Un trato

Capitulo 18

Lucas se quedó en el Hospital hasta que le dieron de alta a su abuela, no fue mucho rato pero yo me retiré a trabajar, tengo mensajes de Hannah que se adelantaron el avión, así que no nos despedimos, será un mes largo o eso pienso, con Lucas nos besamos, y lo quiero, es un gran amigo para mí, sí un gran amigo, si él desea ser algo más me costará más de lo que imaginé, no quiero hacerle daño la verdad, y pensando bien, todo este tiempo con él nunca hemos hablado bien de su relación con Hannah, quizás arreglen sus problemas, quizás Hannah llegue enamorada y dispuesta a perdonar y los tres seríamos grandes amigos.

- Cat, me iré por dos semanas de viaje, debo cerrar un negocio, eres casi mayor de edad y he decidido que debes tomar más responsabilidades, así que quedarás a cargo, eso implica preparar las comidas, el aseo de la casa, ser firme en los permisos y en la escuela de Sabrina cómo la tuya - mi madre apareció de la nada por mi habitación con esta "gran noticia" - y por los gastos, no te preocupes te dejaré una de mis tarjetas de crédito pero cada gasto tendrá que tener un registro con foto, así me asegúrare de que tengas un buen manejo de dinero, permitido comida rápida dos veces a la semana, un aseo cada dos días, los permisos solo si son importantes.

- ¿Dos semanas no es mucho? - pregunto, porque la verdad me agobió bastante.

- Está todo dicho me voy mañana, le avisaré a Sabrina - sale de la habitación, la verdad su presencia no será tan extrañada ya que no nos vemos mucho, pero es demasiada controladora, finalmente dispongo a dormirme.

Al día siguiente al despertar, no dejo de pensar en las palabras de Lucas, fueron muy reales y yo no le he respondido nada, dijo que me quería.

- Hola hola - escucho una voz y es Mateo.

- ¿Ya se fué mi madre? - pregunto sin tomarle mucha atención.

- Aquí estoy - contesta alegre - ahora que Hannah no está, supongo que soy tu unico amigo - dice muy seguro de sí mismo.

- Tengo más amigos, y justo tengo planes después de almuerzo - respondo.

- Ah - siento que se deprime un poco - ¿Pensé que podríamos ir juntos a la fiesta de fin de año? - su pregunta me sorprende.

- No creo que valla - respondo, ya que no es mi estilo mucho, ir de vestidos apretados y esas cosas.

- Es la última, y luego no habrá más fiestas así, ¿Vamos juntos? - me sonríe con su sonrisa perfecta.

- Lo pensaré - le respondo, aún falta un mes y un poco más, ni siquiera sé qué haré ese día.

- Bueno, no me defraudes, que mejor que ir con la chica mas linda y más simpática - me guiña el ojo y se vá.

No paro de reírme de imaginarme con tacos y vestido, luego de pensar en cosas formales me acordé de Sabrina y su amiga y debo ver ese tema.

- ¡Sabrina! - grito, esperando a que llegue a mi habitación.

- Dime - responde.

- Quiero que Josefina venga, me iré a bañar por mientras llega - le anunció y hago que parezca una orden.

Luego de ducharme y vestirme rápidamente, salgo a comprar algo, aprovechando que la amiga de Sabrina no ha llegado, menos mal al llegar a casa, están las dos sentadas.

- Hola - me saluda.

- ¿A dónde fuiste? - me pregunta Sabrina.

- Buenos chicas todas a mi pieza ya - las hago subir, sin responderle a ninguna de las dos.

- ¿Y ahora qué? - pregunta Sabrina.

- Cuéntame todo Josefina - digo mientras le hago con una mueca que se sientan.

- Estoy con atraso y me hice un test y salió positivo, y no deseo tener este bebé así que Sabrina me aconsejó ir al hospital por ayuda.

- Muy bien Sabrina, la ayuda de alguien mayor es buena, pero la cosa es que ustedes tiene 14 años, tienen cara de guagua, sí o sí , les llamarían a sus padres, por eso les ahorré ese momento - ambas me miran con cara confundida - ten - le pasó un test a Josefina.

- Ya te dije que me salió positivo - me responde al verlo.

- Te hiciste uno, y mínimo debes hacerte dos o tres, debes estar cien porciento segura, así que anda al baño, debes hacer pipí, vertirlo en un frasco y luego con este aparato - les muestro un gotero - sacas líquido y le colocas unas tres o cuatro gotas a la prueba de embarazo.

- Si lo sé, gracias - responde asustada.

- Me alegro, pero tenía que darte las indicaciones bien de todos modos.