Taylor estaba sorprendida por lo que el castaño acababa de decir. Eso no podía ser posible, se suponía que el la odiaba o al menos eso aparentaba.
— estas borracho — articuló— y no sabes lo que dices.
— podre estar ebrio pero se perfectamente lo que digo— dijo el castaño mirándola detenidamente.
Taylor se levanto, se giro y salio del baño para después salir de la habitación e irse a descansar.
El joven no estaba en sus cinco sentidos y no sabia lo que decía, al amanecer todo volvería a ser normal y tendría un buen castigo tanto el, como su hermano por parte de Taylor.
Al amanecer Axel amaneció con jaqueca mientras que Max bajaba de su habitación tranquilamente, al parecer la ducha con agua helada le había hecho bien.
Taylor entraba con la pequeña Valentina, al parecer había ido por ella, Valentina subió a cambiarse mientras que sus hermanos entraban al comedor.
Taylor se aproximaba hacia aquel cuando Max la estiro alejándola llevándola hasta el baño que estaba al lado mientras cerraba la puerta y se recargaba en aquella evitándole salida alguna a la castaña.
— ¿que es lo que te pasa?— pregunto Taylor sin expresión alguna.
— ¿por que no puedes creer que en realidad me gustas? — preguntó el castaño.
¿Es que acaso no se cansaba de repetir lo mismo?
Si lo que quería era jugar con Taylor no sería nada fácil, ella no caería en su trampa, no seria otro juguete, otra mas, una mas de la lista.
— no te creó por que no es verdad— dijo la castaña mientras se cruzaba de brazos.
— no estoy jugando,—la miró— realmente me gustas, el alcohol no fue el que me provoco decir eso, realmente hablaba en serio.
— estas jugando — se acercó a el para abrir la puerta pero el le impidió la salida— dejame salir.
— Taylor escuchame por favor.
— no lo haré.
— nunca había sentido esto que estoy sintiendo por nadie mas.
— ve y dicelo a otra idiota que te lo crea.
Comenzó a acercarse a ella. ¿Por que no podía creerle? ¿Es que acaso no era suficiente la humillación que estaba haciendo?
— me gustas, me gustas mucho, nunca nadie me había gustado como tu, no te quiero para divertirme, no te quiero para una noche,—quedo a unos cuantos centímetros de distancia de ella— Taylor en verdad te quiero.
El castaño estaba hablando con toda la sinceridad posible pero la chica era cruel por no creer en el.
— claro — se alejo acercándose a la puerta mientras la abría y salia.
El castaño se quedo observando la puerta y viendo como la muchacha que le gustaba se iba sin poder creerle.
Definitivamente le gustaba esa muchacha, nunca nadie lo había rechazado y eso era increíble y lo mejor para el, ya que mostraba que en verdad valía la pena.
Acababa de comprobarse a si mismo que ella era diferente y en ese momento mas que nunca haría todo lo posible para conquistarla y no se rendiría tan fácilmente.
Los días pasaron, Taylor no podía olvidar las palabras del castaño, el no podía hablar enserio, solo estaba jugando y ella no quería ser otra de sus conquistas, no quería ser utilizada, no de nuevo.
ESTÁS LEYENDO
Niñera Y ¿¡Espía!?
AksiTaylor Johnson con tan solo siete años de edad vio como asesinaron a su padre, ella juro convertirse en una gran espía para poder vengar la muerte de el y de su madre Lorena le juro a su hermano cuidar de Taylor despues de diez años cuando su tía...