Please, Don't Go [Jacksepticeye]

VI

Se sintió como una basura en cuanto él miró su rostro, se odió tanto en cuanto lo vio emocionarse y levantarse para abrazarle como si su vida dependiera de sentir su tacto. Se había alejado y él recibía como si siempre hubiera estado junto a él.

—¡____! –gritó este emocionado, llamando la atención de los presentes.–

—Seán . . . –dijo aceptando el abrazo.–

Reposo su barbilla en el hombro del chico y dejó las lágrimas salir, a lo cual lo apretujo un poco más, su miedo la había hecho alejarse de aquella manera . . . Que teniéndole en sus brazos le hacía sentir culpable.

Just breathe, don't drown your heart.

[ . . . ]

Posaba su cabeza sobre sus piernas, el dolor en su pecho no significaba nada en ese momento. Acariciaba sus verdosos cabellos como hacía antes de desaparecer de su vida, la suave brisa y aquel árbol le recordaban a aquel día.

—Te busque –comentó el de ojos azules.– pero jamás supe nada de ti.

Guardó silencio, ¿qué iba a decirle?, ¿qué era una cobarde y que por eso se alejó?.

—I'm not what you wanted, I'm not what you needed –respondió utilizando la frase de una canción.–

Jack frunció el ceño, no era la respuesta que esperaba. Pero decidió dejarlo de lado, disfrutando de como jugaba con su cabellera, haciendo remolinos causando que esos trozos se enredaran, como en los viejos tiempos.

—¿Recuerdas cuando teníamos 17? –volvió a hablar _____.–

—¿Por qué no haría de hacerlo? Fue uno de los mejores años de mi vida –contestó con una sonrisa, el año más loco en aquellos tiempos.–

—Siempre que intento dormir recuerdo . . . Eso –continuó para soltar un leve suspiro y picar con la punta de su dedo la nariz de Jack.– la culpa lo provoca, ¿sabes? Porque te prometí que jamás estarías solo y . . .

El se azulados ojos se sentó, recordaba perfectamente como es que ella apretaba suavemente sus muñecas por encima de aquellos vendados que ella misma le había hecho, recordaba perfectamente como es que esta lloraba por miedo a perderle.
Una leve sonrisa apareció en su rostro y rasco su nunca, en sus muñecas aún estaban de manera menos visibles aquellas marcas.

—No fue tu culpa y jamás la será –le interrumpió para darle el último sorbo a su café y dejar el vacío vaso a su lado.–  yo fui quien hizo que te alejaras.

Al escucharle decir eso sintió como si miles de dagas atravesaran su pecho, el hecho que se culpará a si mismo por algo que ella había hecho . . . Le hacía sentir aun más culpa.

—Pero yo fui la que se alejó –contradijo bajando la mirada, jugando con sus pulgares mientras que un nudo en su garganta comenzaba a hacerse presente.–

—Hey, está bien –dijo regalándole una sincera sonrisa, una de esas que sólo le regalaba a ella para tomar con delicadeza su mano, acariciando el dorso de esta.– después de todo, casi te tiró cuando te empuje, ya también me hubiera alejado de mi mismo –bromeó.–

Con aquel comentario logro hacer que ____ sonriera un poco, entonces le miró a los ojos, su expresión cambio una de preocupación.

—Y . . . ¿cómo seguiste? Ya sabes –preguntó haciendo referencia a sus problemas de depresión y ansiedad.–

—Oh, bueno –rió levemente.– a habido ciertas complicaciones.

—¿Pero has estado bien? –volvió a cuestionar apretando un poco de la mano de Seán.–

Eso era lo que lo había vuelto loco cuando la conoció, el como se preocupaba por él hacía que se corazón palpitara de una bella manera, lo hacía sentir querido.

—Podría estar mejor –respondió sin mentir.–

Y vaya que no lo hacía, una que otra voz se presentaba en su cabeza diciéndole que sólo lograría alejarla una vez más y eso era lo menos que quería.

Continuará . . .