31.

2.5K 364 102
                                    

Sorry,  tarde demasiado en actualizar... ¡Pero volví!

 Creo que deberías darme un aumento. O pagarme, al menos. Me dejas sin trabajo.

¡Solo narra el capítulo!  Bueno, está bien...

 El sol ya había despertado, y Dipper también. Este estaba susurrándole a Bill y Akami,  pidiéndoles que abrieran los ojos y se levantaran. Y,para su sorpresa; le hicieron caso.

Ambos bostezaron. -...¿Qué día es hoy? -
~Hoy es...~Se alarmó.~¡Día de visitar el pueblo!
+¿Eh? + La pelinegra tomó de la muñeca a Dipper,  y lo llevó corriendo a su habitación.
Empezó a arrojar prendas,  entonces el castaño entendió la idea;  tomó algunas de ellas y se vistió.
Terminó con un vestido verde con detalles rosas,  una capa corta de este último color, y, un cinturón de corsé. Oh,  y obviamente,  un abrigo.

***

Ahora mismo se encontraban en el salón que conducía a la gran puerta principal.
Bill se acercó a ellos,  luciendo un elegante traje.
-Hoy, Punzie,  conocerás el pueblo.  A los campesinos,  a los artesanos,  la burguesía... Los niños... -
Dipper no tuvo tiempo de responder nada,  ya que el rubio lo llevó  rápidamente a el exterior,  dejando atrás a  Akami,  que los saludó con la mano.
+¿Y ahora que haremos? + preguntó,  extrañado.
-Pues,  primero,  iremos en carruaje hasta el centro del pueblo.- El castaño asintió.

Hicieron lo predicho.  En medio del camino,  a Dipper se le ocurrió preguntar algo.
+¿Qué tengo que hacer? + El rubio lo miró y se cruzó de brazos.
-¿No es obvio?  Tienes que causar una buena impresión. -
+¿Y cómo hago eso? + Bill suspiró.
-Pues,  no sé,  sonríe a la gente,  compórtate  bien,  se gentil, juega con los niños...  Y todas esas cosas de princesas...- El menor asintió.

Ya habían llegado a su destino.
La carroza se detuvo. El escolta abrió la puerta,  y Bill bajó. Este (por razones que raramente no sé,  o tal vez sí)  le extendió su mano a Dipper, ayudándolo a bajar.

Los aldeanos los rodeaban;  y el castaño,  ya sonrojado, comenzó a saludarlos a todos.
Varios lo admiraban,  y se lo decían.
Las mujeres, amaban su cabello.
Los hombres, halagaban su belleza.
Y las mujeres mayores, entre "susurros" opinaban que tenía "buenas caderas para parir bebés"

Dipper no sabía como responder a esos comentarios,  solo sonreía y reía suavemente. No podía evitar ruborizarse más de lo que ya estaba.
Y de repente, llegaron los niños.
Algunos,  empezaron a jugar con el largo cabello.  Otros,  miraban con atención a el rubio y a el castaño, que,  se habían tomado de la mano; según Dipper y Bill,  solo era para fingir.

Una niña rubia, de dos coletas, se acercó a ellos. Les sonrió, y dijo,  sin vergüenza alguna:
*Y... ¿Cuándo se van a casar? *
Ambos quedaron atónitos.
+¿C-casarse? +
La niña asintió,  y llamó a otros niños, que relataron el destino de Rapunzel.
*Se casaron... ¡Y vivieron felices para siempre! *
Bill y Dipper reaccionaron.  Claro,  casarse...  Rayos.

Se me dio por dibujar :v
    -JanaFalls.








Dippunzel. ( BillDip A.U )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora