Monster (Fanfic) (Marichat) (Ladybug) [HIATUS]

Who was...He?

 ...Aquella silueta antropomórfica, que cuidaba de ella desde las alturas, no soporto ver esa horrible escena. No soportaba ver a esa bella mujer en peligro.  

-Vaya, vaya...creo que eligieron la peor noche para asaltar damiselas... ¿no creen? - se escuchó una voz coqueta en lo más profundo del bosque

- ¿Quien anda ahí? - Pregunto el Marcus, apartando su espada del cuello de Marinette dejándola respirar un momento. - ¡Muéstrate! ¡No seas cobarde! - Grito mientras salía del circulo amenazando a la oscuridad con su espalda.

De un salto, aquella silueta bajo de las ramas de aquel árbol donde, curiosamente, sometían a la pelinegra. Todos voltearon exaltados, no podían creer lo que estaban viendo.

La pelinegra se le quedo viendo, sus pupilas se dilataron del miedo, no sabía que estaba pasando.

Camino unos pasos hasta estar a unos centímetros del grupo, su enorme sombrero negro, igual de a mosquetero, le cubría la mitad de su cara, pero, dejaba ver su sonrisa de gato tan reluciente como de costumbre. Levanto un poco su sombrero dejando al aire ver su cara.

Marinette se le quedo viendo hipnotizada a aquel hombre en forma de felino de cabellos rubios que se dejaban ver en su frente, sensuales ojos verdes que cubría bajo esa mascara negra, su vestimenta era elegante, con una gabardina y capa negra, en el cuello, se dejaba ver una camisa blanca sujeto por un gran cascabel amarillo, un pantalón negro que le hacía lucir unas piernas fuertes y unas botas negras algo sucias. Una parte de ella estaba asustada, pero otra...la hacía sentir segura, protegida...a salvo.

- ¡Marcus!, amigo mío... - dijo aquel hombre sacando su espada de su cintura, mostrando una sonrisa coqueta - ¿No crees que ya estas algo viejo como para coquetear con niñas? -dijo este mirando sus garras, sonriendo burlón dejando a la vista sus colmillos perfectamente blancos.

-T.... ¿Tú? - tartamudeo Marcus dejando caer la espada con la amenazaba a la nada hace unos instantes.

- ¡Venga hombre! ¿No sabes que es de mala educación acercarse tanto a una dama tan bella como esta y sin su permiso? - cito el hombre acercando su rostro tan cerca como para que sus ojos esmeraldas pudieran contemplar, burlones los cafés asustados de Marcus.

- ¡Conoces las reglas extraño!¡Ella es MI chica! La vi primero...- dijo Marcus alejándose de él y poniéndose en guardia para pelear.

-Marcus, Marcus...Marcus - dijo este con una voz seductora mientras admiraba su espada y movía su muñeca. - ¿Tu nunca aprendes, cierto? - dijo este con los ojos cerrados.

Marcus sintió un escalofrío recorrer su espalda, estaba asustado, ¿Cómo era posible que aquel hombre gato supiera su nombre?, ¿De dónde había salido? Pronto, al imponente Marcus le empezaron a temblar las piernas.

- Se los diré solo una vez... Déjenla en paz... - dijo mientras entrecerraba los ojos y sonreía como si estuviera a punto de atacar a su presa y devorarla.

- ¿O qué? ¿Vendrás a darnos unas cuantas lamidas y ronronearas para nosotros? - dijo Marcus y pronto, aquel grupo de ladrones comenzaron a reír burlones.

Sin previo aviso, el felino salto hacia ellos golpeándolos y dejándolos tirados en el suelo, débiles, indefensos, atemorizados. Tomó a la chica en sus brazos y la aparto de aquel árbol dejándola atrás de el para protegerla.

Marcus, que se encontraba de rodillas frente a él, alzo la vista y pudo ver la cara del hombre gatuno sonriendo con malicia.

Este lo tomo por el cuello, levantándolo unos centímetros del suelo y lo azotó en el tronco del árbol donde, hace unos momentos, este sometía a la chica.