Capitulo 21 - "Adopción".

5.7K 512 19
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Brook POV.

-¿Cómo dice? –es Aidan quien interrumpe el profundo silencio.

-Katy me pidió exclusivamente que me comunicara con el abogado de usted para discutir la custodia de su hija. Ella desea que usted y su esposo la compartan.

Aidan vuelve a mirarme.

Yo simplemente estoy ahí, existiendo. Sin moverme ni respirar, ni pensar.

-¿Es eso posible? –le pregunta Aidan a German.

-Brook tendría que aceptar. Y si, sería posible. Pero lo hemos hablado y creemos que hay otro camino –explica.

-¿Qué otro camino? –insiste.

-Primero que nada, Aidan, quiero que entiendas que Katy está renunciando... mejor dicho: renunció totalmente a todos los derechos que tiene sobre Dakota.

Mi boca se abre al instante, por la sorpresa.

-Solo con una condición –interviene el otro abogado-. Que no le prohíban ver a su hija.

-¿Qué? ¿Qué? –repite Aidan, creo que está igual de atónico que yo-. Ella ni siquiera tiene por que renunciar a... Dakota.

-No está renunciando a Dakota –corrige German-. Sino a sus derechos como madre. Y tiene que hacerlo si desea ceder la custodia al matrimonio que tienen ustedes.

-¿Es eso posible? –soy yo quien pregunta ahora-. ¿Puedo... puedo hacer eso?

-German y yo hablamos sobre una opción más conveniente –contesta el abogado de Katy-. Creemos que es mucho mejor si ustedes dos adoptan a Dakota.

-¿Adoptar a Dakota? –Inquiere Aidan-. ¿Cómo voy a adoptar a mi propia hija?

-Adoptarla como matrimonio –corrige-. Que pasen un proceso de adopción y así ambos puedan ser el padre de la niña. Katy... ya dio los permisos necesarios para todos los trámites que se decidan.

-Ustedes son los que sabrán que hacer –dice German.

Coloco ambas manos sobre los hombros de Aidan, como si necesitara apoyarme de él para mantenerme de pie.

-Necesitamos... hablarlo –dice él poniéndose de pie-. Brook y yo, a solas.

-Pueden tomar el tiempo que crean necesario –dice el abogado.

-Cinco minutos nos basta –intervengo yo.

En realidad no hay mucho por hablar.

Acordamos regresar en unos minutos, y salimos de la oficina.

Hay un pasillo totalmente vacío, ahí nos detenemos.

-¿Qué piensas? –me pregunta Aidan por lo bajo.

Delta  (Alfa y Beta, segunda parte.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora