algún candidato que sin duda ya debería de haber recibido muchas propuestas, pero tal como se había mencionado el estaba buscando lo mejor para su bella flor. Incluso se digno a dejar en espera al hijo de un comerciante, lo cual era demasiado grosero, considerando que era mas como un favor de mercader para el que al revés, pero el hombre mayor no se fiaba, debía encontrar lo mejor y eso no solo significaba el dinero.

Una fatídica tarde cuando la joven mujer salio a despejar sus pensamientos con el sol casi a punto de ponerse no pudo evitar sentirse curiosa de una extranjera a la que juro no haber visto por allí a menudo y sin embargo la siguió, un acto impropio para ella. la joven como un gato al acecho conservo su distancia y en su mira la mujer "extranjera" cuando observo que su tan amado y anhelado capitán comenzó a hablar con la extrajera miles de sentimientos se le vinieron encima, su corazón le dolía, se sentía fatal y comenzó a hacer algo que nunca se espero. 

Comenzó a compararse con la mujer, ¿que les hacia tan diferentes? ¿porque el la había notado si ni siquiera llevaba el mismo tiempo que ella en Kyoto?

Tal vez era la mirada de la mujer sus ojos chocolates que reflejaban ternura y rogaban por protección, los suyos en cambio no lo hacían, estaban adornados por ojeras producto del esfuerzo que había hecho durante años y no reflejaban aquella ternura....

Su piel parecía de porcelana y muy limpia, la de ella estaba cubierta de una capa de sudor y reseca... se llevo la mano a su mejilla para sentir una lagrima escapar de su ojo derecho, no podía mas y se escapo a llorar donde no pudiera verse débil ante cualquier otro hombre.











¡Si regrese de uno de los círculos del infierno! aunque lo mas posible es que regrese -_-, en fin disfrute su lectura, siguiente capitulo comenzare a formar lazos entre Souji y nuestra marimacho.


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