Las crónicas de la Amistad

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Han pasado una semana desde que oficialmente empecé a vivir solo con Sarah, Gracias a mi trabajo, Me podría mantener una situación estable para los dos. Me gusta el rumbo que está tomando mi vida en este momento, sin embargo sigo viendo que algo le preocupa a Sarah, y no puedo equivocarme,  debe ser su padre de nuevo. Últimamente he pensado mucho en eso, decidí darle una última oportunidad para que deje de de reprimir a Sarah. Así que fui a su casa y manteniendo la cordura le comenté de nuevo cómo se estaba sintiendo Sarah. Pero antes de que terminara de hablar a la fuerza me sacó de su casa. Las cosas habían cambiado ahora que ella vivía conmigo y no con él, Supongo que me tenía envidia, pero no lo puedo culpar, si yo tuviese una hija que un día decidió irse con su novio, Supongo que también sentiría envidia. Es una lástima, las personas han perdido tanto el miedo a Dios que ahora viven queriendo que pueden mortificar o dañar a cualquier persona sin que nadie los castigue. Pero también tenía que pensar que Sarah a pesar de todo aún lo amaba, cosa que la verdad no puedo entender, ¿Como puedes sentir aprecio por una persona que te hace daño? Simplemente no entiendo cómo puede soportar todo lo que le hice sin hacer nada. Pero la amo, así que no me importa que es lo que tenga que hacer para ver más seguido una sonrisa en su rostro.
Pero alejandome un poco del tema de su padre, estado pensando Jason en estos días, la verdad ya no pasamos tanto tiempo juntos como antes. Ahora que tengo mi propio hogar y una novia que cuidar. Mientras que a la fecha Jason sería viviendo en casa de su madre y su padre por separado. Así que la invité un lugar a donde solíamos ir mucho cuando éramos más pequeños, al parque de diversiones del muelle; quizás no era muy grande, Pero tenía todo lo que necesitábamos, sitios de apuesta, palomitas de maíz, algunas atracciones, y el mejor helado que vendían en todo el mundo. Esas pequeñas cosas nos recordaban viejos tiempos. Estando ahí recuerdo haberle preguntado qué era lo que más le daba curiosidad, algo que siempre haya querido saber. Y me impresiona bastante la respuesta porque la verdad que no me la esperaba. "La muerte" dijo. Y cuando le pregunté por qué, me dijo qué era una de las pocas cosas que podían hacer pensar a un buen número de personas a la vez. Crear diversas opiniones acerca de que se sentiría morir, Pero esto sólo se queda en opiniones y teorías porque los muertos no hablan. Y en realidad tenía razón, ¿Como debe ser morir? ¿Que sientes? ¿Que ves? ¿En que piensas?. Sabía que todas estas preguntas algún día tendría en su explicación, aunque sea una explicación que sólo me tengan que guardar para mi. Pero algún día tendré respuestas, eso espero. Me pregunto qué cómo iban las cosas con Sarah. Y le comenté acerca de su padre; de la rabia que me tenía, y la manera en que la hacía sentir mal a ella.
Al parecer la actitud de el padre qué escribí también le molestó a él.  e incluso me hizo una pequeña broma que en realidad me causó mucha gracia. Me dijo; "Deberías asesinarlo". Cuando me dijo esto lo miré fijamente a los ojos y luego de comprobar que sólo estaba jugando solté una risa sinica acompañada de un "estás loco".
Le dije que a pesar de todo Sarah amaba a su padre. Y que la verdad no sé cómo reaccionaría a su pérdida. Le dije que esperaba que vivieras por muchos años para mantener una sonrisa en Sarah, pero lo que me dijo después sería lo que confirmaría mis acciones en un futuro cercano;
"¿Y tu no puedes mantener en ella esa sonrisa?"
Esa frase me hizo pensar mucho a pesar de mi rápida respuesta; "Claro que puedo" Así que sólo con eso que me dijo considere el día como sumamente productivo, claro... además de pasar un rato con mi mejor amigo después de tanto tiempo. La invité a cenar al día siguiente, Pero dijo que tenía cosas que hacer, sin embargo éste no me importó y le insistí hasta que acepto mi invitación. Sarah, la verdad, no era la mejor cocinera del mundo, Así que ese día yo hice la cena, tengo que admitir que me lucí, pero me dio risa cuando vieron que íbamos a comer; Supongo que esperaban un pollo horneado, o una pasta, pero no; hice pizzas, una de mis especializaciones culinarias, sinceramente la mejor pizza que seguramente en su vida abran probado. Tenia anchoas, guisantes, champiñones, pimentón y mucho orégano. Sin embargo, a Jason de gustaba mucho molestarme cuando cocinaba, así que sólo dijo que la pizza estaba "bien". Pero no puedo engañar a las señales físicas que pude notar en el cuando la probó, efectivamente, sus orejas levantaron, y sus pupilas se dilataron, claramente fue la mejor pizza que haya probado, aunque diga lo contrario. Y esa noche, izara pudieron hablar todo lo que no hablaron nunca cuando estaban en la escuela, porque a pesar de estar en la misma clase apenas si nos cruzamos la mirada.
Una noche interesante, en realidad pude disfrutarla, como en los viejos tiempos. Y entonces ahí, comiendo mi pizza, tenía las dos personas que más me importaban en este mundo. En serio esperaba poder pasar toda mi vida junto a ellos, pero quién sabe, quizás algún día termine de perder toda la empatía, y para entonces no sé qué puede pasar. Pero no importa, ahora estamos aquí, con una rica pizza y con muchos temas de conversación, disfrutando a las pequeñas cosas, quién sabe, incluso me atrevería a decir que estamos felices.

El Hombre sin nada que perderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora