Cuando los Ángeles Caen

4.-Un encuentro peculiar

Bajando por la calle la ciudad estaba más viva, un carnaval cercano las hacia sentirse un poco a desacorde por su ropa, más seria y oscura, pero al ver varias personas como ellas se calmaron,  Yui le daba la mano tanto para no separarse como para tranquilizar a su hermana, las calles algo estrechas y concurridas eran muy difíciles de sortear.

-Quieres agua?-le pregunto por quinta vez pero Ren negó con la cabeza-Ren...-

-Estoy bien Yui-dio un apretón a su mano-Bien, solo no me sueltes-Pidió suplicante.

-No lo haré-Prometió su hermana, cuando Ren estaba así de débil, solía comportarse como una niña perdida-Vamos un local cercano-señalo un Pub-allí podremos escuchar lo necesario- Ren asintió, queriendo huir de la marea de gente. Entraron en el Pub pidieron unas bebidas (debían agradecer a sus guardianes por la información de ese mundo) sentándose al fondo en una mesa algo apartada, pero si algo se aprende es que cuando pareces estar en tus asuntos la gente no te presta atención soltando conversaciones interesantes, sobre todo si creen que nadie escucha. En su espionaje nadie decía nada interesante, solo un comentario sobre unas chicas que desaparecieron, pero la ciudad era grande y creían que se fugaron pues tenían un amorío, otro sobre las nubes de lluvia que se acercaban, otro sobre una academia que abriría pronto y por ultimo algo sobre las flores de temporada, entonces la puerta se abrió dejando pasar a un joven de pelo azul oscuro piel clara y ojos azul como su pelo, de lentes y con un traje militar azul eléctrico con negro y ambas chicas se quedaron de piedra al reconocerle.

Mierda

-Buenos días Fushimi Saruhiko-El que era dueño del pub le saludo algo seco pero cordial-A que debo tu visita?-

-Tsk-ese sonido hizo que ambas les diera melancolía-Nada importante solo que quiero comer algo-se sentó en un mesa cercana, el hombre no pregunto que quería por que le trajo  un filete con un vaso de agua, el peli azul empezó a comer sin ningún tipo de expresion en el rostro y en soledad.

-Debemos seguir-Yui asintió a lo dicho por Ren por más que fuera Fushimi no era el que conocían-Vamos ya estoy mejor-

-¿Segura?-Ren asintió-Bien-Salieron dejando dinero en la mesa y pasaron por la mesa del chico que sin que se dieran cuenta les lanzo un mirada, la cual se quedo sobre ellas hasta que se perdieron por la salida.

-Entonces ¿Que hacemos?-Mirando al cielo Ren distinguió las nubes distantes de lluvia-Podemos volver-

-Vamos a buscar que vemos!-Yui muy alegre jalo de su brazo la gente era menos ya que mucho iban solo por un show de hace una hora-Encontremos algo lindo para Kazu y Shintaro-Declaro y su hermana le sonrió, juntas recorrieron los puestos, encontrando un revoltijo de culturas, naciones y objetos ancestrales, la guerra cambia mucho y más cuando mucha población muere y las culturas se unen para sobrevivir, sin embargo las tradiciones se vuelven una y cambian transformándose en otra cosa. Compraron unos regalos y siguieron caminado hasta apartarse de las calles transitadas. Dieron vueltas bastante rato, hasta llegar a una vieja catedral, donde los vitrales casi intactos se iluminaban por las luces del interior.

-Es muy hermosa-susurro Ren y su gemela asintió-Entremos!-jalo a Yui que sonrió al ver a su hermana tan emocionada, entraron y les llego el olor a mirra e incienso, observaron a su alrededor, los vitrales contaban una historia, tal vez real tal vez de mentira, siguieron caminado hasta que un quejido las detuvo.

-¿Que?-ambas se miraron siguiendo el sonido, encontrando a un chico peli naranja que también conocían, semi inconsciente en el suelo oculto entre bancos de madera apilados.

  Le socorrieron tenía un golpe bastante serio pero estaba bien o eso dijo Ren a su hermana usando su poder para revisarlo.  

Primero Saru y ahora Misaki? en serio?. pensaron ambas.

-ngh...-el peli naranja se removió al sentir que le limpiaban el rostro abrió los ojos encontrándose un par de capuchas-Whaa!-se alejo de ellas por el suelo, pero aun mareado solo pudo tomar su cabeza con una mano mientras con la otra buscaba apoyo-¿Que...quienes?...ngh...joder mi cabeza-trato de alejarse más pero el mareo lo detuvo

-Tranquilo ¿si?-la voz de Ren era serena se le acerco-Soy Ren ella mi hermana Yui-se presento el chico trato de enfocarla-Te dieron un buen golpe y tu cabeza sufrió otro al caer-

-Auch-Se quejo al tocar el golpe en la cabeza-Donde?-miro alrededor buscando orientarse, fue entonces que Ren le miro el meñique, un delgado hilo rojo sangre estaba atado.-Yo...Gracias-Dijo-N...no muchas personas ayudan a un desconocido-Se sonrojo ligeramente e incluso tartamudeo, el no era bueno cuando hablaba con mujeres pero esas dos le daban confianza.-Yata-Se presento omitiendo su nombre.

-No hay de que-le dijo Yui que por su voz tenía un sonrisa.

-Que te paso?-Ren ladeo la cabeza curiosa.

Yata lo pensó mientras se sentaba correctamente en el suelo-Estaba buscando a un amigo cuando...-frunció el ceño intentando recordar-nos separamos...entonces entre aquí...pero...-toco su cabeza-solo recuerdo un ruido detrás de mi y lo siguiente que supe era dolor y luego nada-

-Tal vez...te querían separar de tu amigo-Sugirió Yui mientras Ren cruzaba sus brazos pensativa.

-Bueno se sabe defender solo-suspiro Yata, pero entonces Ren miro su hilo que comenzaba a ensancharse-¿Sucede algo?-pregunto al ver la atención el la chica sobre él.

-So...-pero fue interrumpida por una voz muy conocida.

-Mi~sa~ki!-todos se quedaron quietos

-Maldición ese Mono!-Yata se oculto de la vista-¿Como supo que estoy aquí?-las chicas se ocultaron con él.

-Mi~sa~ki~-La voz se fue acercando tensos fueron los segundos-Mi~sa~ki~, se que estas cerca!-Se oyeron los pasos en la entrada de la catedral-Se que estas aquí Mi~sa~ki--canturreo Saruhiko-Vi al gordo de tu amigo cerca, te estaba buscando, eres tan enano que de seguro te perdió entre la multitud-Se burlo en peli azul-Vamos Mi~sa~ki, se que quieres jugar-su sonrisa era perturbadora-Vamos enano virgen se que estas cerca-Yata hacía uso de toda su fuerza de voluntad para no ir a golpear al de lentes.

-Maldito Mono-susurro mientras Saruhiko se dirigía a la entrada frente a ellos buscándolo, pero Ren le jalo la mano y Yui puso un dedo sobre sus labio pidiendo silencio, le jalaron con extrema cautela al chico fuera de la iglesia abandonada, lograron escabullirse.

-Pfff-estuvo cerca-Ren sentía que era lo mejor Yata no estaba en condiciones de pelear.

-Si...gracias-Yata estaba más tranquilo, en otra circunstancia habría tratado de moler a golpes a peli azul-Sera mejor irnos sino puede encontrarnos-con la cabeza señalo la iglesia, ambas asintieron y salieron del lugar.

-Yata...oye...-Yui estaba algo tensa-Por que te buscaba ese chico?-Ren miro el hilo que se empezó a adelgazar, como si fuera un elástico que se jala haciéndose mucho más delgado que su forma original.

-Por que es un idiota-contesto simplemente dio un suspiro-Bueno gracias por todo chicas pero me voy, debo encontrar al idiota de mi amigo-señalo el área del carnaval a lo lejos, ambas asintieron.-Gracias de nuevo-

-Seguro?-Ren algo nerviosa-Puedes tener algo grave-

-Estaré bien-Yata le dio una sonrisa.-Soy duro-eso lo dijo con orgullo, pero un cuchillo paso volando al lado de su cara, volviéndose con la sorpresa en la misma vio a Saru con una sonrisa muy, muy aterradora.

-Mi~sa~ki, te encontré!-Saruhiko sonrio aun más al ver la mirada de Yata puesta en él, pero fulmino con la mirada a ambas chicas.

Oh genial.